Reputation~PapuLince x PanaFresco~

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A decir verdad Luis nunca se había sentido asi de nervioso, algo tan simple como un tacto lo hacia volverse loco.

Más con la persona que le gustaba, verlo le causaba emoción, sentia su corazón acelerarse y sentir un torbellino de emociones al sentir mínimo un poco de la delicada piel de Miguel.

Le dolía el estómago, "¿Así es sentir mariposas en el estómago?" Pensaba Luis, sentía  que lo hacía estallar de amor delante de Miguel, aún que no lo pareciera y tuviera una expresión neutral en su rostro, por dentro era todo lo contrario.

El simple hecho de estar cerca de Miguel lo hacía temblar, incluso no le importaría si se declaraba y lo rechazaban, lo único que quería es estar con Miguel aún si fueran amigos.

¿Tan enamorado estaba?

Miguel al sentir el tacto delicado del contrario, volteo a su dirección algo exaltado, fue inesperado para el.

Más fue el nerviosismo de Miguel cuando Luis le proporciono una sonrisa cálida y recorfontante, aquella sonrisa que incluso lo calmaría si estuviera al borde del colapso, que lo hacía sentir un calor nunca antes visto en su pecho.

Obviamente Miguel no estaba seguro de sus sentimientos hacia Luis, nunca aceptaría tal "homosexualidad"

Pero estar cerca de el, sentir su respiración lo calmaban demasiado, era como su lugar seguro.

Tenía diversos traumas, tal vez como resultando ese comportamiento. Pero había otro lado de el, tal vez el cariñoso y tranquilo.

Y en ese momento, Miguel supo que Luis merecía ese lado de el, su trato tan gentil, sus palabras llena de sinceridad y esa mirada que nunca miente.

Simplemente Luis, todo de el era bueno.

Miguel miro a su contrario con un pequeño brillo en sus ojos, no se apartó en ningún momento, Luis lo hacía sentir diferente al resto.

Luis siguió acariciando sus dedos, llegando a su palma de la mano, donde movió circularmente sus dedos sobre la palma de Miguel.

No despegaban la vista uno del otro, cualquiera que viera la escena pensaría que en realidad si son gays.

Aún que estaban relativamente cerca, sus corazones se podían escuchar retumbando en su pecho.

Ambos se amaban, pero Miguel no lo podía aceptar, sería un largo proceso.

Luis podía escuchar la respiración del contrario.

Podía ver la cara de Miguel, ya que era más alto. Se veia como la persona más perfecta jamás vista, para Luis.

No quería perderlo nunca, quería estar cerca de el por siempre aún si tuviera que entregar todo de el.

¿O era solo un adolescente enamorado?

Seguían perdidos en lo suyo, aún que estuvieran en el salón.

Derrepente, la escena fue interrumpida por una chica de cabello rubio claro, y una ropa algo rara.

Fujoshi: si, sigan por favor, alimentenme

Aquella chica los miraba con una espectacular emoción, hasta cierto punto por algo era la rarita del salón.

Era esa típica morra que leía manhwas BL y estaba obsesionada con los ships gays.

Miguel se incómodo hasta esa situacion, no sabía que lo habían visto armando aquella escena tremendamente homosexual con Luis.

Miguel apartó su mano rápidamente y cambió su semblante a uno serio, dirigiéndose hacia la fujoshi.

- Tu no viste nada, pendeja