As long as necessary

Cap 19

POV Leo

-Leo -Alice me llamó mientras aún se reía- no puedo creer que la amiga de Jennie te pidiera el paraguas.

-Ya superenlo -dije mientras reía a la par de mis primas- es que hacía demasiado sol, debieron haber visto la cara que puso Jennie -continuamos riéndonos de la situación y luego comencé a contarles mis planes para esta semana.

-A ella le vas a comprar unos chocolates y a mí ni siquiera me das un caramelo -exageradamente hablaba Rosé.

-La diferencia es que ella me gusta -dije tratando de provocar más su ira.

-¡AH! ¡OK! -me reí junto a Alice y Rosé se volteó fingiendo indignación- ríanse todo lo que quieran, pero ojalá me pidas algo, Leo -seguí riéndome y abracé a mi prima.

-Ya, mejor vean la carta que le hice -ambas se acercaron y comenzaron a leer la carta qe venía acompañada de un dibujo.

-Muy lindo todo, ¿cuándo se lo darás?

-Lo más pronto posible, el lunes, probablemente.

Luego nos pusimos a jugar y hablar de temas aleatorios, entre ellos surgió la idea de hacer una pequeña reunión en la casa de ellas ya que tienen una piscina, entonces decidí llamar a Mina para contarle la gran idea de Rosé.

• • • • • • • • • • • • • • • • • •

-¿Qué tan lejos queda tu casa? -mi mejor amiga le preguntó a una de mis primas.

-No muy lejos, como a 10 minutos de aquí -Alice fue quien respondió y seguida de ella vino Rosé.

-Igual Leo sabe donde es, ¿cuántas personas quieren invitar?

-Solo a Chae, Yuqi y a Jennie, pero si ella quiere invitar a sus amigas ya no sé -dije yo mirando a Rosé.

-Si las invita no hay problema, la cuestión es que no sean muy desordenadas.

-Bueno, entonces quedamos así. Yo llevaré bebidas, ustedes pongan comida.

-Bueno, no mucho alcohol, que ustedes aún son menores

-No, no, no. Yo le pondré el control a eso -Miré a Mina con ironía ya que sabía que era la mujer más mala copa de conocía.

Nos reímos y seguimos planeando como sería todo hasta que se hizo muy tarde y todos nos dormimos.

• • • • • • • • • • • • • • • • • •

-Jen -​la llamé desde los pasillos del colegio, es el momento perfecto para entregarle el regalo porque se ve algo estresada, espero que esto la alegre un poco.

-Lio -me abrazó con emoción y olí su suave perfume, en verdad todo de ella me gusta.

-Tengo un regalo para ti -me miró extrañada, pero tenía una hermosa sonrisa en su rostro- no es demasiado, ni es un día importante, pero quise darte algo -extendí la pequeña caja de bombones- en el interior, a parte de los chocolates, hay una carta -me miró con incredulidad.

-No era necesario, Leo -me volvió a abrazar, pero esta vez retuve su cintura con mis manos.

-Espero que te guste -nos miramos fijamente y por un momento sentí que no podría aguantar las ganas de besarla, pero no hizo falta aguantarme porque ella fue quien me dio un pequeño beso en los labios y habló.

-Te quiero, Leo -sentí como mi corazón se paseaba por todo mi cuerpo.

-Yo también te quiero, Jen -volví a atraer su cuerpo hacia el mío envolviendonos en un abrazo. Luego nos soltamos con una gran sonrisa y nos dirigimos a nuestras clases, que por mala suerte, eran en salones separados.

POV Mina

Estaba en una de las clases más aburridas junto a Leo, matemáticas. Tenía planeado en esta hora contarle todo lo que había pasado con la maestra Seo Joohyun días atrás.

-Leoni -lo miré y sonreí inevitablemente haciendo que el haga una pequeña mueca de burla.

-¿Qué pasó, loca? -preguntó dejando de escribir la clase que obviamente no entendía, dedicándome plena atención.

-¿Recuerdas el día de la actividad? ¿Cuándo nos pusimos a jugar basket con los muchachos?

Leo asintió un poco frunciendo levemente el ceño, sabía que se estaba empezando a preocupar.

-No pasó nada malo, al contrario, sucedió lo que siempre había deseado -sonreí achinando mis ojos mientras notaba una pequeña sonrisa pícara en el rostro de mi amigo.

-A ver, déjame adivinar. Esto tiene que ver con la profesora Seo, ¿verdad? -me interrogó ladeando levemente su cabeza.

-En efecto -mordí mi labio reflejando mi pequeño nerviosismo- Leoni, ya le dije todo, absolutamente todo, no sé ni de dónde saqué los ovarios para decirle todo cara a cara.

La boca de mi amigo se abrió ligeramente, dando a entender toda su sorpresa.

-Pero, ¿cómo? ¿Qué te dijo? Dime, dime -él nunca dejará de ser tan chismoso.

-Ella estaba acá en el salón, vine, le entregué unas flores y-

Una gran carcajada de mi amigo hizo que detuviera mis palabras, Leo reía como loco, haciendo que todos los miraran y se ganara un regaño por parte de la maestra Jang.

-Manoban, ¿podría tener más respeto, por favor? -la maestra Jang miró de mala manera a Leo, haciendo que él inmediatamente callara, luego ella volteó y siguió con su clase.

-¿Qué? -le pregunté al verlo mirarme con esa cara de burlón.

-Literalmente hiciste la cosa más cringe que he podido escuch-

-Manoban, ¿quiere venir a la pizarra? Ya que la veo hablando tan a gusto, ¿no quiere pasar a resolver este ejercicio?

Bajé mi cabeza evitando que la maestra me viera, me andaba muriendo de la risa, la cara de Leo fue todo un poema, escuché como negaba la petición de la profesora.

Luego de unos segundos escuché como el silencio volvió al aula, dándome a entender que la maestra nuevamente se puso a escribir, así que levanté mi cabeza para mirar a mi amigo.

-Ajá, entonces fuiste cringe con la maestra y... ¿y qué más pasó?

-Leoni, esa mujer besa como un ángel, ella m-

-¡¿QUÉ?! ¡¿CÓMO QUE-

-¡Manoban y Myoui, salgan de mi clase!

• • • • • • • • • • •

-Ya va, entendí pero a la vez no entendí. ¿Son algo pero a la vez no lo son?

Leo y yo nos encontrábamos en la cafetería, nos dieron una oportunidad para estar afuera, ¿por qué no aprovecharla?

-Mmh... todo a su tiempo, Leo. El punto aquí es que ya hemos tenido más de una sesión de besos y... -sonreí sonrojándome totalmente pensando en aquellos momentos.

-Estás más jodida que yo, mírate, esa cara toda mongolica como la pones, llena de cringe andas -comentó riendo lleno de burla.

-Como si yo fuera la única -lo miré mal y reí junto a él.

Pasamos unos minutos más y luego tuvimos que ir al salón, ya que nos encontramos con la maestra Seo en la cafetería y nos mandó al aula, ¿y cómo no hacerle caso a esa belleza?