No estoy nervioso...no estoy nervioso...
Maldición!!!!
Está fue una pésima idea.
¿En qué carajos estaba pensando?
Me golpee el rostro con la mano y empecé a jugar con la bufanda que me había dado.
Estábamos justo ahí, parados frente a la puerta de su departamento mientras Wang Yibo introducía la llave para abrirla.
Sentí que mi corazón se detendría en cualquier momento y que me desmayaría.
—¿Estás bien? Te ves pálido —se aproximó a mi y puso su mano en mi frente—. No tienes fiebre, pero pareces un fantasma...
"Tal vez debería llevarlo al hospital...es tan frágil"
Soy un idiota, ¿Cómo puedo dudar de él así?
Este hombre es un caballero...y tan amable...
—Estoy bien, no te preocupes por mi —sonreí—. Solo un poco cansado, no he dormido bien estos días...
—Oh, entiendo...además no habías almorzado...te prepararé algo para que comas, vamos —sonrió Wang Yibo y subió los escalones hacia la puerta de su departamento y jaló la puerta para que yo entrara.
Cálmate corazón...
Lo seguí intentando no caerme al caminar por los nervios y entré a su departamento.
—Lamento que este un poco desordenado, no tuve tiempo está mañana.
¿Desordenado?
¡¿Desordenado?!
Todo parece brillar, hasta puedo ver mi reflejo en el suelo...y todo está ordenado hasta por color...si esto es desorden...¿Cuál es el orden?
¿Oh?
Algo llamo mi atención y caminé hasta la mesita al centro de la sala. Era un manga.
Lo sostuve y me senté en el sofá sin darme cuenta de mi acción. No sabía que le gustara leer mangas, es una buena sorpresa.
—Lo siento, eso es...—se acerco y lo sostuvo rápidamente.
Noté sus orejas rojas de la vergüenza y sonreí.
Qué lindo...
¿Qué?
—Ayer estaba leyendo y me olvidé de devolverlo al librero...yo...debes creer que es infantil a la edad que tengo,pero...
—Ese...ese manga me gusta mucho, y tengo entendido que la próxima semana saldrá un nuevo tomo...me gusta su estilo de dibujo y la trama tiene mucho suspenso...—comenté intentando verme relajado
—Sí, su estilo de dibujo es increíble...
Parece que tenemos algo en común...
Sonrió tímidamente y entró a su habitación, rebuscó por un rato en uno de sus cajones, o al menos eso dedusco por el ruido, y salió con un pijama rojo en su mano.
—Ten, puedes ponerte esto...la ducha también está lista, el botón más grande es para agua caliente, puedes modificarlo como quieras.
—Gracias —asentí y le recibí el pijama, chocando muestras manos.
"No puedo creer que Zhan se pondrá la pijama que le compré...fantasee con él muchas veces usando este pijama rojo...ya quiero verlo con el"
¿Qué?
¡¡¡¿Queeeeeeeeeeeee?!!!!!
¡Ya no quiero usarlo!
