𝖈𝖆𝖘𝖎 𝖆𝖓𝖌𝖊𝖑𝖊𝖘 : 𝖔𝖈𝖍𝖔 𝖑𝖑𝖆𝖛𝖊𝖘

32: De una manera o de otra

Al otro día tuvieron sus clases normales, además de los talleres del hogar, algunas de las chicas habían asistido a clase de cocina, Sol ayudo a cocinar unas galletitas de vainilla con chispas de chocolate. Como se había ensuciado un poco la ropa fue a cambiarse y se puso un jean que le llegaba un poco mas arriba de la cadera y una remera con flores azules.

Cuando volvio a la cocina vio a Tefi y a Melody apoyadas sobre la mesada en la parte cerca del hogar a leña, Malvina seguía con su delantal y estaba contra la mesa y Feli estaba cerca del horno.

-Y esta noche empiezan mis clases de canto y de expresión musical, las quiero a todas ahí eh- decía la adulta emocionada mientras las señalaba a todas las presentes, Malvina comenzó a bailar en el lugar siendo observada por todos- Usted no Malvina, mejor ocúpese de Esperanza

Sol sonrió viendo a la adulta.

-Bueno, música de suspenso- dijo mientras abría el horno y sacaba la bandeja de galletitas- ¡Calaveritas!

Las galletitas tenían la forma de una calavera y las chispas de chocolate estaban distribuidas para formar los ojos y la boca.

-Que cosa, son como macabras- dijo Sol mientras sonreía levemente, y mientras miraba a la adulta, en eso llega Caridad.

-Es que me gusta jugar a ser obscura- dijo mientras reía un poco, tomo un frasco y una cuchara- Y le vamos a poner mermelada de arándanos, rojo sangre, para entretener a los chicos, ¿No? Que son medio morbosos hoy día.

-Sorry gordi, vos la del dedo, ¿No pensase ayudar?- le pregunto Malvina a Melody.

-Ay, yo estoy un poco revuelta, ¿Vos no Tefi?- dijo la jirafa.

-¿Sabes que si?, como me conoces- le sonríe la flaquita para luego decir.

-¿Queres que se los lleve a los chicos?- le pregunto Sol a Feli acercándose para ver mejor las galletitas, que olían riquísimo.

-Ay, pero están en clase de cruz rojo, ojo eh- decía Feli mientras le ponía mermelada a las galletitas.

-¡Ay, yo voy!- rápidamente, e incluso desesperadamente, Melody dejo sus sitio y empujo a Feli para tomar la bandeja con unos guantes, ignorando los reclamos de la adulta diciendo que estaba caliente.

-Nosotras vamos- Tefi imito la acción de su amiga y se fueron juntas- Chau.

Sol se aparto un poco y mientras Malvina hablaba con Felicitas, ella se dispuso a llamar a Simón, tenia pensado salir a correr después y como el le iba dicho de entrenar antes, pensó que no habría problema.

-Hola- dijo cortamente Simón cuando atendió el teléfono.

-¿Que onda?, Me rompiste tanto para entrenar y ¿ahora me dejas en banda?- dijo para luego reír levemente- Quería saber si querías correr conmigo.

-Pero Sol, ¿No fuiste vos la que me dijo que cortáramos con esto?, ¿De que me estas hablando?- el tono de el además de cansado sonaba enojado.

-Si... Pero, nada, pensé que podíamos entrenar juntos- dijo tímidamente, no entendía porque estaba enojado, si, medio como que le corto el rostro antes pero pensaba que podían ser amigos aun así.

-No Sol y vos sabes porque no.

-No, no se porque- dijo ella extrañada.

-¿Ah, no sabes?- dijo irónico, ella se extraño mas- Puede ser que sea un poco tarado, pero si me das dos días y un poco de información me puedo dar cuenta cual es tu juego. Venís, me tiras un centro a mi, después le caes a Thiago y yo así no quiero jugar, así que me abro.