Capitulo 9

6.4K 489 6
                                    

-¡Dios!- dije mientras entraba en mi auto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¡Dios!- dije mientras entraba en mi auto.

El sexo con Charlotte ayer había sido algo un poquito más que salvaje. Mientras penetraba y penetraba a Charlotte en la noche no podía parar de pensar en Becky. Dios ella había encendido cada uno de mis sentidos con el sólo echo de haber sentidos sus piernas enredadas en mi cintura.

Detuve el auto frente a la tienda no podía moverme sin quejarme, había quedado un poco sensible de mis partes no sé si me entienden.

Al entrar divisé que ya cada uno estaban en sus puestos. Sonreí de pensar que era la primera vez que llegaba dos minutos tardes. El motivo Charlotte había apagado la alarma y yo me dormí sin notarlo.

Mire una vez más alrededor y la ví. Saliendo de la oficina de su padre con una hermosa falda color negra y arriba una blusa color algo transparente que me dejaba ver su brasier en color beige y unos tacones del mismo color de la falda estaba preciosa y no sólo yo lo noté. Pude ver a cada uno de los chicos mirarla mientras ella se dirigía hacia Blanca una de las empleadas que al parecer estaba teniendo un problemita con el calzado.

No pude evitar mirar el trasero que le hacia la falda que llevaba puesta.

-¡¡Santa madre!!- suspire cuando se inclinó un poco para saludar a la niña que iba junto a su madre.

-¿Freen?- escuché mi nombre pero sin darme cuenta seguía mirando a Becky.

Realmente ella estaba bellísima.

-¡Freen!- sentí que alguien tocó mi brazo- Quieres una toalla, digo por la baba.- escuché decir.

Fruncí mis cejas y me moví para ponerme de lado.

-¿Que?- le dije y Josh uno de los empleados y me miro horrorizado.

-Emmm,- dijo pensando en que decirme- que llegaron unos nuevos zapatos y ya los llevamos al depósito de atrás.

-Bien, ¿Tienes las facturas?- el joven me las entregó y camine hacia el depósito para supervisar las entregas.

Camine a paso seguro ignorando la penetrante mirada que sentia en mi espalda. Al entrar el depósito estaba en oscuras encendí una de las luces y camine viendo el montón de cajas casi en el medio del salón.

Después de supervisar cada una de las cajas creo que había pasado más de 30 minutos ahí. Cuando estaba apunto de volver a mi lugar las luces del depósito se apagaron, fruncí mis cejas y miré a ambos lados. Saque mi celular para alumbrar un poco mi paso para no caer.

Cuando estaba apunto de llegar a la puerta esta se cerró y sentí como unas manos me tomaban de la cintura.

-¿Quien eres?- dije mientras estaba inmóvil. Pero no me hizo falta saber su perfume había llegado a mis fosas nasales- ¿Becky?

La Señorita Chankimha Freenbecky (Gip)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora