El Otro Hermano

Capitulo 2: Viaje Imprevisto

Paso toda la noche sin pegar un ojo en un rincón de la cama, si se movía un poco caería al piso. Estaba de lado y miro sobre su hombro al hombre que estaba acostado a pocos metros de él, Zee no le hizo nada, solo lo dejo tendido en la cama y solo se atrevió abrir los ojos cuando lo sintió salir de la habitación. durante toda la mañana no quiso salir de allí por miedo a encontrarse de nuevo con él, sintiendo que estaba en una prisión. El pasatiempo de su hermano era ser el señor de la casa sin tener que mover un dedo y él no estaba acostumbrado a pasar todo el día sin hacer nada. No vio más a Zee hasta en la noche que una empleada le informo que la cena estaba lista. Era lo único que tenía, mucha hambre, trato de mantener la compostura y comer despacio de forma educada. Pero la comida estaba deliciosa y la disfruto mucho bajo la mirada de Zee.

Cuando llegó el momento de compartir la cama, Nunew se metió del lado izquierdo bajo la sabana limpia con un olor agradable y espero a que Zee hiciera lo mismo. Ninguno de los dos dijo nada. La habitación tenía un sensor al sonido y las luces se apagaron en cuanto Zee aplaudió. Miro la hora en su celular. Eran las dos de la mañana y al parecer estaba profundamente dormido, no era como si fuera asaltar sobre él. Se movió un poco más al centro de la cama y se dispuso a conciliar el sueño, paso alrededor de dos horas hasta que por fin se durmió. Zee giro su cuerpo quedando de lado mirando al que creía su esposo que dormía boca arriba con la respiración relajada. Kuea se estaba comportando de una manera muy extraña que lo tenía confundido, ni siquiera permitió que lo abrazara como todas las veces, solo se giró hacia un lado y le dio la espalda ignorándolo por completo.

Por la mañana Nunew despertó algo adormilado y lo primero que se encontró fueron los ojos de Zee que no se apartaban de los suyos. Su cuerpo se paralizó en el acto y quiso salir de la cama, pero él fue más rápido, atrapándolo con sus fuertes brazos llevándolo hasta su pecho.

—Buenos días cariño, quiero un beso de buenos días. —Le recordó con una sonrisa traviesa.

Nunew busco las maneras para librarse de los brazos del hombre, Pero este le ganaba en fuerza. Zee puso una pierna encima de la de él, inmovilizándolo para que no pudiera escapar.

— ¿No tienes que ir a trabajar? — pregunto nervioso tratando de mantener la calma para no gritarle allí mismo que él no era Kuea. —Vas a llegar tarde.

—Pienso reservar un vuelo en primera clase para hoy en la tarde — comentó con una mirada profunda, mirando el hermoso rostro de su esposo. —Quiero que pasemos este fin de semana en la villa que rentamos en nuestra luna de miel.

Sus ojos estudiaron en rostro de Zee con pánico, según la información que había leído, ese hombre tenía tanto dinero que rento una villa de lujo en Creta (Grecia) esta villa estaba alejada del pueblo en una pequeña isla. Así que él no podría escapar si las cosas se ponían difíciles.

—Yo.. ...Yo no quiero ir —hablo con tono firme — porque mejor no nos quedamos aquí, este lugar ese demasiado grande y podemos pasarla bien.

Zee agarro el mentón de Nunew con un poco de fuerza para que lo mirara mejor. No le estaba gustando la actitud tan evasiva de Kuea, era como si le tuviera miedo y no quería estar a solas con él.

— ¿Me amas Kuea? —quiso saber con seriedad, ¿De verdad me amas?

Nunew no se esperaba esa respuesta. Ni siquiera sabía si su hermano lo hacía o solo se casó por hacer feliz a esa mujer ambiciosa. Pero no tenía otra opción que mentirle y se sintió mal por Zee, se veía que el si lo amaba.

—Si... te amo — susurro en un hilito de voz, viendo como los labios de Zee se curvaban en una sonrisa feliz.

No le dio tiempo a reaccionar, solo se quedó allí, paralizado entre sus brazos, mientras Zee besaba sus labios con ternura. Podía sentir su boca sobre de la suya tanteando para que correspondiera el beso, sus ojos estaban apretados y su cerebro era un dilema. No podía seguir de esa forma, si le dijo que lo amaba, todo ese mes no podía rechazar sus caricias, Entre abrió sus labios dejando que Zee lo besara y explorara su boca. Fue un beso lento, nada apasionado, Pero dejo a Nunew muy afectado psicológicamente. Nunca pensó en toda su vida que iba a tener ese tipo de intimidad con un hombre, él no era una persona homofóbica, incluso su mejor amigo era gay y nunca le importo ese hecho. Pero que él lo estuviera haciendo con el esposo de su hermano gemelo era otra cosa.