When the saints go marching || Freddytabo

12. Hasta que el pecado nos separe 🔞.

Ya eran las 20 de la noche, Gus llegaba a la mansion en zona rica que compartía con los otros dos hombres. Prendió las luces de la sala y se dio cuenta que aun no habían regresado, la ultima vez que los vio fue en el estacionamiento en la despedida del FBI, comenzaba a preocuparse, habia intentado por todos los medios de que Freddy no fuera a patrullar con Conway ya que pudo escuchar con sus oidos en el tono que el superintendente lo habia solicitado y le provoco cierto temor en lo más profundo de su ser.

Dejo los documentos de los tramites de adopcion de Mía sobre la mesa de la sala y se dedico a acomodar y limpiar la casa a fondo, ya que si se guiaba por las palabras que horacio le habia dicho antes de irse, la trabajadora social iria al dia siguiente, asi que hizo lo mejor que pudo para dejar reluciente todos los rincones de la mansion de Trucazo que parecia que hace mucho tiempo nadie lo hacia.

Ya que hasta nuevo aviso, vivirian allí los tres, se paseo por el segundo cuarto de huéspedes y también lo limpio a fondo. Cambio las sabanas del colchon y todo aun que sea para que estuviera presentable para la mujer, pediria permiso a Freddy luego para poder decorarla y convertirla en una habitacion provisoria para la bebe. Gonzalo se habia comprometido a ayudarlo a mudar algunas pertenencias de la bebe del departamento de Kylie, porque apesar de que la bebe era super pequeña, apenas y tenia unos cortos meses de vida, extrañaria el aroma de su madre, y el aroma del ambiente al que estaba acostumbrada. Esto iria por etapas, y el principio de la adaptación siempre era el más complicado. Pero él ya habia hecho su promesa, y juro delante de algún ser omnipotente que se esforzaría al maximo por esa niña.

Se dedico dos horas a limpiarlo todo, y en cuanto acabo, comio unas botanas saladas que encontro por la lacena de la cocina. Y en cuanto sintio sus ojos pesados, se metio al baño para ducharse. Al terminar se puso una camisa negra que freddy le habia dejado para que usara como pijama, y un boxer blanco, se dirigio a la habitacion principal, que era la que ocupaba ahora y se tiro rendido en la cama, abrazando una almohada, tardando apenas unos breves minutos en caer en los brazos de morfeo.

*・゜・*:.。.*.。.:*・☆・゜・*:.。.*.。.:*・☆・゜・*:.。.*.。.:*・☆・゜・                               *・゜・*:.。.*.。.:*・ Escena +21  *・゜・*:.。
・*:.。.*.。.: leer con precaucion. *:.・*:.。.*.。.:*   Lenguaje obsceno.:*・☆・゜・*:.。.*.。.:*・゜・**・゜・*:.。.*.。.:*・☆・゜・*:.。.*.。.:*・☆・゜・

Recien a eso de las 3 de la madrugada, la puerta principal de la casa se abrió dejando entrar a los dos hombres faltantes de la casa, Freddy apenas entro noto las pertenencias de Gustabo sobre la mesa que adornaba el recibidor de la casa. Asi que él tambien dejo todas sus pertenencias policiales alli, armas, placas y todo lo restante, acción que seguido imito el superintendente.

Freddy caminaba cojeando muy levemente una pierna, fue al baño directamente para tomar una ducha rapida. Se miro al espejo y vio su rostro reflejado en él, la pelea que tuvo con Conway habia dejado marca en ambos, él apenas tenia una tajadura encima de la comisura superior de sus labios y algunos moretones más sobre el abdomen, maldijo en su mente a Jack, pero siendo realistas las cosas pudieron haberse salido aún más de control y solo habia recibido unos cuantos golpes y no mucho más que eso, hasta que en cierto momento jack lo tomo del mentón con fuerza y le dejo un breve beso en los labios. Finalmente ambos hombres eligieron que camino querian tomar con el rubio, la duda era si Gustabo estaba dispuesto a seguirles la corriente o si optaria por quedarse solo con uno de ellos, debían saber que el pecado sería consumado o no.

Jack se quedo en la sala, luego de haberse sacado la corbata, desaflojando totalmente su camisa, desabrochando los botones, por fin podia respirar con
tranquilidad. Unos documentos encima de la mesa de la sala llamaron su atencion asi que tomo algunos minutos leyendolos con completa atencion, frunció levemente el ceño y recordo la imagen de Horacio llevandose a Gustabo para hablar de algo a solas, entonces entendió inmediatamente la movida, suspiro levemente y llevo su mano a acariciar su ceño fruncido en un intento por aflojarlo. Vio la firma de Gustabo en cada uno de esos papeles, no lograba entender como era posible que haya tomado una decisión tan importante sin siquiera consultárselo. Dejo los papeles en donde los encontró y procedió tambien a ducharse en el baño de los invitados.