Capitulo 14

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Hanna.




De todos los momentos posibles para que el loco de mi jefe me hiciera una pregunta tan incomoda, obvio que tendría que escoger estar en un ascensor con la loca de su esposa, que al parecer tiene serios problemas de celos y me mira como si quisiera ahorcarme en este momento.


-Hanna, me hago más viejo esperando la respuesta. -sigue insistiendo el y yo no se que responder. Y ahora me está tuteando.

¿Pero qué diablos le interesa? Supongo que me esta usando para darle cejos a la bruja de su mujer por el video. No me imagino lo que debe estar sufriendo por eso. así que podría mentir, pero no lo hago.

-si señor. Estoy soltera. -respondo mirando al piso con la cara roja de vergüenza.

-interesante. -responde el mientras que su esposa murmura algo como zorra pero no logro escucharla bien porque el pitido de la vergüenza ya me nubla los sentidos.

Por fin las puertas del ascensor se abren al fin y salimos de él. Aquí ya nos estaba esperando el guardaespaldas del otro día. Debo aprenderme su nombre.

Intercambia unas palabras con Seider y lo guía para que caminemos hacia el pasillo.

Vamos todos juntos en silencio, lo único que se escucha son las voces de los reporteros del otro lado.

-Buenos días, Señora Sherman, me saluda el guardaespaldas. -no me di cuenta cuando se atrasó para alcanzarme

-buenos días, señor... -Bruno me ayuda él.

-gracias, buenos días Señor Bruno.

-me puedes decir Bruno solamente. -me dice amablemente mientras todos caminamos.

-solo si usted me dice Hanna y no señorita Sherman. -le respondo ante su amabilidad.

-Me alegra mucho ver que ha vuelto a su puesto.

-Si bueno, he decido darle una segunda oportunidad. -le digo mirando a Seider que camina en frente de todo el grupo.

-y se lo agradezco, mi señor lo que mas necesita ahorita son personas de su lado. Espero usted sea una de esas.

-Tratare de hacer mi trabajo lo mejor que pueda Bruno. - le digo dedicándole una sonrisa.

-y eso es suficiente para mi Hanna. -me responde también con una sonrisa.

Llegamos a una especie de mini salón que está detrás de la tarima del salón de conferencias. Rita ya estaba allí esperándonos.

-ok, al fin llegaron. -dice Rita y se queda viendo a Silvia como quien mira caca. Se nota que el sentimiento es mutuo.

-Ya esta todo listo? -pregunta seider.

-Si, lo organice todo por que se que Hanna aun no sabría como manejar esto. -responde ella.

-Gracias Rita. -le digo. Por que tiene toda la razón.

-no hay de que. Voy a mandar anunciar que vas a salir. Los demás se pueden parar al lado del escenario donde estaré yo.

-Está bien. No durara mucho tiempo tampoco. -responde Seider.

-Liam, estas seguro que es buena idea que ella este aquí? -pregunta Rita. Obviamente refiriéndose a Silvia.

-No te preocupes, es mejor que este para que de credibilidad a lo que voy a decir. -responde el.

-esto tiene que salir bien Liam, hay prensa internacional allá afuera. ¿Lo entiendes verdad? -insiste Rita.

Secretos de oficinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora