"Confesión No. 888" (Haqin) Shuumatsu no Valkyrie)

Capitulo nueve.

Llegó en la madrugada a casa,conversar con Adamás el resto de la tarde fue divertido. Aparte de la soledad y el rechazo, tenían gustos en común y además,entre ellos fueron capaces de darse consejos para sus técnicas de pelea.

Adamás le comento que pronto abría un torneo de Muay Thai en el que participaría y que se cambió de gimnasio porque escucho que su entrenador, Hefesto, era muy bueno en lo que hacía, por lo que necesitaba prepararse para su pelea con antelación. Así que a partir de ahora serían compañeros y se verán todos los días.

También le comento que tenía pareja (con la que salía desde la preparatoria ) y que practicaba el mismo deporte que ellos. Se llamaba Jakata, mismo que probablemente conocería mañana por qué hoy, por unos contratiempos para hacer un proyecto escolar,no pudo ir a entrenar.

Desde su punto de vista Adamás era más agradable, divertido y espontáneo que sus hermanos. No era grosero para nada y tampoco le hizo burla por la forma en la que acosaba a Hades. Era la primera vez que pasaba todo el día con alguien sentado en la banca de un parque tomando malteadas mientras hablaban de la vida y se conocían mejor.

Cuando se separaron y cada uno fue por su camino, encontró lamentable la situación familiar en la que estaba su compañero de toallas. Un chico así no debería de ser tratado como porquería.

Y se pregunto demasiado si debía comentarle dicha situación a sus hermanos Sakata y Kojiro. Por su propio bien le aliviaría un poco que se alejaran de personas tan malvadas. Sin embargo se dio cuenta de que no importaba lo que dijera. En primer lugar, no tenía pruebas de lo que les diría más que el testimonio de Adamás.

En segundo lugar,ya le había quedado bastante claro que sus hermanos ponían a sus parejas sobre cualquier cosa. Y aunque esa burbuja de amor en la que vivían se les terminase, jamás a visto a Poseidón y Zeus maltratandolos o diciéndoles cosas feas. Quizás estaban fingiendo, pero estaba seguro de que no le creerían absolutamente nada si no lo presenciaban ellos mismos.

De echo se imagino una situación referente a eso para ejemplificarlo en su mente. Incluso si Poseidón matase a 45 personas y el lo viera,manchado de sangre sosteniendo el cuchillo. Kojiro no le creerían en lo absoluto (probablemente le diría que estaba cocinando y que se embarro de salsa de tomate). Tampoco le ayudaría el echo de ellos creían que su actitud era inmadura, berrinches y que de seguro estaba asiendo todo un escándalo por qué estaba "celoso" de que un rubio feo y malvado tenía el corazón de su hermanito.

Y lo más importante de todo, no tenía el permiso de divulgar esto, de seguro eso le traería problemas a Adamás y no quería eso. Le confío información importante por qué sin motivo aparente confío en el así que estaba mal en muchos sentidos. Prefería callar antes de quedar como idiota (otra vez)

También encontró enternecedor que Hades fue el único que intentaré cuidarlo a pesar de todo. Pero también encontró injusto que permitirse todo eso solo por problemas que eran ajenos a todos (incluido el) y quizás. Eso bajo uno o dos escalones al albino del pedestal donde lo tenía. Entre más pensaba aquello,menos encontraba encantador a su amor platónico.

Cuando estaba a unos metros de su casa reviso su celular y brinco del susto ¡Era las 12:00 de la noche! Y tenía varias llamadas perdidas de sus padres!

- Mierda...- insulto mientras se daba prisa y corría a la puerta para entrar pronto a su casa.

En cuanto ingreso vio a su padre y madre,ambos con batas para dormir,sentados en el sillón esperándolo. Mirándolo con cierto enojo.

-  Se que es la primera vez que llegas tarde. - hablo de inmediato Adán levantándose de su lugar mientras veía a su hijo dejar tocas sus cosas - Ya eres un adulto, pero creo que sería justo que avisar al menos, estábamos muy preocupados por ti amor. - dijo mientras se cruzaba de brazos y lo miraba acercándose a él.

- Perdón papá,me quedé hasta tarde hablando con el entrenador.- también sería la primera vez que le mentiría así a su padre,pero no tenía opción - Eh... Decidido participar en un Torneo de Muay Thai. Y me estaba dando las bases para el registro y los ejercicios para su entrenamiento - al ver el rostro brillante de su padre ante su confesión se dio cuenta de que tendría que inscribirse de verdad por qué de seguro querrá verlo pelear - por eso no pude avisarte, lo siento mucho,no volverá a pasar! - aseguro para después volverse adorable, bonito y esponjoso y abrazar a su papá.

Con eso tuvo suficiente para obtener el perdón de su padre y luego de un pequeño sermón. Estaba apunto de irse a su cuarto cuando su madre le llamo

- Tus hermanos estuvieron esperándote para entregarte tu regalo de cumpleaños atrasado. - dijo Eva con una enorme sonrisa mientras señalaba el enorme regalo que podasaba en la mesa - Pero se rindieron cuando me no llegaste así que esperan dártelo mañana temprano. - explico dulcemente - Así que no salgas tan temprano para que puedan dártelo si? -

Qin miro el regalo con aburrimiento y algo de dudas. ¿Que sentido tenía continuar con esto? No importaba ciertamente. Solo lo hacían para aliviar su culpa de algo que, quizás no era para tanto

- Está bien. - acepto mientras subía al segundo piso - Buenas noches. -

.....

A la mañana siguiente, durante el desayuno. Le entregaron su regalo y cuando lo desenvolvió y vio que era un juguete que tanto quería. No sintió mucha emoción como las otras veces pero cuando miro a sus hermanos, al parecer esperaban que reaccionara como normalmente lo hacía. Siendo infantil, dramático y adorable.

Pero.. simplemente no podia.

- ¡Oh! ¡Muchas gracias! - dijo con una emoción tranquila mientras los miraba con ojos brillantes - ¡Los amo! - dijo mientras se levantaba de su silla y les daba un pequeño abrazo.

No era por querer ser dramático o mal agradecer el detalle. Amaba a sus hermanos,pero acepto que ya no iba a ver una cercanía tan geniuina como antes, más ahora que quería iniciar otra vez y como cada quien iba tomando su camino. Era incómodo por qué no encontraba la forma adecuada para acostumbrarse a eso.