Fuera de mi linea, rumbos diferentes

Orígenes: Lucifer

Lugar actual: Zona de escritores, habitación de Antonio.

El sol recién golpeaba las ventanas, dando como significado el inicio de una nueva mañana para todas y todos.

Aunque habia personas que preferirían seguir durmiendo hasta medio día como sería el caso de Antonio que recibía los rayos del sol directo a la cara, dando como resultado su despertar.

Antonio: Solo 5 minutos... sol de mierda -dijo mientras tomaba una almohada y se la colocaba sobre la cara-

Rápi: ¿Por qué tan irritable, Papi? -pregunta curiosa-

Antonio: Quiero seguir durmiendo...-se da cuenta- Espera...

Rápidamente se quitaría la almohada de la cara y giraría su cabeza a la izquierda, quedándose boquiabierto y en shock al ver a Rapi a su lado.

Está se cubria su escote con la cobija blanca que también cubria su cuerpo, su sonrisa era coqueta y seductora al observarlo, asiendo sentir a Antonio agitado.

Antonio: ¿¡Por qué estás aquí!? -pregunta con alta confusión-

No recibiría respuesta, pero si acción pues Rapi se acercó más a este y movería su mano a su barbilla, haciendo que la mirara a los ojos.

Pondría una sonrisa que tenía la combinación de burla, coquetería y seducción, riendo un poco antes de hablar con un tono que resonaba su coqueteo.

Rapi: ¿Que sucede? ¿Nervioso? -pregunta con jugueteo-

Antonio: Aún no me respondes lo que pregunte, ¿Por qué estás aquí? -vuelve a preguntar con nervios-

Rápi: ¿Que tiene de malo dormir aquí? Es comodo, lindo y lo mejor de todo...estás tu -mueve su mano lentamente hasta detrás de su cuello-

Antonio: Más te vale que dejes de comportarte así y...-seria interrumpido-

Sobre su boca, Rápi había puesto su otra mano mientras aún mantenía su sonrisa juguetona.

Rápi: Shhhh...de esta no te escapas, Papi~ -dijo en voz baja-

Sorpresivamente, Rápi lo tomaría de las muñecas y lo lograría someter, manteniendo un agarre firme para que no se soltará.

Luego, sin soltarlo ni aflojar su agarre se subiría sobre el sin dejar de lado el contacto visual, manteniendo su sonrisa juguetona.

Intentaría escapar, pero no podía hacerlo, estaba acorralado por el agarre y peso de Rápi.

Rápi: ¿Acaso no deseabas este momento tanto como yo?~ -pregunta mientras se acerca al rostro de el rostro-

Antonio: ¡Claro que no! -responde haciendo su rostro aún lado-

Rápi: No seas amargado y déjate llevar, soy una mujer que quiere sentirse querida por ti...por las buenas o por las malas.

Antonio: Por favor que sea una pesadilla, ¡Ayuda por favor! ¡Alguien ayúdeme!.

Rápi: Cállese el osico mi amor y besame -acerca sus labios para besarlo-

Antonio: ¡Ahhh!...

...
...
...
...
...
...
...
...
...
...
...
...
...

Antonio: ¡Ahhh! -despierta agitado y sudado- ¡No me beses! -dijo en shock mientras recuperaba el aliento-

Después de haberse tranquilizado del sueño que acababa de tener, Antonio observaría toda su habitación para asegurarse que no habia nadie.

Cómo era de esperarse en la habitación solo estaba el, haciendo que el susto se pasará rápido.

Antonio: Dios mío...eso fue tan real...que bueno que solo fue un sueño o pesadilla -dijo con un tono aliviado-