Jungkook, estaciona la motocicleta donde siempre, apaga el motor, y el primero en bajar es Jimin.
El azabache hace lo mismo, extiende su brazo para tomar la mano del pelinegro, entrelazan sus dedos y el mayor, alza y flexiona su brazo para de esa manera depositar un beso en el dorso de la mano del menor, ganándose una linda, tierna y tímida sonrisa por parte de su lindo novio.
—Llegue —anuncia Jeon, luego de haber entrado a su casa junto a Park.
—Bienvenidos jóvenes —los recibe una de las sirvientas.
Jungkook le entrega sus cosas y las de Jimin a la sirvienta, la cocinera le hace señas haciéndole saber que aún faltan algunas cosas.
—¿Qué te parece si me ayudas a arreglar la oficina de mi padre? —le propone Jeon, tomando de su bolsón la carpeta que debe dejar en el escritorio de su papá.
—Eso te corresponde a ti, cariño —responde el pelinegro. —Pero..., haré una a excepción porque eres tú —añade un lindo Jimin, sonriente.
—Ok, entonces permíteme llevarte —Jeon se pone de pie, dándole la espalda a Park.
Coloca la carpeta entre su mandíbula y su pecho, para sostenerla de esa forma.
Alza sus brazos y toma las manos de Jimin, las coloca sobre sus hombros y desciende hasta quedar de cuclillas.
—¿Qué haces? —lo cuestiona Jimin.
—Voy a cargarte en mi espalda —responde Jungkook. —Deprisa —le pide el mayor.
Nervioso y emocionado, Jimin desciende sosteniendo con fuerza los hombros anchos de su novio, coloca su pecho contra la espalda de Jeon, y sus piernas las deja a un costado de la cintura del mayor.
El azache enrolla los brazos de Jimin, alrededor de su cuello, hace un poco de fuerza y se pone de pie, tomando la parte trasera de los muslos de Park.
—¿Estás bien? —lo interroga el mayor, cerciorándose de qué se sienta cómodo.
—Sí, déjame llevar esto —dice el menor, luego de haber palpado con sus manos la carpeta. —Camina, novio —le ordena Jimin, juguetonamente.
Llegan a la oficina que el padre de Jeon tiene en su casa, Jungkook deja sentado sobre una de las sillas a Park, mientras él empieza a acomodar las cosas.
—¿Cuándo volverá tú padre? —pregunta el pelinegro, sosteniendo la carpeta.
—Mañana —contesta el azabache, tomando unos retratos para luego caminar hacia su novio. —Ayúdame, por favor —le súplica, jugando Jungkook.
—¿Qué obtendré a cambio?
—Te daré muchos mimos —dice Jeon.
—¿Y besos? —pronuncia en voz baja el menor.
—Te daré todo lo que tú desees, bonito —responde Jungkook, dejando un pequeño beso sobre la nariz de Jimin.
Jeon le entrega un paño de lana, para que Park, limpie el vidrio de los retratos.
El mayor se encarga de acomodar todo, y de dejar todo limpio, mientras Jimin limpia los pequeños adornos que el padre de su novio mantiene en su oficina.
Cuando se toma pequeños descansos, aprovecha para mimar, consentir y besar a Jimin.
—Listo, he terminado —dice Jimin, colocando en el suelo los objetos que ha limpiado.
—Los colocare en sus lugares —habla Jeon, acercándose a su novio.
—Tengo hambre.
Jungkook mira a pelinegro, sonríe, y trata de colocar los objetos en su lugar para terminar.
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Through my eyes
RomanceDonde Jimin es ciego y puede ver pequeños destellos a través de los ojos de Jungkook.