𝐒𝐰𝐞𝐞𝐭 𝐂𝐡𝐞𝐜𝐨 -𝘈𝘭𝘭𝘴 𝘣𝘺 𝘴𝘦𝘳𝘨𝘪𝘰

𝘚𝘦𝘣 𝘹 𝘊𝘩𝘦𝘤𝘰 2/2

— ¡Suéltalo! — una voz fuerte y demandante se hizo presente, provocando que ambos se quedarán quietos.

Checo cerró sus ojos con fuerza, sintiendo como su cuerpo empezaba a temblar ante las emociones revueltas y el efecto de la voz de su alfa.

“Seb, Alfa, vino por nosotros”.

Su omega lloriqueo, llamando más desesperado a él rubio. No tenían una marca, pero existe un lazo que ambos crearon, un vínculo sin necesidad de una mordida. Cómo si fueran destinados.

— Alfa... — Sergio cómo pudo lo miro, sus ojos se aguaron cuando su mirada conecto con la grisesa del rubio.

Algo en Sebastián se enfureció, no le gustaba esa imágen, su omega así... Siendo agarrado por ese bastardo.

Con una rapidez que tomó desprevenido al británico, tomo la cintura del pecoso, y lo haló hacía él, con fuerza pero sin perder el cuidado y delicadeza. No quiere asustarlo.
Checo soltó un chillido cuando su cuerpo impacto contra el suyo, casi al instante se restregó en el. Podía sentir el cuerpo del pecoso temblar, aquello fue el colmo.

Lo rodeó con uno de sus brazos, pegándolo incluso más a él. Cuando su pecoso estuvo entre sus brazos, miró directamente hacia el frente, observando cómo el alfa británico ya se encontraba de pie, retandolo con su mirada.

“Imbecil.”

Masculló su Alfa, molesto con ese tipo, ¿Cómo se atrevió a tocar así a un Omega?, ¿A su Omega?

— ¿Qué crees que estabas haciendo?— apesar de estar lo que le sigue de enojado, habló lo más tranquilo posible, no quería asustar más a Sergio.

—¿Tú qué crees? ¡Me robaste a mi Omega!— le reclamó el británico.

Todavía se dignaba a reclamarlo como suyo, ¿Quién se creía este imbécil?

— ¿Tú Omega? Estás idiota ¿O qué?, nunca fue tuyo, ya súperalo.— le reprendió, sintiendo como Checo se aferraba torpemente a su cuerpo.

— ¡Era mío!— Lewis usó su voz Alfa. Provocando en Sergio un espasmo, que no pasó desapercibido por Vettel. Así que se permitió liberar su aroma, rodeando el cuerpo de Checo, era casi posesivo, pero no dejaba de ser protector.

— ¡Cállate!— sin contenerse más uso su voz, que al parecer dejo al alfa de Lewis inmóvil. Secretamente era un alfa cien por ciento puro, Lewis no lo era en ningún sentido.

Lewis apesar de lo aturdido y confuso que fue aquel mandato, no desistió. Agrió su aroma incluso más, intentando verse amenazante, aunque Sebastián solo podía sentir asco y repulsión.

— Alejate de él, Sergio es mío, siempre lo será, un día estará en mis brazos y tú vas a llorar como un marica.— soltó el británico, sonando tan cínicamente que le robó un temblor a Sergio.

— En serio estás demente, ¿Tanto te crees? El no te quiere, te lo ha dicho, tú eres el único que no lo acepta.— le señaló con su mano libre, soltando un gruñido en el proceso.— Él único marica aquí eres tú.

Aquello enfureció a Hamilton, quien quiso acercarse a el para golpearlo, pero no sé inmutuo, abrazo a Sergio, protegiéndolo y dejando que este se restregara en su cuello.

—Das un paso más y te destrozare tu rostro, Alfa inútil.— amenazó con todo y su voz Alfa.

Lewis se detuvo al oír aquella amenaza, una pelea, no puede permitirse una pelea, lo sacarán del equipo de fútbol si lo hace...
Lo único que pudo hacer fue soltar un gruñido, aún más molesto. Aunque cedió ante la amenaza. No está en posición de ganar.