Capitulo 10 (Traición. Amistad y Desconocido)

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—Aaagg mi cabeza—

— T/N me alegra mucho que estés bien —

— ¿Kotori que paso? — Cuando me levanto busco en mis bolsillos de mi chamarra si desde ese impacto no se había caído la foto que tenía.

— Fue mi culpa te deje tan atrás que te golpeaste con una chica — La chica me veía con algo de preocupación pero tenía la familiaridad de Nino.

— Disculpame por lo sucedido, tenía un poco de prisa y no me fijé. —

— No tengas cuidado. Es solo un extranjero que viene de visita. —

— Kotori. — susurrando.

— Ya vámonos — mientras me veía con celos — nos tenemos que ir — Dándole una sonrisa falsa aquella chica.

— Espera Kotori, tengo algo que decirle. —

— Ya vámonos, tenemos cosas que hacer. —

La chica solamente me sonrió y se marcho, sin embargo Kotori no me dejaba de agarrar el brazo con suma intensidad.

— Kotori hey hey, parece que me quieres arrancar el brazo que te pasa. —

— No es nada. —

— Acaso te molesto que esa chica se preocupara por mi. — Kotori se detuvo por un instante.

— Por supuesto que sí estoy enojada como, quieres que actúe si eres un maldito galán con las mujeres. —

— No te creo — riéndome pues quien se fijaría en mi, solo tengo uso de razón y mis palabras aveces endulzan el oído del ser.

— En absoluto, pero vamos al primer templo. —

Cuando nos dirigimos al primer templo pude ver qué algunos lugares ya habían venido las quintillizas.

— Bien T/N tenemos que subir estás escaleras. —

Pude reconocer este lugar aunque si era un poco inclinado y cansado pero eso no me detuvo y seguí, aunque Kotori no tenía la condición física perfecta no se detuvo.

— Cuánto falta Kotori. —

— No falta mucho, ánimo. —

— Por qué siento que este lugar se siente una vibra algo distinta. — decía mientras caminaba por este camino

— T/N date prisa o si no te dejare atrás. —

— Ya no puedo Kotori, dejame descansar y ahorita te alcanzo. —

El sol pegaba muy intensamente y solo veía los orificios de los castillos rojos de Japón y el hecho de antes de que cerrará los ojos veo esa pequeña mariposa con los colores que distinguían a Nino. Y escuchar el sonido de unas campanas de una iglesia.

— (¿Qué?, ¿dónde estoy?) —

Veía a mis alrededores y estaba en un altar pero la novia tenía su velo tapando su rostro pero su apariencia física era familiar, se tratara de Nino?.

Cuando el padre estaba apunto de decir los votos para casar a las personas. Desperté gracias a que alguien me echó agua a la cara y veo a la chica con la que me tope.

— Oye tú, levántate, no es bueno que te quedes aquí. —

— Valla sorpresa eres la chica del mercado. —

— Jejejeje no me digas así llámame por mi nombre. —

— ¿Cuál es tu nombre?. —

— Oh, bueno yo me llamo Mío Kurosaki. —

Encontrando la Luz [ Nino Nakano X Tu ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora