NO ME IRÉ SIN TI

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PAULINE

Harper me sacudió para que despertara, me había quedado dormida en el escritorio de la oficina. El sonido estridente de unas alarmas perforaba mis oídos

-arriba, ya! -me lanzó un montón de ropa y cerró la persiana -vístete corre, no tenemos mucho tiempo
-que está pasando- desenredé la ropa y empeze a cambiar lo que traía puesto por lo que Harper me dio, era ropa mucho más cómoda y me daba más movilidad. Un pantalón caqui holgado y de tela gruesa junto con una blusa de manga larga negra de una tela elastica que no supe reconocer, por último me pasó una chamarra negra que parecía de cuero-porque la prisa? Y esas alarmas?
-el plan está en marcha, ellos están dentro
-ellos? Newt y Thomas?
-todos están aquí, cada quien tiene una misión, Newt y Thomas están dentro, yo tengo que sacarte a ti y a Aris de aquí
-quiero ver a Newt, la cura...
-lo se -ella metió un montón de cosas a una mochila-tenemos que movernos- ella sintonizó el Walkie talkie -Thomas! Donde están?
-no lo reconozco, están listas? Jensen sabe que estamos aquí y sabe que intentarán escapar, váyanse ya, nosotros iremos por Minho.
-bien, me las arreglaré, cambio y fuera -ella apago el Walkie talkie al tiempo que Aris entraba corriendo
-todo el maldito piso está cerrado Harper
-no importa, tengo un plan

No escuché que planeaba Harper, el pantalón tenía muchas bolsas y las aproveché para meter ahí las dos dosis de la cura que habías logrado hacer y una jeringa para aplicarla, tenía que encontrar a Newt, no podía quedarme ahí, pero sabía que Harper no me dejaría ir. Ella nos guio por los pasillos, los soldados que corrían por ellos buscando a Thomas y Newt ni siquiera se fijaron en nosotros

-en donde tienen a Minho?
-creo que hoy le iban a hacer una prueba, lo encontrarán en uno de los consultorios
-hay demasiados
-ellos lo encontrarán Pauline, sigue caminando

Yo apreté los labios, Harper estaba concentrada en buscar una puerta que no estuviera bloqueada o tal vez un pasadizo, no me entere como pensaba sacarnos, de cualquier manera no me quede para descubrirlo, en cuanto tuve la oportunidad di vuelta por un pasillo y corrí, si encontraba a Minho encontraría después a Thomas y Newt. Corrí por el pasillo, empezaba a obtener la atención de los guardias, así que tenía que moverme rápido, no podía ponerme a pelear con ellos. Di vuelta en una esquina, entrando a la zona de consultorios cuando lo vi. Primero salió volando del consultorio un guardia, después salió Minho, gritando como desquiciado

-Minho! -corrí hacia el, el se sujetó a mis brazos como para decirme algo, pero yo lo tome de la muñeca y lo jale por el pasillo- no hay tiempo, los saludos como se deben en un momento- lo guié por los pasillos hasta que nos alejamos del consultorio, entonces me gire lo lo abrase -Gracias a Dios estás vivo Idiota
-yo también estoy feliz de ver que Teresa no se salió con la suya contigo
-si, es difícil acabar conmigo -yo le sonreí. El momento fue roto por el sonido de disparo a cercanos, gritos y el sonido de una bomba de electricidad-devén estar cerca, vamos
-cerca? quienes!
-vinieron a rescatarte, bastardo afortunado

Ambos corrimos por los pasillos, Minho por delante de mi, no le tenía miedo a la muerte, se lanzaba como toro contra cualquier soldado que se nos cruzara. Yo me quede parada mirando mientras el se embestía contra un soldado y lo lanzaba contra la pared, pero me quede congelada cuando escuché dos voces conocidas gritando el nombre de Minho, y después los dueños de esas voces lanzándose en un abrazo contra el asiático, un rubio y un pelinegro. Era el, estaba ahí frente a mi

-está es real? -Thomas asistió ante la pregunta de Minho, yo me obligue a hablar, tenía un nudo en la garganta y una añoranza que no sabía que existía se instaló en mi pecho
-Newt...-el nombrado se giró hacia mi, su rostro expresó sorpresa y luego alivió antes de dirigirse con grandes zancadas hacia mi
-Pauline, realmente eres tú?!- el sujeto mi rostro, luego pasó sus manos por mi cabello ahora corto -que te hicieron mi amor...-sus manos se deslizaron hacia mi espalda y me pegó contra su pecho, apretándome con fuerza
-estoy bien- rodee su cuello con mis brazos mientras me pegaba más contra el con desesperación, no era suficiente. Sentía sus manos aferrándose a mi cabello y a mi blusa mientras acunaba mi cabeza contra su pecho -ahora lo estoy -me separe de él y sujete su rostro con ambas manos, buscando cualquier indicio de la llamarada en sus ojos. Estaban rojos, pero parecía que aún estaba lo suficientemente bien. El cerró los ojos y unió nuestras frentes
-no vuelvas a hacerme esto, creí que jamás te volvería a ver
-lo siento Newt, te a- no logre terminar la frase, un grupo de soldados aparecieron por detrás de nosotros. Newt reaccionó rápido, con una mano me empujó hacia delante y me obligó a salir corriendo.

No me iré si tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora