Capitulo 7: Una Mentira Tras Otra

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Una vez que llegaron a Tailandia Zee lo ignoro por completo, ni siquiera almorzó en la misma mesa porque salió con Jeff vaya usted a saber, porque tampoco tuvo la decencia de decírselo. Solo se quedó solo en esa gran mansión con Janis que no lo dejaba de molestarlo y a la vez de preocuparlo de que Jeff estuviera tan cerca de Zee. Se sentía cansado tanto física como emocional, se despidió de su amiga para ir a tomar una siesta y de esa forma pensar en lo que hablaría esa noche con el esposo de su hermano. Se recostó en la cama, mirando un mensaje de Ratana dónde le pedía que se vieran el día siguiente en la mañana, el también necesitaba hablar con ella de los planes de Zee acerca del divorcio, seguramente se iba alarmar por la noticia, pero después de ese mes, él no pensaba seguir en esa mansión. Sus ojos se fueron cerrando poco a poco cayendo en un sueño profundo.

El tiempo se hizo eterno que cuando despertó estaba casi anocheciendo y no sabía nada de Zee. Busco su número en sus contactos para llamarlo, pero se detuvo al hacerlo, ¿porque que podía decirle? Salió de la cama con rapidez y fue a ver si ya había llegado. Para su sorpresa estaban los tres en la sala de estar mirando una película de terror. Janis estaba sentada un poco alejada de la pareja que estaban pegadas como chicle y sus ojos fijos en la pantalla.

—Interrumpo — vocalizo con cierta molestia al ver que Zee seguía ignorándolo, ¿acaso por eso había llegado a Jeff a su casa? para demostrarle que podía tener a cualquier hombre si se lo propusiera. Sin embargo se iba a llevar una gran disolución.

—Por supuesto que no interrumpes nada Kuea — pronunció Zee con frialdad, si verlo por un segundo —si gustas puedes unirte a nosotros.

—Pienso salir a divertirme fuera —comunicó haciéndolo una seña a Janis para que lo acompañara —no me esperes despierto cariño, — esa última palabra la pronunció de forma burlona, captando la atención de Zee.

Agarro a Janis por la mano y salió de la vista de Zee que no tardo en ir detrás suyo molesto por la actitud que estaba tomando. Janis ya había entrado al auto cuando Nunew fue detenido con fuerza,

¿A dónde piensas ir? ¿Acaso te volviste loco?

Hasta que por fin se dignaba a verlo, pensaba hacerlo sufrir por ignorarlo toda la mañana y desaparecer con Jeff sin decirle nada. Le iba a dar una cucharada de su propia medicina.

—Por qué tendría que volverme loco, solo quiero irme a divertir con mi única amiga, ¿tiene algo de malo eso? Tú pásate toda la tarde con tu mejor amigo ¿porque yo no puedo hacerla con la mía?

Zee apretó los puños con fuerza para no llevarlo casi arrastra dentro de la mansión y encerrarlo en la habitación. Toda esa situación lo tenía confundido hasta el punto de sentir desesperación. Mientras más lo veía no podía creer que ese era el hombre con quien se casó. Kuea no le gustaba salir y mucho menos a divertirse fuera. No podía seguir de esa manera, necesitaba encontrar respuesta para todo lo que estaba pasando.

—Si quieres divertirte, muy bien, solo que te vas a divertir conmigo — expuso con seriedad Saco a Janis del asiento del copiloto y en su lugar empujo a Nunew sin ninguna delicadeza, y se sentó a su lado. Arrancando el auto a toda velocidad.

— ¿A dónde me vas a llevar? — quiso saber sorprendió por su reacción, nunca se imaginó ver al hombre que decía amar mucho a su hermano tratándolo de esa manera, aunque él no era Kuea y no contaba para que Zee lo tratara con delicadeza.

Zee apretó el volante con fuerza mirando al frente. Estaba muy molesto al punto de querer golpearlo para ver si así podía volver hacer el de antes

—Dijiste que te quieres divertir, tengo un amigo que tiene un club que es muy famoso, el lugar perfecto para divertirse

El Otro HermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora