Nuestra Pequeña |•|DRARRY|•|

|Capítulo XII|

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Harry había salido a comprar, a pedido de su tía Petunia, se había abrigado pues las calles de Londres estaban cubiertas por el mano blanco que la nieve había dejado.

-¡Hola señora Lauren! ¿Cómo se encuentra hoy?- dijo amable el pelinegro a la mujer de la tienda

-¡Harry! Hola querido, no te esperaba hoy por aquí.- dijo la señora dándose vuelta para mirar al Harry. -¡Oh por Dios! ¿Qué pasó Hazz?- Harry frunció el ceño confundido, lo que Lauren logró captar -Tienes tu mejilla lastimada Hazz- Harry se golpeó mentalmente, había olvidado poner el hechizo glamour.

-Amm.. no es nada, ayer estuve limpiando una estantería y... se m-me cayó un libro.- se excusó el ojiverde nervioso. La señora no muy convencida asintió.

-Harry, cariño, ¿Está todo bien con tus tíos amor?- Lauren había preguntado antes de que Harry se fuera, había quedado preocupada por el niño.

-S-si todo bien. ¡Nos vemos!- se apresuró a decir Harry para huir de las preguntas de Lauren.

De camino a casa Harry sintío un pequeño maullido, muy leve, pero lo sintió. Buscó en el arbusto y encontró un pequeño gatito bebé, muerto del frío. El gatito tenía un ojo de color verde y el otro de color azul, su pelaje era gris, un gris claro muy bonito.

-Hola pequeño- Harry lo tomó en brazos tratando de brindarle calor. El gatito maulló y se acurrucó en los brazos del pelinegro -A Isa le vas a agradar- dijo Harry sonriendo. Al entrar escondió al gatito dentro de su abrigo.

Se dirigió a su habitación dejando al gatito en su cama, improvisando un pequeño nido de mantas para que entrara en calor. Debía mostrárselo a Draco.
Pero antes le dio un poco de leche tibia para alimentarlo.

-¡Dray! Mirá lo que encontré cuando venía de la tienda- dijo Harry emocionado enfocando al pequeño gatito para que el rubio lo viera. Draco lo miró con ternura, hacía mucho que no lo veía con una sonrisa dulce. Pero se sorprendió al ve a la pequeña bola de pelos gris que le mostraba su chico.

-Es muy lindo Harry- dijo Draco -A Isa le gustaría- comentó

-¡Lo sé! Eso mismo pensé, le va a encantar- dijo Harry emocionado mientras acariciaba a la bolita de pelos.

Luego estuvieron charlando sobre Isa, y sobre lo que ambos habían hecho en sus vacaciones

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-POTTER- Ese gritó descolocó a Harry. ¿Qué sucedía ahora? Él hizo todo lo que pidieron, ¿Habrá hecho algo mal?

-Dray en un r-rato te ll-llamo- Draco no tuvo tiempo a responder. Pero ese grito hacia Harry no le había gustado ni un poco, y mucho menos la mirada llena de pánico del menor.

Harry se apresuró a bajar con el corazón latiendo le a mil.

-¿S-si?- preguntó un temeroso Harry.

-¡¿Qué mierda es esto?!- dijo su tío Vernon enfadado, mostrando un pequeño gatito.

-Oh...- Harry paniqueó, no sabía en qué momento el gatito había logrado salir de su habitación. -Es... estaba frío afuera, y- y el gatito estaba a-abandonado, lo-lo s-siento-