La princesa y la sirvienta「 Freenbecky 」

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Podría decirse que aquel beso fue la base para una situación más... íntima.

Luego de separarse de aquel dulce beso, Becky le insistió a la omega a llevar la situación a mayores, Freen no se negó.

La fiesta había quedado descartada de sus mentes, lo único que podían pensar era en llegar a su habitación para que sus lobas también se unieran.

Entraron a la habitación y no perdieron el tiempo para besarse, como pudo Becky cerró la puerta y le puso cerrojo para evitar a intrusos, no quería que nadie molestará ese momento.

Pasó sus manos por la espalda de la omega, bajando con una lentitud el cierre del vestido que solo ponía más ansiosa a Freen.

Agradecía que Freen hubiese elegido un vestido ligero, así se le hacía más rápido quitárselo, lo retiro del cuerpo de la omega dejándola en alguna parte de la habitación, Freen quedando únicamente con sus bragas.

─¿Por qué no me dijiste que nada más llevabas esto puesto?, te hubiese traído aquí en cuanto llegamos. ─Confesó mientras tocaba descaradamente el culo de la omega.

En otra situación, Freen le hubiese respondido, pero ahora no tenía tiempo para eso.

Aflojó las cintas del vestido de la alfa mientras esta le ayudaba bajando el cierre, volvió a besar a la omega mientras le bajaba el vestido.

La alfa recostó a la omega en la cama, se separó un momento para admirar a Freen, confirmando una vez más que era la omega más hermosa que alguna vez hubiera visto.

─¿Podrías dejar de mirarme y comenzar, por favor?

─Parece que alguien está ansiosa. ─Dijo burlesca, besando una vez más a la omega.

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─¡Mgh!

La alfa sostenía las caderas de la omega, quien tenía su cara enterrada en la almohada.

─¿Te gusta? ¿Mhn? ─Le preguntó a la omega, esta asintió. ─Con palabras por favor.

─E-eres una m-maldita.

─Tomaré eso como un sí. ─Dijo para aumentar la velocidad de sus embestidas.

El sonido chicloso de su pelvis golpeando la entrada de la omega eran música para la alfa, eso sumándole los gemidos que soltaba la omega, formaban una hermosa sinfonía para sus oídos.

Salió del interior de Freen y antes de que pudiera reclamarle algo, la volteó quedando cara a cara.

El pecho de la omega estaba lleno de chupetones y mordidas, su frente tenía una leve capa de sudor y sus labios estaban hinchados y entreabiertos.

Sin perder más tiempo volvió a entrar en la omega y se acercó para besarla, Freen enredó sus piernas en las caderas de la alfa, dejándole más espacio a la alfa.

─Becky, ya casi-

─Lo sé, yo también estoy cerca. ─La alfa aumentó la velocidad.

─Márcame, alfa.

La alfa se acercó hasta el cuello de la omega, lamiendo la zona donde iba a estar la marca de su unión.

─Te amo, Freen. ─Dijo para clavar sus colmillos en el cuello de la omega, haciendo a esta obtener su liberación, segundos después Becky también se corrió en el interior de Freen, su nudo impidiéndole salir.

Limpió la sangre que salía de la reciente marca, no quería que se infectase.

─Bec.

─¿Mhn?

─Yo también te amo.