eighteen.

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Ya habían pasado 8 meses desde el accidente

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Ya habían pasado 8 meses desde el accidente.
Suho se había recuperado pero Ji-hyun aún estaba en coma.
Seo Jun volvió a ser el de antes,
el rudo y que se metía en problemas
Su madre no podía detenerlo, sabía que lo pasaba mal; lo escuchaba rezar cada noche para que su chica despertase.
Porque no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes, y se dio cuenta de lo mucho que amaba a Lee Ji-hyun.
Su plan se había ido al traste, no le gustaba Jukyung, y con Suho se habían hecho un poco más cercanos.

La madre de Seo Jun estaba como siempre haciendo el acompañamiento de Ji-hyun.

Ji-hyun estaba atrapada en un sueño, se repetía el mismo día del accidente de coche.

Estaba esperando a que llegase Suho de la empresa corriendo y lo atropellasen a él, intentaba cambiar el final pero no despertaba.

Hasta que el escenario cambió.

—¿Qué es esto?—preguntó y escuchó a mucha gente en la calle gritando.

Miró arriba y era Se-yeon.

Había vuelto a ese día.

Subió la escaleras a toda velocidad y vio a Se-yeon.

—Ji-hyun.—la llamó y extendió su mano.—Cae conmigo, es la única forma de escapar.

—¿Qué dices?—le gritó Ji-hyun.—¡Vamos a casa!

—Para que puedas ir a casa, tienes que tirarte conmigo.—le insistió.

—¡No! ¡Moriremos los dos!

—¿Crees que todo esto es real? Estoy en tu cabeza Ji-hyun, se todo lo que ha pasado y porque estás aquí.—dijo Se-yeon.—Tienes que tirarte conmigo.

—Pero volveré a perderte.—dijo Ji-hyun.

—Nunca me perdiste Ji-hyun, siempre estuve y estaré contigo.—dijo Se-yeon.—Ahora, tírate conmigo. Es la única forma de escapar.

El mensaje fue interpretado de otra manera, ¿si saltaba saldría del bucle vicioso?

Tomó la mano de Se-yeon y se miraron.

Se-yeon se dejó caer y arrastró a Ji-hyun con ella.

Ji-hyun cerró los ojos con fuerza.

Cuando los abrió estaba en el hospital, respiraba con dificultad.

Sus oídos pitaban, y no solo porque muchas máquinas lo estuvieran haciendo a su alrededor.

La madre de Seo Jun se asustó y vio a la chica con los ojos abiertos.

—Ya estás a salvo, Ji-hyun, ya estás a salvo.—dijo tomándole de la mano.—¡Doctor!

En eso vino el doctor Kang, el padre de Soojin.

𝐈𝐍𝐃𝐄𝐋𝐄𝐁𝐋𝐄 (han seo jun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora