EL LOQUITO DEL CALLEJÓN || Kazutora Hanemiya x Lectora

03; helado

Regresas a casa con un paso lento, pues acabas de comprar un helado.

Caminas relajada disfrutando el sabor de tu helado, sin saber que alguien te observa.

- Ay, Dios...-.

Se agarra fuertemente de su propia sudadera, su deseo lo estaba traicionando.

Mientras que su imaginación esta volando, aquel movimiento que haces con la lengua sobre el helado, lo esta haciendo temblar.

- controlate Kazutora -.

Se regaña cada que sentía que su cuerpo reacciona a sus propios estímulos.

- ¿Que haces? -.

Interrumpió el joven de cabello largo y colmillos.

- ¿yo? Evitando que Kazutora Junior se quiera levantar -.

- ¿Kazutora Junior? -.

Baji no comprendió la referencia, solo fue cuestión de segundos para que soltara la carcajada.

- ¿Que viste? ¿Un fierro super sexy? -.

- Ja, no, pero no sabes cuanto quisiera meterle mi fierro -.

Baji volvió a reír, mientras le dirige la mirada a Kazutora.

- ¿y? ¿Me vas a decir que miraste? -.

- solo a mi novia -.

- ¿tu novia? ¿Tienes novia? -.

- claro que tengo -.

Baji volvió a reír, no le creía nada a su amigo.

- nada más digo, las revistas no pueden ser tus novias -.

- ella no es de una revista -.

- ¿entonces? -.

- ella es una chica real y linda -.

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Caminas en dirección a tu escuela, cuando escuchas una discusión algo agresiva y nada agradable.

- ¡no jodas, Kazutora! -.

- cállate, no es tu asunto -.

El chico estaba tapado por el gorro de la sudadera, por lo cual no pudiste verlo con claridad, mientras que la chica te resultó realmente linda.

- ¿¡Por ella me dejaste!? -.

La chica suena bastante molesta mientras que el chico parecía estar a la defensiva.

- ¡Es una niña, Kazutora! -.

- ¡Es demasiado grande para poder estar conmigo! Y más linda que tu -.

- no te niego que la nena es linda, pero es una niña -.

Necesitas pasar por donde ellos están parados pero tenias pena como para interrumpir, así que mejor cruzas la calle y te alejas apurada.

- cállate y no estorbes -.

- no hagas una estupidez -.

Y sin más, la chica le entregó el celular a Kazutora, pues le había quitado el celular, notando la gran variedad de fotos de la amada de Kazutora.
Pero a sus ojos, Sora, parece una niña pequeña e indefensa.

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"Que buen chisme el de la mañana, tendré que contárselo a Leli"