𝘽𝙡𝙤𝙤𝙙 𝙋𝙖𝙘𝙩 [𝙔𝙪𝙣𝙜𝙞]

•3•

Se acercó al espejo y se tocó la piel, sintiendo la temperatura fría de su cuerpo y viendo en su cuello la marca de colmillos, sabía que no era normal, pero no sabía cómo explicarlo.
Wooyoung se acostó en su cama, tratando de ignorar la sensación de duda y miedo que sentía.

Wooyoung no era un vampiro, pero había estado pasando por una situación extraña y peligrosa desde hacía unos meses, San, un miembro de la Orden, había comenzado a tomar de su sangre regularmente, Wooyoung no sabía cómo detenerlo.
Wooyoung había tratado de luchar contra San, pero era demasiado fuerte y rápido, finalmente, Wooyoung había aceptado su destino y había comenzado a permitir que San tomara su sangre, aunque sabía que era peligroso y podía tener consecuencias graves para él.
A pesar de su situación, Wooyoung continuaba siendo un miembro activo de la Orden y hacía todo lo posible por proteger a los humanos de los vampiros.
Se encontraba en su habitación, acostado en su cama mirando fijamente al techo, sabía que San llegaría en cualquier momento, y la idea de que este tomara de su sangre otra vez le provocaba una sensación de miedo y repulsión.
Pero justo en ese momento, la puerta de la habitación se abrió y entró San, tenía una sonrisa arrogante en su rostro y se acercó a Wooyoung con paso decidido.

-Sé que estabas esperándome -dijo San, con una voz suave y seductora -Ven, déjame tomar de tu sangre una vez más.

Wooyoung trató de alejarse de San, pero este lo atrapó por el brazo y lo obligó a acercarse.

-No te resistas, Wooyoung.

Wooyoung trató de luchar contra San, pero era demasiado fuerte y rápido, San lo sujetó por el cuello y lo obligó a mirarlo a los ojos.

-Sé que te gusta -dijo San, con un tono de voz burlón -Sé que te excita la sensación de mi boca en tu cuello.

Wooyoung se quedó quieto, mirando fijamente a San, sabía que era inútil luchar, así que decidió dejarse llevar.
San se acercó más a Wooyoung y comenzó a besar su cuello, mordiéndolo suavemente y bebiendo de su sangre. Wooyoung cerró los ojos y trató de ignorar la sensación de miedo y asco que sentía.

Luego de unos minutos, San se alejó limpiándose la boca con la mano. Wooyoung se quedó tumbado en la cama, débil y con pocas fuerzas.

-Gracias, Wooyoung -dijo San, con una sonrisa satisfecha -Tu sangre siempre me da mucha energía.

San se giró y comenzó a caminar hacia la puerta, pero Wooyoung lo llamó.

-¿Por qué me haces esto? -preguntó Wooyoung, con una voz temblorosa -¿Por qué bebes de mi sangre?

San se giró y sonrió.

-Para poder vivir -confesó -Necesito de ti Wooyoung, eres un humano

San salió de la habitación, dejándolo solo. Wooyoung se sentó en su cama, tratando de recuperar su fuerza. Sabía que tenía que hacer algo para poner fin a esta situación, pero no estaba seguro de cómo hacerlo.
Pero entonces, recordó que Yunho, le había dicho que siempre estaría allí para ayudarlo si lo necesitaba, así que decidió ir a verlo y contarle lo que estaba pasando.
Se levantó de la cama, se puso una chaqueta y salió de su habitación. Caminó por el pasillo tambaleándose un poco hasta llegar a la habitación de Yunho llamando a la puerta.

-¿Quién es? -preguntó Yunho desde el interior.

Wooyoung abrió la puerta entrando en la habitación sin responder o pedir permiso. Yunho estaba sentado en su escritorio, como de costumbre, trabajando en algunos papeles, quizás planeando algunas estrategias

-¿Dónde están tus modales? -dijo Yunho, con una sonrisa amable.

