Bienvenida

54 6 1
                                    

Cuando le levanté algo confundida ya que esa habitación para mí era diferente a la habitación en la que desperté estos últimos años además de que a mi lado no estaba Sasori.
Ayer antes de dormir lo llame solo para decirle que llegue bien a casa nada más estaba muy cansada.
Después de caer en cuenta que estaba en Japón con mi familia me acerque a la ventana para contemplar el paisaje, los árboles estaban más grandes había flores diferentes, seguramente mi mamá había echo cambios en su amado jardín y como no podía ser diferente a mi mamá se notaba el empeño que seguramente le había echado, estaba hermoso lleno de rosas blancas y rosas. Ya que no le gustaban mucho las rosas rojas como a mi que prefería las rosas rosas como yo.
Una vez echo mi escrutinio superficial por mi casa me dispuse a bajar las escaleras para ir a la cocina tenía mucha hambre e iba desayunar para luego ir al hospital.
Escuché ruidos supuse que serían las empleadas, pero no era mi papá que estaba tomando un café ya listo con su traje de seguro para ir al trabajo.
- Papá bien día - me acerque a él y lo abrace por la espalda, lo había extrañado tanto que recién caí en cuenta en eso.
- Hay por dios Sakura, me asustes - dijo asombrado y confundido por mi presencia y volteo a verme - Cariño cuando llegaste y por qué no dijiste nada.
- Bueno llegué ayer en la noche y quería que fuera sorpresa - lo volví abrazar pero estaba vez de frente, podía escuchar su palpitar y pese a todo agradecí estar de nuevo con mi papá, poder sentir ese abrazo fuerte y lleno de amor, y sabía que el también me necesitaba mi hermana y yo siempre fuimos su prioridad y con lo de Karin debe estar destrozado y aunque no era el momento me alegre y el igual y saber que algo puedo aliviar su carga era suficiente para mí. Por qué mi papá siempre decía que Karin era su felicidad pero que yo era su orgullo. Y poder ser su felicidad en este instante y momento era lo mejor que podía hacer .
- Hay .... papá te extraño tanto - y lo apretuje un poco más fuerte
- Yo igual cariño y no sabes cómo te necesitaba ahora me siento completo - y como nunca lo ví, sus ojitos se aguaron con lágrimas que no iba a salir por qué se estaba controlando.
- Lo se papá..- suspire, no quería agustiarlo pero tenía que preguntar - y como está Karin.
Abrazándome más fuerte me dijo.
- No muy bien, sigue con contracciones.
Y no era médico ni nada parecido y no entendí bien esa simple oración y mi papá se percato y me explico.
- Al parecer tu sobrino ya quiere nacer y Karin ya presenta contracciones.
- Pero si recién está en sexto mes - dije contrariada.
- Ese es el problema, aún es muy prematuro para nacer, como mínimo tendría que estar de 30 a 34 semanas.
- Y pero entonces que harán? - no sabía que más decir.
- Pues Karin deberá quedarse en Hospital dónde los doctores están haciendo lo posible para controlar las contracciones y hacer que el bebé pernanesca lo más que pueda dentro de Karin y que pueda nacer dentro del rango para que sus órganos por lo menos puedan aguantar una incubadora.
- Hay...no papá es muy triste, pobre Karin .
- Si todos estamos preocupados, el más afectado aparte de Karin es Sasuke está totalmente derrotado. Tu hermana ya sabes cómo es está tratando de sobrellevarlo pero Sasuke no le ayuda mucho, ya que está muy pesimista y asustado.
- Si debe ser, para Sasuke su hijo lo es todo.- Dije pensativa, como podía ayudarlos.
- Y mamá como está
- Hay..no ya sabes cómo es tu mamá está echa un mar de lágrimas esta inconsolable, pero tú llegada le ayudará.
Y si mi mamá debía estar peor, su primer nieto y su hija no están bien y con lo sobreprotectora que es. - Eso espero, poder ayudar ya que a eso vine. -
- No sabes cómo te agradezco que estés aquí de nuevo, en tu casa. Y con nosotros por qué creeme hija te hemos necesitado mucho
Me remordia la consciencia, ya que con mi ilusión de Sasuke había olvidado a mi familia y mi afán de olvidarlo me hizo dejar de lado muchas cosas que amaba. Y después de tiempo estaba considerando quedarme definitivamente - Lo se papá y perdóname por ser egoísta y negarme a regresar - y sin más me puse a llorar.
- No...cariños no llores, no te reprochó nada, se que la carga que pienso dejarte no es fácil y no puedo exigirte más de lo que puedas darnos .
Parecía una niña chiquita, llore como nunca, como si me hubiera perdido y mi papá por fin me encontró y lo víera después de escaparme.
- Ya bueno basta de llorar - me limpie los ojos y me puse sería - Ahora Karin nos necesita fuertes y serenos, en que hospital está necesito verla.
Mi papá igual se puso serio, miró su reloj y dijo - Si puedes estar lista en media hora te puedo llevar de paso a la empresa.
- Está perfecto papá, me cambio y vamos.
Pasados la media hora baje a la sala. Y sin más el chófer nos llevó. Cuando llegamos al hospital Senyu mi papá me ofreció al chófer para que pudiera pasar a recogerme y me negué, le dije que volvería a casa con mi mama.
Con las prisas me olvidé preguntarle en qué habitación o piso estaría Karin y bueno el hospital no era muy grande pero se veía que era muy costoso por qué las instalaciones se veían muy de lujo.
- Buenos días, la habitación de Karin Haruno.
- Buen día - respondió una mujer de edad avanzada pero que se veía muy amable - su identifico por favor.
Saque mi documento y se la entregué. Y se puso a buscar por su ordenador.
- Perdone pero no encuentro a una pasiente con ese nombre.
La mire confundida, pero que tonta debía estar de seguro registrada como Karin Uchiha.
- Perodne, debe estár con su apellido de casada Karin Uchiha por favor.
- No se preocupe - y volvió a mirar en su ordenador y volver a teclear - está en el piso dos habitación 32.
Ok muchas gracias.
Me acerque a un ascensor y me diriji dónde mi hermana. Estaba nerviosa iba a ver a Karin y seguramente también Sasuke está ahí acompañando a mi hermana.
Vi la habitación en la que está Karin, estaba frente a la puerta con los sentimientos revueltos entre preocupada , asustada, anciosas entre otros más. Toque la puerta levemente esperando una respuesta y escuché un pase.

Quédate conmigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora