>× Capítulo 2 ×<

138 19 6
                                    

-Entonces, veniste a verme hermanito, supongo que me extrañaste mucho.-el tono en mi voz es sarcástico cuando ambos nos sentamos para conversar.

Dongyoung se encuentra un poco intimidado por mi y no me mira a los ojos al principio, mientras que yo no puedo dejar de verlo, es sorpresivo verlo aquí conmigo, no me lo esperaba.

Frunzo el entrecejo cuando noto que lleva un maleta y con eso sospecho que piensa quedarse en mi departamento. Porque dudo que don perfecto quiera pagarse un hotel, siempre ha obtenido lo que quiso y quedarse conmigo es lo que quiere ahora.

Eso está por verse.

-Vine a verte porque te extraño pero también porque necesito un respiro urgente, mi etapa de estar casado y ser padre es agotador.

Rodé los ojos.-¿Está empezando a ir mal tu matrimonio?-me atrevo a preguntar sin ocultar el interés.

Y su respuesta me sorprende.-No esta mal, pero la rutina con Jaehyun me aburre, sé que a él le pasa lo mismo. Nuestra relación es tan aburrida.

Suspiró pesado mientras habla.

-¡Oh! Bueno, tarde o temprano pasaría, analizando el punto que Jaehyun y tu son de personalidades tan conservadoras, es claramente aburrido. Estar pendientes de hacer buenas obras de caridad no le dará estabilidad a tu matrimonio ni menos te dan la felicidad eterna, querido.-me río a carcajadas y Dongyoung alfin levanta la mirada para verme por fin a los ojos.

Así soy con él, demostrando que soy el malo de los dos.

-Por eso vine a verte y tal vez tu puedas ayudarme.-comenzó a ser directo.-En serio necesito tu ayuda hermano. Mi matrimonio necesita un salvador.

Mi celular timbró e interrumpió el momento que empezó a ponerse tenso para mi porque el que Dongyoung hable sobre su matrimonio con Jaehyun me pone en ese estado. Mi amante insistente sigue explotandome el celular de llamadas, haciéndome saber que esta esperando por mi.

-Hablamos después querido. Tengo que salir esta noche a divertirme-sujetando mi celular me levanto de mi asiento.

Dongyoung asiente mientras sus ojos pasean por mi departamento.

-Te ha ido bien. Tienes muchos lujos. -comenta viendo todo mi departamento amueblado con lo mejor de lo mejor.

Regalos de amantes o de los novios que tuve, han sido pocos pero con dinero suficiente para complacerme. Y unas cuantas cosas compradas por mi mismo.

-No me quejo de lo que tengo. Ser divertido y saber complacer a un hombre en la cama puede edarte frutos.-alardeo.

Sin embargo, en realidad no pienso nada de eso pero quiero que Dongyoung escuche lo que el enrealidad piensa de mi junto con otros y que la verdad me da igual si lo cree.

-No cambias Doyoung -murmura Dongyoung esbozando una sonrisa la cuál me dejó sorprendido.

Mi madre y Dongyoung al paso de los años han tenido vergüenza de los rumores sobre mi, ahora él, mi hermano perfecto toma a bien mis palabras. Esto es tan extraño.

Mi amante continua con sus llamadas por lo que decido apurarme.-Nos vemos después. Tal vez mañana querido, siéntete como en tu casa.-un toque de falsedad en lo último y me despido dejandole un beso en la mejilla.

Apresuro mis pasos encontrándome con un hombre que espera por mí afuera de mi edificio.

-Doyoung, estas hermoso.- saludó con un beso en los labios.

-¿A dónde vamos?-pregunto sonando lo más sensual que pude.

-Iremos al casino a jugar y después podemos jugar nosotros en un privado.-contestó él millonario guapísimo abriendo la puerta par que suba al coche a lo que en respuesta opto por guiñarle el ojo.

Ocupando Su Lugar|| Jaedo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora