BALA || IMAGINA CON JEON JUNGKOOK

CAPITULO 6

Viernes 12 de abril del 2024....

Me costó tanto encontrarla para que ese idiota la dejara en manos de personas que no tienen registros sobre su "hospital psiquiátrico" especializado. Maldita sea. Tan cerca y tan lejos.... Pero no va a escapar de mi, ella es mía. Así debe ser.

──Llegaste tarde.──Ese sarcasmo.── Fue trasladada  el día de ayer, en la mañana.

Solo tenías que esperar unas horas por mi. ¡Por qué te fuiste sin mí!. Esto me está volviendo loco, no puedo con esto, no puedo saber que estás lejos de mi. Te quiero conmigo, quiero que seas felíz a mi lado. Solo debes pertenecer a mi.

──Por que no me avisaste.──Y mi mirada estaba puesta en ella.──¿Acaso no te deje a su cuidado?

──No soy su niñera Jungkook. No tengo por qué avisarte de nada.

Mi paciencia se agotó. La sujete con fuerza del cuello y estrellando su cuerpo contra aquella pared fría y dura. Por ella soy capaz de matar y por ella.... sacrificaría al mundo por verla feliz. Estoy dispuesto a todo por ella, absolutamente a todo. La solté, no morirá, no... hoy.

──Yeji... de verdad preciosa, no me provoques.──Sonrei un poco.

──Jungkook y-...──Me acerque de nuevo pero está vez, rozando mi dedo anular con sus labios.──P-... prometo que te ayudaré a encontrarla.

──Lo se preciosa, eres muy obediente.

No voy a dejar que me la arrebaten tan fácil. Yo la vi crecer y convertirse en mujer, siempre estuve yo ahí, en su vida. Es hora de que ella esté en la mía, hasta que muera a mi lado. Debo ser más inteligente y pensar con frialdad, si. Eso haré.

...

Después de ese encuentro tan agradable para los dos. Decidí ir con el presidente Jeon, mi padre. Entré a su oficina y si. Ahí estaba su maldita secretaria, la muy zorra todavía tuvo el descaro de mirarme a los ojos y salir como si nada. Mamá no se merece nada de esto.... Debe estar revolcándose en su tumba, bueno. Si es que tiene una.

──¿Puedes tocar porfavor?.──Viejo estúpido.──¿Que quieres Jungkook?.

Suspiré un poco y me senté frente a el, para estar más cómodo.

──Quiero que me digas donde está Bala.

Comenzó a reír. Vaya.... de verdad lo eh subestimado. No es estúpido. Es un completo imbécil.

──¿Y como quieres que haga eso?.──Pregunto burlón.

──Investigue, presidente Jeon.──Me levanté de mi asiento.──Usted es perfecto en eso.

Me acerque un poco más a él, hasta quedar frente a frente y de por medio, el gran escritorio café acabado. Tire todos los documentos y su ridícula placa.

──Estas sobrepasando tus límites.

──Encuentrala y yo iré por ella. Después de esto... no volverás a saber de mi.

No pensaba decir nada más, el sabía de lo que era capaz. Estaba apunto de salir de su oficina hasta que me detuvo al pronunciar mi nombre de su asquerosa boca.

──Sabes bien que no puedes estar con ella.

Solo una pequeña risa salió de mi y después la borre, jamás lo ví a la cara, solo estaba de espaldas, podía escuchar su respiración entrecortada. Podría jurar que le iba a dar un infarto pero por desgracia, el viejo era muy sano.

──Tu y mamá eran primos.──Sonrei de nuevo.──No hay impedimento para esto.

Cerré la puerta detrás de mi. No me importa si hay límites, yo los cruzaré. Pero no dejaré que nada me detenga, no. Hasta poder encontrarla.