No soy Gordito [Gunjin]

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Perdido. Gunwook no cree verse de ese modo, tan pensativo, cuestionando aquella noche en la cena. Es como si fuese tan difícil expresarse que sentía, esas emociones negativas. Yujin lo confundía.

Su bonito crush lo estaba ignorando, en todo el transcurso de la cena, no pudo intercambiar palabra alguna. Yujin parecía huir de él y eso lo hería.

Se detuvo tomando una bocanada de aire y secando el sudor de su frente. Estaban en horas de entrenamiento, unos corriendo, otros practicando con los balones y unos ejercitándose.

Sentía la mirada del entrenador encima, seguramente estaba al tanto de su salud.

— ¡Park! — escucho la voz del mayor, quien lo miraba con el entrecejo fruncido. Gunwook movió sus manos en forma de tranquilizarlo.

No le gustaba llamar la atención, sentía unas miradas extrañas de los chicos. Suspiro, lo único que rondaba en su mente era hablar con Yujin, era lo único que quería en ese momento.

Su vista se puso borrosa, flaqueó por un momento, estaba muy cansado y ese día estaba siendo un ignorante en exigir más a su cuerpo, no estaba prestando atención como debía y eso lo molestaba.

— ¡Hey, Park! — escuchó un grito.

Al mirar a su costado sintió algo golpearlo con fuerza en el centro de su nariz. Cómo si fuera en cámara lenta, sintió su cuerpo caerse de espaldas y un fluido espeso empezó a recorrer por su mentón. Escucho varias voces a su alrededor, el sol le dió en los ojos y jadeó, tratando inútilmente ponerse de pie. Sin embargo, por lo cansado que estaba... se desmayo allí mismo.

— ¡Llevenlo a la enfermería ahora! — Ji-ho y WonHo ayudaron a Yeonjun para al inconsciente de Gunwook, llevándolo inmediatamente a la enfermería del instituto.

— Es mejor cancelar el entrenamiento de hoy, señor — Gyuvin suspiró, tomando un sorbo de agua y preparar su mochila. Frente a él, estando aquel mayor Alfa viendo como llevaban a Park.

— Avisa a todo el grupo que tienen está semana para descansar. No creo que Gunwook este en las mejores condiciones para el partido — dijo bastante serio, para después suavizar su molestia. Park era uno de sus mejores jugadores, por eso mismo había sido escogido como el capitán del equipo — ¿Sabés si algo está pasando para que tenga este descuido?

— Uhm... Señor, se que Gunwook me querrá matar después por decirlo. Pero creo que tiene problemas con su Omega, hace unos días hubo una cena en su casa con la familia de su pareja... Tal vez algo salió mal.

Kim ocultó su sonrisa al ver la sorpresa en el rostro del mayor.

— ¿Tiene Omega?

— Si, ¿Conoce al Alfa Han Yun-sik? — tanto Gyuvin como el entrenador conocían perfectamente al hombre, ese intimidante y poderoso Alfa. El mayor asintió, imposible de creer — El hijo del Alfa es Han Yujin-

— ¿El Omega de Gunwook es... Es el hijo del Alfa Han Yun-sik?

— Han Yujin es el Omega de Park Gunwook.

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Pasando por los pasillos, Yujin comía uno de los tantos pastelitos que las trabajadoras de la cafetería le daban en secreto — por ser tierno con ellas, le decían —. Buscaba un tranquilo lugar donde no hubiera interrupción, hace unos minutos había tocado el timbre y agradeció que la malvada profesora de Matemáticas faltará, no había hecho su trabajó.

— Mh, ¿Y si voy...? — silencio sus palabras escondiéndose en una esquina y ver a unos metros a aquellos compañeros de Gunwook salir de la enfermería.