"Confesión No. 888" (Haqin) Shuumatsu no Valkyrie)

Capitulo cuatro

Adán y Eva eran un matrimonio especial. Adoraban los niños, pero cuando una enfermedad terminal se llevó a sus dos hijos biológicos quedaron destrozados. Y en su dolor, adoptaron a un grupo de niños de diferentes países para sanar su roto corazón y tener esa familia grande que Siempre soñaron.

Cada niño tenía una historia diferente según el expediente que leyeron muchos años atrás. Y por el bien de sus hijos lo ocultaron para que pudieran iniciar de nuevo. Siendo quizás el hijo mayor, Ying Zheng el que más sufrió.

Por eso lo amaban y cuidaban tanto,sin hacer excepción del resto de sus hijos. El era el niño más amable,gentil, energético y positivo de todos, lo trataban como su bebé por era el único que a pesar de los años siempre pedia su cariño e intentaba mantener a su familia unida.

No fue un camino fácil. Cuando recién lo conocieron le costó mucho trabajo abrir su corazón por las cosas tan feas que vivió siendo un pequeño niño. Pero ahora está bien, creciendo sano y luchando por sus sueños.

- Buenos días amor. - saludo Eva su esposa al llegar a la sala de estar seguida por el resto de sus hijos. - ¿Hoy prepararas el desayuno tu? - pregunto de forma encantadora

- ¡Claro! Es fin de semana y es raro que podamos estar todos juntos. - dijo mientras se giraban al refrigerador y abría la puerta para sacar comida - ¿Que quieren desayunar mis lindos ni... - no pudo continuar, de repente se quedó callado

Por el repentino silencio del mayor todos se empezaron a preguntar que fue lo que pasó . No fue hasta que saco de la nevera un gigantesco pastel que decia: Feliz Cumpleaños Ying  con una sola rebanada de pastel cortada,dando a entender lo que pasó.

- Oh mierda. - dijo Lubu brincando en su lugar - ¡Olvidamos el cumpleaños de Ying Ying! - gritó causando asombro en todos.

Entonces Eva se acercó a ellos y a cada uno de sus hijos les dio un leve golpe en la cabeza a cada uno.

- ¡Les dijimos que no íbamos estar en casa y que debían pasar tiempo con su hermano! - reprendió mientras les daba un leve golpe en la cabeza - ¿Que hicieron ayer como para que pasara esto? -

Cada uno lo pensó mucho y cuando se sonrojaron entendieron todo. Pasaron tiempo con sus novios.

- ¡Pero madre! - intervino Rasputin al ver a su mamá decepcionada - de seguro Qin paso tiempo con Hades. - dijo intentado sacarse la culpa que sentía por recordar cómo trato a su hermano sin querer el día de ayer.

- ¿Que no es ese el chico que se la pasa rechazandolo? - cuestiono la mujer alzando una ceja.

- P-pero Hades no es tan malo con el madre,quizás lo llevo por un helado o algo así. - explico Kojiro rascándose el cabello.

- ¿Y son felices sabiendo que su hermano puede pasar un día tan especialmente delicado recibiendo migajas de afecto? - pregunto Adán molesto, haciendo sentir más culpables a sus hijos. - Chicos,saber perfectamente que .. - no pudo terminar pues del segundo piso bajo su mencionado hijo, Qin Shi Huang vistiendo con ropa deportiva y recién bañado.

- Hola, buenos días. - saludo Qin con su sonrisa radiante y más tranquilo de lo normal acercándose a todos - ¿Cómo va todo? ¿Durmieron bien? - cuestionó mientras se acercaba a su madre y le daba un leve beso en su mejilla

- Mi niño, lamento que no hayamos podido celebrar tu cumpleaños ayer .. - dijo Adán acercándose a él mientras acariciaba su mejilla - Te prometo que te lo compensaremos todos en familia. -

Qin no dijo nada más,solo sonrió un poco y tomo la mano de su padre

- No te preocupes padre, estoy bien. Se que todos tienen cosas que hacer, ya podremos hacerlo luego. - dijo restándole importancia. - Yo hoy no podré acompañarlos a desayunar,adelantaron mi clase de muay thai y después tengo gimnasia, así que estaré fuera casi todo el día. - explico con un rostro lleno de pena - Volveré para la cena,quizás podríamos pedir algo ¿De dices? - propuso con algo de emoción.

Adán lo reviso con cuidado,no parecía ni enojado o triste. Pero aún así estaba un poco preocupado,por qué no parecía querer insistir en el tema,aún así, parecía no querer insistir en el tema.

- Está bien, si puedes pasa a comprar algo liviano para tu desayuno . - pidió mientras le sonreía - y ten cuidado en no lesionarte, disfrútalo mucho y relájate ¿Si? -

Qin le dio un leve beso y la frente al hombre y con una enorme sonrisa se despidió de todos.

- Es mentira el que vaya a entrenar. - dijo Simo sonriendo - de seguro va ir a espiar a Hades al gimnasio, con siempre hace. - aclaro causando la risa de algunos de ellos.

Adán miro a su esposa preocupado. Eso no aliviaba ese sentimiento de padre que le decía que algo andaba mal,pero no podía hacer mucho si su hijo no se los permite.