Parte 14.

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—¿Por qué te fuiste tan temprano? —pregunto Gemini a Fourth. El mayor ya estaba sentado en su lugar, sacando los libros, de su mochila, correspondientes a la materia que le tocaba. Gemini ignoro eso—. Hoy me levanté con la esperanza de recibir un beso de buenos días, de la persona que amo y se da la sorpresa de que, ya no estabas en la cama.                                                                          
Fourth se sorprendió por las habilidades actorales de Gemini Norawit, podría incluso ganarle a su madre y ella, ya tenía una trayectoria larga y envidiable. A pesar de todo, trato de evitar el sonrojo, que las palabras que su amigo y novio de mentiras, le provocaba. Sus compañeros de clase estaban ahí, algunos ignorando su presencia, otros observandolos como si fueran bichos raros o una novedad.

—Hablo enserio Fourth, después de lo de anoche...

Por supuesto, el chico Nattawat se sonrojo tratando de no recordar lo que habían hecho. Nada que no hicieran las parejas de su edad, pero ellos, simplemente había cruzado la línea de la amistad, metiéndose más profundamente, al abismo de los problemas.

Metido en sus pensamientos no se percata, del momento en el que, Gemini lo tomá de la barbilla y le da un beso. Fue un pequeño roce en los labios que no se comparaban a las besos que se habían dado unas horas antes y aún así su corazón latía de forma desesperada.

—Ochenta y nueve —dijo Gemini, y el mayor sabia que Norawit hablaba de los besos que se habían dado, hasta ese momento—, pero no me gustan los números impares —dijo, por lo que tomó la barbilla del mayor  nuevamente, volviendo a besarlo. Sonriendo descaradamente, se alejó y caminó hasta su asiento.

Por su parte, Fourth sentía que su corazón se salía de su pecho; que no cabía en él: latía a un ritmo desenfrenado, haciendo "boom, boom, boom", una y otra vez, tanto que lo asustaba de todas las formas posibles.                                                                          

Las cosas se estaban saliendo de control y él no podía dejar de pensar en  el momento en el que se besaron por primera vez. En aquel momento, Fourth sabía, aunque quiso ignorarlo, que estaba perdido; que había entrado a un hoyo profundo y sin salida.

Él amaba a su madre y amaba a su hermana pequeña, pero no era más que un amor fraternal; apreciaba a sus amigos y compañeros, pero nunca fue tan fuerte como con Gemini Norawit y es que, aunque siempre trato de ser una persona amorosa con todos, con el chico Norawit, había una diferencia muy grande. Fourth sabía que si lo llegaba a perder, no sabría que hacer con su vida.

Era consciente, de que en el momento, en el que Gemini llegó a él proponiéndole que fueran novios de mentiras; debió haberse negado, pero no puedo:  ahora tenía que confrontar las consecuencias de no haberlo rechazado. La mayor consecuencia de ello y la que más le asustaba, era que podía enamorarse de su mejor amigo.

Si es que, no lo estaba todavía.

¿A los cuantos besos dejamos de ser amigos? | GeminiFourth Donde viven las historias. Descúbrelo ahora