Había vuelto de casa de los Cameron hace ya unas horas. Me encontraba en mi casa, sola como ya era costumbre.
Lo único que me hacia compañía era la tarrina de helado que sostenía entre mis piernas, las lagrimas estaban ya secas en mis mejillas, pero el rojizo de mis ojos aun no se había marchado.
Deje la cuchara en la mesa y aparte la tarrina a medio comer, rebusque entre los bolsillos de mi pantalón y encontré un cigarro y junto con mi encendedor comencé a encenderlo.
El tono de llamada de mi móvil comenzó a sonar, interrumpiendo mi accion, y haciéndome dejar el cigarro encima de la mesa, con e re4sto de las cosas.
Me levante y rebusque entre los cojines hasta que di con el maldito teléfono. En la pantalla se podía leer con claridad quien era, exhausta dude si contestar o no.
-¿Que cojones quieres Jj?- pregunté
-Alexa, vamos a pasar con la furgo a por ti. No puedes decir que no, es importante. Y te necesito.-Habló el rubio con la voz entrecortada.
Colgué la llamada sin volver a decir una palabra, y me senté en el sofá. Cogí el cigarro con desesperación y lo encendí.
Miles de pensamientos comenzaron a invadir mi cabeza. El humo que se adentraba en mis pulmones logro calmar mi ansiedad.
La puerta de mi casa sonó repetidas veces, asustándome, por lo que con el cigarro en la boca fui a abrir.
Pude ver a Jj despeinado con los ojos muy abiertos y a su lado el resto de los Pogues, todos tenían unas miradas muy extrañas, por lo que comencé a asustarme.
-¿Vais a pasar o..?- pregunté dándole una gran calada al cigarro para después tirarlo al porche, ante la mirada de Jhon B.
-Si.- contesto Jhon B
Me hice a un lado y todos pasaron a mi casa, cerré la puerta y me quede en la entrada, estática sin entender aun que es lo que sucedía.
Todos me observaron atentamente, causándome inseguridad.
-La brújula de mi padre, nos ha llevado a investigar. Y hemos descubierto que hay un barco, el Royal Merchant, con 400 millones, que desapareció en Outer Banks. Mi padre estaba obsesionado y lo buscaba. Ahora lo hacemos nosotros.- contó Jhon B
Arrugue las cejas aun sin entender que tenia que ver todo esto conmigo, por lo que me decidí a preguntar.
-Y esto que tiene que ver conmigo.- hablé confundida
Te necesitamos Alexa, es algo que debemos hacer todos los Pogues, y nos faltas tu.- dijo Jj antes de que Jhon B volviese a abrir la boca.
Me lleve las manos al pelo, apartándolo de mi cara mientras trataba de digerir todo lo que me estaban diciendo. Me encontraba en la misma situación que hace unos días, y me estaba matando, n sabia que hacer.
Al verme aun dudosa, Jj decidio continuar.
-Alexa, eres una Pogue, puede que quieras volver a tus raíces y todo eso, pero tu verdadera familia somos nosotros. Te debo muchas explicaciones, lo se, pero confía una ultima vez, por favor.- dijo con la mirada clavada en mis ojos.
Resople frustrada, y los mire a todos, uno por uno, como la primera vez, se les veía desesperados porque aceptara.
-¿Que hay que hacer?.- hablé mirando hacia Jhon B, este no contesto, en cambio si sonrió mirando a Kiara, quien miraba hacia el suelo, supongo que nerviosa ante mi presencia.-Deja de sonreír así imbécil, y vamos al lio.- hable divertida.
Este negó con la cabeza, y me explico todo, debíamos de ir al cementerio a una tumba de Reldfield o algo así.
Abandonamos mi casa y nos subimos a la furgo en donde me toco ir atrás con Jj y Pogue, en medio. El rubio sentado a mi derecha, estaba realmente nervioso, Pogue a mi izquierda se limitaba a mirar el paisaje.
Llegamos a nuestro destino en cuestión de minutos, todos nos bajamos y Joh B me lanzo una linterna, para poder guiarme bien entre la oscuridad de la noche.
Recorrimos casi todo el cementerio hasta encontrar la tumba correcta.
-Lo que ponía en la brújula, no era un lugar, si no una persona.- explicó este a todos.- Es la tumba de mi tatarabuela. Hay que abrirla.-
En cuanto John B dijo las últimas palabras, Kiara y yo nos hicimos unos pasos hacia atrás a la vez, y al darnos cuenta de nuestra acción nos reímos las dos.
Los chicos comenzaron a tratar de abrir la tumba hasta que una enrome serpiente salio.
-Tios, si una ha salido seguro que hay miles.- comentó Jj
-Esto no se abre Jhon B.- dijó Poe mientras se limpiaba las manos
Antes de que Jhon B pudiese hablar, mire a Kie, y sabia que ambas estábamos pensando lo mismo.
-Yo puedo caber.- anuncié, pareció ser una idea exagerada cuando los tres se giraron a mirarme como si estuviese loca.
-Opino lo mismo que Alexa, podría hacerlo yo, pero ella es mas delgada, podría entrar con mas facilidad.- me apoyó Kie mientras me dedicaba una sonrisa.
-Jhon B, quieras ayuda, pues déjame buscar lo que quiera que necesites, puedo entrar.-
Este pareció ceder, entre Kiara, Pope y el, retiraron las ramas para facilitarme la entrada. Jj se quedo mirándome.
-Yo te aúpo.- dijo este colocándose y uniendo sus manos para poder impulsarme.- A la de tres Alexa.
Antes de que comenzara a contar, yo misma hice impulso y conseguí adentrarme.
-Necesito que me paséis mi linterna.- Jj actuó rápido y me la lanzo.
Conseguí iluminar el lugar, pero necesitaba mas luz, por lo que John B puso su linterna.
-¿Estas vivas Alexa?- preguntó Kiara
-Si, por ahora.- conteste yo, observando todo el lugar con detenimiento.
-¿Has encontrado algo?- dijo Jhon B con curiosidad.
No conteste y me quede mirando un sitio con asombro.
Agarre el sobre, y lo mire con detenimiento, en este estaba escrito para mi chaval .
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Cicatrices en la arena
FanfictionAlexa, desaparece de su hogar Outer Banks durante un año, cuando vuelve todo cambia en ella. Jj, su eterno amor del verano pasado, intenta recuperarla, el junto a el resto de los pogues se involucran en una búsqueda muy peligrosa. Todos juntos lucha...