Ella. [parte 1]

CAPÍTULO 12.

"Ever, nos vemos en la cafetería a la una, llévate una mochila con ropa para dos días y un bikini, confía en mí." Las doce, mierda, tiempo justo, me metí en la ducha deprisa mientras ponía la música a todo volumen. Secarme el pelo, vestirme, y hacer la mochila, y antes de salir cogí uno de los libros, miré el reloj, quedaban cinco minutos para la una, quería ser puntual con ella, era especial, era ella.

Allí estaba, con unos pantalones vaqueros claros, el pelo recogido en una trenza a un lado y una camiseta con un tigre blanco con el fondo negro, una chaqueta de cuero y una mochila negra con muchos petachos y pines.

Vino corriendo hacia mí, me abrazó agarrándome desde el cuello, y al reaccionar, le cogí fuerte de la cadera y le levanté del suelo. Mientras andábamos, le di el libro. Su sonrisa con el cigarro en la boca era preciosa, me cogió de la mano y me metió en un coche negro y pequeño, dejó las mochilas atrás y se sentó en el asiento de conductor, dejándome a mí a su lado. Puso música a todo volumen y me tapó los ojos con una bandana negra.

No entendía nada, ni siquiera podía seguir el camino por instinto, pero por lo recto que empezamos a ir, pensé que era la autovía, era todo tranquilo, y la música me encantaba, ella la cantaba en susurros, como si pensase que no me enteraba.

- Queda poco.- Noté como estaba sonriendo, y justo después, acercó su mano a la mía y la rozó casi como un soplo de viento entrando desde la ventanilla.

Llegamos a una casa de dos pisos y una buhardilla a primera vista, tenía un columpio de rueda y un sofá viejo pero bonito el porche que había subiendo dos escaleras. Era todo tan antiguo y precioso.

-¿Piensas entrar o te vas a quedar ahí hasta que el frio te haga entrar?- Dudé un momento y luego me acerqué a las escaleras, donde estaba ella con todas las mochilas.

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