Wooyoung cerró la puerta y se acercó al escritorio un poco mareado

-Yunho, necesito hablar contigo -dijo Wooyoung, con un tono de voz preocupado.

Yunho se dió cuenta de que algo estaba mal.

-¿Qué pasa? ¿Qué te sucede? -preguntó poniéndose de pie y acercándose a él -Estas frío, ¿Estás enfermo?

Wooyoung miró a Yunho con ojos húmedos.

-Yunho....San es un vampiro, ha estado bebiendo de mi sangre -dijo tratando de controlar las lágrimas.

Yunho se quedó callado por un momento, mirando a Wooyoung con una expresión de culpa y preocupación.

-Wooyoung... -dijo finalmente Yunho, con la cabeza agachada -Sé que San es un vampiro pero te lo juro....no sabía que estaba bebiendo tu sangre

Wooyoung se apartó de Yunho y lo miró fijamente.

-¿Por qué no me dijiste nada? ¿¡Por qué me dejaste sufrir!? -preguntó Wooyoung, con un tono de voz herido.

Yunho se sentó en su silla y se pasó una mano por la cara.

-Wooyoung...sé que no tengo excusa, pero San ha sido un miembro leal de la Orden por muchos años, Nunca ha dado problemas antes, San nos ayudó mucho

Wooyoung asintió con la cabeza y se volvió hacia la puerta, dispuesto a marcharse pero justo en ese momento, la puerta se abrió y entró San, tenía aquella sonrisa propia de él ,arrogante. Se acercó a Yunho y Wooyoung lentamente

-Buenas noches, Yunho, Buenas noches, Wooyoung... -dijo San, con un tono de voz tranquilizador.

Yunho se levantó inmediatamente poniéndose frente a Wooyoung, tratando de protegerlo de San.

-¿Qué estás haciendo aquí, San? -preguntó Yunho, con un tono de voz firme

San entró finalmente a la habitación, Wooyoung estaba detrás de Yunho, quien no perdió tiempo en confrontar a San.

-¿Qué haces aquí, San? -preguntó Yunho de nuevo, con una voz fría.

-Sé que Wooyoung te ha hablado de mí -San se rio, sarcásticamente-Seguro ya te contó

-Te advierto que si no te alejas de Wooyoung, tomaré medidas

-¿Me estás amenazando? ¿Qué crees que puedes hacerme? -San se rió aún más fuerte

-San, por favor, déjalo en paz -Wooyoung intervino.

-No estoy bromeando, si no te vas ahora, haré lo que sea necesario para proteger a Wooyoung

San se quedó en silencio durante un momento, su risa desvaneciéndose lentamente, miró a Yunho y Wooyoung con desprecio antes de voltearse y caminar hacia la puerta, Wooyoung trató de seguirlo, pero Yunho lo detuvo.

-Déjalo ir Wooyoung -sostuvo su mano fuerte

Wooyoung se quedó en silencio, mirando la puerta por la que San había salido. Sabía que Yunho tenía razón, pero no pudo evitar sentirse preocupado por lo que pudiera suceder en el futuro.

Wooyoung se dirigió a su habitación, cansado de los eventos del día. Se desvistió y se metió en la cama, esperando poder dormir y olvidarse de todo, mientras que Yunho estaba sentado en su oficina, sumido en sus pensamientos, la habitación estaba iluminada solo por la luz de las velas, lo que le daba un aspecto siniestro y oscuro, había sido un día agotador, Yunho se encontraba cansado y preocupado por la situación con Wooyoung y San.
De repente, vió una sombra pasar por la puerta de su oficina, no le preocupó mucho, pensando que era solo su imaginación jugándole una mala pasada. Pero cuando sintió una repentina corriente de aire frío que le recorrió todo el cuerpo, supo que algo no estaba bien.
Volvió la cabeza y lo vió allí, de pie en la entrada de la habitación, con sus ojos rojos brillando en la oscuridad.

-¿Que haces aquí? .....