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P R Ó L O G O
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Desde que tiene uso de razón, TaeHyung había vivido en el orfanato sido huérfano.

A pesar de que el lugar no era el mejor, estaba realmente agradecido con el universo, porque a pesar de todo tenía una familia y un hogar.

No pasaba frío ni mucho menos hambre, recibía una buena educación y sobre todo amor, o eso creía él.

Al principio estaba lleno de ilusiones y esperanzas de algún día ser adoptado por alguna pareja.

Sus nanas del orfanato le habían dicho que para que eso pasara él tenía que portarse bien, así que TaeHyung se esmeró en ser el mejor niño bien portado.

Sin embargo, a pesar de todos sus esfuerzos, siempre era la misma historia de siempre.

Una pareja venía buscando a un adorable niño a quien acoger, veian a TaeHyung y de inmediato quedaban enamorados de su belleza pura (ya que este tenía una cabellera dorada y sedosa y unos ojos como el cielo) ycarisma. Sumando puntos por su gran inteligencia y astucia.

Todos habían querido adoptar a TaeHyung hasta que se enteraban que era un doncel.

Si bien a él no le importaba ser uno parecía que a la demás gente sí.

Poco a poco vio como todos sus amigos fueron adoptándose por una familia, todos menos él, pasaba las noches llorando en brazos de sus nanas y pidiendo algún día ser elegido por una familia.

Pese aquello, sus esperanzas seguía en pie.

Hasta que cumplió 8 años y se dio cuenta de la cruda realidad. Sus posibilidades de ser apoyado habían caído, puesto que las parejas preferían a los niños pequeños y evidentemente él no era uno.

No solo eso, sus nanas empezaron a tratarle diferente, tuvo que dejar de estudiar y comenzar a ayudar en el orfanato.

Primero fueron tareas simples como lavar trastes o incluso la ropa, pero cada vez eran más las tareas que le otorgaban ya que él era uno de los pocos niños mayores.

Cansado de aquello tomó la decisión de escapar.

Así a sus 11 años, una noche tomó todas sus pertenencias (las cuales eran pocas) y huyó por una ventana que dejó abierta.

Era la primera vez que salía más allá del patio de juegos.

Todo era maravillaba aquel par de ojitos azules, no sabía a ciencia cierta a dónde ir, pero como siempre siguió su astucia caminando sin rumbo un par de horas.

Hasta llegar a una parte de la ciudad donde estaba iluminada por cientos de luces coloridas.

Sus ojos se abrieron más por el espectáculo, pues no se parecía en nada a lo que había visto anteriormente.

Por mucho que estuviera asombrado, el cansancio, el dolor de pies y el hambre le habían alcanzado, pero no iba a dar un paso para atrás, no se arrepentía de su decisión.

Aseguró las correas de su mochila y caminó seguro entre todas las personas, algunos lo veían con curiosidad puesto que no era común ver a un niño por aquella zona.

—¡Largo de aquí!— Gritó un chico de cabellera rubia y mayor que él, jalando a una chica de las greñas.

—¡Genial ahora nos quedamos sin una mesera!— Se quejó al aire.

Suggar Baby 《▪︎JJK+KTH▪︎》 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora