Maratón 3/3
Tres meses de embarazo
-Bec por favor espera.- dije presionando el volante del auto entre mis manos. Y sentí como las manos de Becky acariciaban mi abdomen bajo mi ropa.
-No puedo esperar más, por favor.- me rogó Becky mientras sentía que desprendía el botón de mi pantalón.
-¡Sólo unos minutos más y llegamos aguanta amor!- rogue también.
No podía negar que me encantaba esos pequeños arranques que tenía Becky. Por lo visto las hormonas la ponían más que cachonda y a veces quería que tuviéramos sexo en la vía pública si era posible.
-¡¡No puedo aguantar más!!- me grito. Y estacione hacia un costado.
-¿Quieres tranquilizarte?- le pregunté y ella sólo cruzó sus brazos bajos sus pechos que estaban un poco más grandes, gracias al bebé. Y su pancita que estaba algo grandecita que me volvía loca.
-No, no quiero, quiero que me hagas el amor, es mucho pedir.- dijo casi en un sollozo.
-¡Dios malditas hormonas!- pensé y suspire.
-Lo sé mi amor, yo también muero por hacerte el amor,- le dije acariciando su mejilla- sólo debes esperar unos minutos que ya llegamos a mi departamento.- le dije de la manera más calmada posible.
-¡¡Nooo!!- volvió a gritar- Quiero ahora, lo quiero ya.- dijo moviendo la manija de mi asiento.
Prácticamente me tumbo hacia atrás y desprendió mi pantalón, bajo la cremallera y en un acto de desesperación bajo mi bóxer liberando mi miembro, que está algo erecto y se lo llevó a la boca sin importar que estuviéramos estacionadas en una carretera. Gracias a dios era muy tarde, veníamos de cenar, en celebración a su tercer mes de embarazo, pero todo acabó cuando sus hormonas salieron a flote.
¡Oh Bec!- suspire mientras sentía como su lengua hacia maravillas con mi miembro.
-Mmmmm, Frencito.- dijo y comenzó a mover sus cabeza de arriba a abajo.
Con la poco cordura que me quedaba por ver a mi novia tomar mi miembro en su boca de esa manera. Mire hacia ambos y por el retrovisor para ver que estábamos casi solas en la carretera.
Baje mi mirada y sentí que iba a correrme cuando Becky levantó su mirada, me miro y saco mi miembro de su boca y lo volvía a meter.
-Oh voy a correrme si sigues así.- le dije a Becky.
-Oh, no,- dijo camila- aún no lo hagas, te quiero dentro de mi.- y en un rápido movimiento se despojó de su pantalón; junto con su ropa interior y se subió encima de mi.
No era la mejor posición pero que podía decir, al tener a mi novia toda deseosa por mi, y yo por ella.
Amaba cuando sus hormonas salían a flote porque pasábamos horas y horas haciendo el amor. Sintiéndonos unas adolecentes y yo estaba más que feliz por ello.
-Ahhh Freen.- me dijo y comencé a mover como pude mi pelvis para entrar más en ella- Oh así , si así, si... Dios no pares.- me dijo y me volví loca en un segundo.
Tome su cadera y comencé a embestirla como podía.
En un movimiento suave y lento. La recoste sobre el otro asiento y con sumo cuidado me metí entre sus piernas, levanté un poco su pierna derecha para posarla sobre mi hombro y así poder entrar en ella.
-Hazlo.- me dijo al ver que aún no la penetraba.
-Alguien está ansiosa.- quise jugar un poco.
-¡Freen!- me retó y entonces sonreí.
-Te amo mi amor.- dije entrando en ella.
Posicione como pude mi mano al lado de su cabeza, en el respaldar del asiento.
-También te amo.- dijo y llevo sus manos a mi trasero para apretarlo sobre el pantalón.
Comencé un vaivén de ida y vuelta lento y suave. Estuve así unos minutos trantandola de la manera más delicada posible, no quería golpearla y mucho menos a nuestro bebé.
-Más... Más rápido, amor...- me dijo metiendo sus manos bajo mi pantalón y bajandolo un poco, para volver a tomar mi trasero y apretar para que aumentará mi embestida.
Como pude bajé su pierna de mi hombro y me acomodé para comenzar a moverme más rápido como mi novia me lo pedía. Estaba más que segura que si alguien pasaba por la carretera sabría que estábamos teniendo sexo. No sólo por nuestros gemidos, sino porque estoy más que segura que el auto se rebotaba.
-Oh Bec.- dije apoyando mi frente con la suya, puse mi manos a los costados y comencé a embestirla más fuerte y rápido.
-Ahhh... Siii... Ahhh, amor...- me dijo y sentí como sus uñas se clavaban en mi espalda.
-Te amo.- dije besando su frente y baje con besos por todo su rostro hasta su cuello- Voy a correrme.- dije.
-Ohhh, si hazlo amor.- me dijo y llevo una de sus manos para rozar mis testículos y puedo jurar que estaba en el cielo.
Con dos embestidas más sentí como llenaba a Becky con todo mi semen.
Abrí mis ojos y la ví con esa sonrisa. Esa sonrisa que me volvía loca, esa sonrisa que amaba.
-¿Estas bien?- le pregunté y ella sólo asintió.
Con mucho cuidado me senté en el asiento del piloto para subir mis pantalones que debido al movimiento habían terminado en mis tobillos, levanté mi bóxer acomodando mi miembro ya más que descansado.
Mire a Becky y ella seguía cada uno de mis movimientos y se mordia su labio, negué sabiendo lo que estaba pensando.
-Oh no,- dije- déjame descansar por favor.- pedi y ella sonrió.
-Sólo hasta que lleguemos a casa. Aún tengo muchas ganas de ti.- me dijo mientras tocaba mi miembro que ya estaba descansando bajo mi bóxer.
Negué y sonreí a la vez.
-¡Benditas hormonas!- pensé está vez. Me encantaba hacer el amor con ella.
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La Señorita Chankimha Freenbecky (Gip)
Romance-Be... Becky... ¿Que haces?. Tu padre puede entrar en cualquier momento.- le dijo una asustada Freen al ver que la hija de su mejor amigo empezar a tocar su entrepierna. -Quiero comprobar con mis propias manos, si lo que mi padre me contó borracho u...