ৎ୭ 005. Paris, Texas

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When you know, you know,
It's time, it's time to go

❝When you know, you know, It's time, it's time to go❞

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Después de la llamada con su jefe, Marco le indicó que diera la orden de evacuación del edificio lo más pronto posible

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Después de la llamada con su jefe, Marco le indicó que diera la orden de evacuación del edificio lo más pronto posible. Y así lo hizo. Cilla con sus tacones en la mano, notificaba a cada piso acerca de la evacuación inmediata del edificio.

- Shelly- Cilla llamó a la pelirroja,
- Necesito que estes en la salida de emergencia. Pídeles que vayan al punto de reunión, debe de haber un capitán ahí, diles que reporten y que se identifiquen con ellos, por favor.

Shelly asintió rapidamente y se encamino a la salida de emergencia.

La mente de Cilla iba a mil por hora, sentía que se iba a desmayar en cualquier momento. No había desayunado bien, ni comido, su día inicio de manera horrible, hubo una explosión, sus pies estaban adoloridos y ahora tenía que organizar una evacuación masiva.

"Piensa en las galletas que harás mañana Priscilla..." era un pensamiento que se reproducía en automático en la mente de Cilla. "...Si sales de aquí con vida" ese ultimo fue uno de muchos pensamientos intrusivos.

Cilla recorrió todo el edificio en búsqueda de personas que quedaban atrás o que no habían alcanzado a escuchar las instrucciones de la evacuación.

- ¡Cilla!- escuchó un gritó familiar en el piso donde se encontraba, - ¡Cilla!

Era Marco. - ¿¡Marco!?- dijo Cilla sin pensarlo dos veces mientras corría hacia él con lo que sus tobillos le permitieron. La reacción de Cilla en automático fue abrazarlo con fuerza. El abrazo de fue tan fuerte que sus piernas se desvanecieron por debajo de ella y por un momento ella pareció caer. Marco la sostenía para evitar que se lastimara, pero no paso mucho tiempo para que los ojos de la castaña comenzaran a brotarle las lágrimas.

Esto hizo que Marco recordará la vez cuando una Cilla de 15 años llegó a la casa de sus padres con un estado similar al que se encontraba.
Pasaron 3 días sin verla, era algo normal que solía hacer de adolescente. Se escapaba los fines de semana para irse de fiesta, regresaba en las mañanas con una resaca horrible, tomaba dos Tylenol y actuaba cómo si nada hubiese ocurrido la noche anterior.

LUCKY ONES, spencer reidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora