EL LOQUITO DEL CALLEJÓN || Kazutora Hanemiya x Lectora

13; Pastilla

- toma esto y se quitara -. L

Tomas la pastilla en tu mano y la miras con ligera confusión.

- es legal, solo es para prevenir -. L

Dijo la rubia mientras sirve un vaso con agua y te lo extiende.
Rápidamente tomas la pastilla con ayuda del agua.

- bien, ahora reza por qué esto salga bien y no haya problemas -. L

Asientes en silencio, es lo mejor, no podías tener un bebé, morirías en el parto y en el caso de sobrevivir sería un problema mantenerlo.

Además, Kazutora no podría mantener un bebé, mucho menos lograr estabilidad economica para una "familia".

- ¿en que piensas? -. L

- nada -. S

- muy bien, Sora, ahora...¿quien es el idiota que estuvo en tu cama? -. L

Tragas saliva y bajas la mirada, huyendo del sentimiento de culpabilidad que se forma en tu interior por haber permitido que aquel chico abriera tu capullo.

- no lo conoces -. S

- eso es aún peor, ten la confianza, yo soy tu amiga -. L

La rubia se sentó a tu lado y tomo tu mano, esta preocupada, angustiada y ligeramente temerosa, tenía miedo de que hubieras sido forzada.

- él...bueno, lo conocí una tarde cuando me asalto -. S

- ¿asalto? ¿Es un criminal? -. L

Leli se sintió aún más angustiada, ¿que tipo de persona era ese chico?, el simple hecho de notar como tu rostro muestra desánimo ante la situación.

- ¿te forzó? -. L

Te quedas pensando por varios segundos, Kazutora siempre era persistente y aferrado, llegando a ser brusco cuando se trata de demostrar su amor hacia ti.

Aquella noche no fue la excepción, aún tenías marcas en tus piernas y cadera, sabias muy bien que Kazutora no se iría hasta obtener lo que quería.

Niegas con la cabeza, no querías entrar en detalles con Leli, ella no tenía que saber como todo en esa noche se nubló para ti, no querías decirle que tu fuerza se desvaneció.

Escuchas un suspiro salir de los labios de la rubia para después soltar tu mano.

- ¿te sientes bien? -. L

- si, no pasa nada -. S