Los cinco amigos entran al portal y descubren un mundo de miel. Vespa parece disgustada y decide irse antes de encontrarse con su hermana. Cybernid se despierta, ve a Vespa y la sigue. Gott, Kayu y Nocturnal se quedan solos.
Kayu: "Oye, ¿y ellos a dónde van?"
Gott: "Quién sabe."
Una abeja reina baja de un gran árbol.
Mielbee: "Bienvenidos al mundo de Pascua, o de miel. Soy Mielbee, la reina abeja. Espero que estén cómodos en este mundo."
Kayu: "Hola, Mielbee. ¿Sabes por qué mi collar brilla?"
Mielbee: "Oh, no lo sé, pero tal vez el gran árbol lo sepa. Síganme."
Kayu, Gott y Nocturnal siguen a Mielbee hacia el gran árbol, mientras tanto, Cybernid busca a Vespa con su radar. De repente, detecta la presencia de otro dragón cerca y decide investigar. Al acercarse, encuentra a un dragón desangrándose en el suelo. Rápidamente se dirige hacia él y observa que tiene una gran herida en el pecho, que lo atraviesa completamente.
Cybernid: "¡Dios mío! ¿Quién pudo haberte hecho esto?" exclama mientras voltea al dragón herido. Saca una de sus pociones de curación y cuidadosamente se la da a beber. Observa con alivio cómo la herida comienza a cerrarse, pero de repente, el dragón abre los ojos y...
Araneaix: "¿Dónde estoy...?" murmura débilmente.
Cybernid: "Estás a salvo ahora. ¿Quién te hizo esto?"
Araneaix: "Fue... Noctorius. Mis amigos... aún están en peligro."
Araneaix asiente con dificultad, aún débil pero decidido. Con la ayuda de Cybernid, se levanta lentamente, preparado para enfrentar el peligro que aún acecha a sus amigos. De repente, Araneaix siente una presencia oscura y poderosa acercándose.
Araneaix: "Es Noctorius," murmura con pavor en su voz. "Está cerca."
Cybernid frunce el ceño, confuso. "¿Quién es Noctorius?"
Araneaix: "Uno de los más temibles aliados de Kostragula," responde Araneaix, su voz temblando. "Debemos escondernos."
Sin más tiempo que perder, Cybernid ayuda a Araneaix a moverse hacia un lugar más seguro, mientras la sombra de Noctorius se acerca cada vez más, acechándolos con una intención siniestra.
Noctorius: "Ohhhh~ sal de tu escondite, Araneaix. Sé que estás ahí."
Araneaix contiene la respiración, intentando no hacer el más mínimo ruido. Sin embargo, sabe que Noctorius lo encontrará tarde o temprano.
Cybernid, siendo un robot, no emite ninguna señal de vida que Noctorius pueda detectar. Esto le da una ventaja estratégica.
Cybernid: Susurra a Araneaix, "Quédate aquí y no te muevas. Tengo un plan."
Con cautela, Cybernid se mueve silenciosamente a través de las sombras, acercándose a Noctorius desde un ángulo inesperado. Utilizando sus sensores avanzados, localiza la posición exacta del enemigo y se prepara para atacar con precisión.
Noctorius, creyendo que Araneaix está solo, continúa provocando.
Noctorius: "Ven, sé valiente. Hazlo fácil para ti mismo."
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Cosas del pasado
Randomlos personajes pasaran por cosas aterradoras, y enfrentaran al ultimo jefe