𝐆𝐨𝐨𝐝-𝐨𝐥𝐝 𝐅𝐚𝐬𝐡𝐢𝐨𝐧𝐞𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐫 𝐁𝐨𝐲 / ᴄʜᴀʀʟʏ ᴀʟʙᴇʀᴛɪ

«Let Me Entertain You»

Valentina

28/12/'86

Al día siguiente del Badía y Cia, a los Soda los invitaron una "pequeña" joda. Junto al equipo de trabajo de ellos. Muchos no fueron. Solo fui yo y porque los tres me insistieron como nunca.

Me levanté un poco menos temprano ese día. Más o menos a las 10:30 de la mañana. Damián llevaba un rato despierto, hoy no tenía trabajo y yo, bueno, técnicamente tampoco, pero los chicos me habían invitado a pasar el rato con ellos. Tenía todo el día para pasar tiempo con mi novio, pero por la tarde, y quizá noche, mi tiempo les pertenecía a los Soda.
Saludé a Damián como todos los días, con un beso. Él estaba todavía en la cama. Pero se encontraba leyendo un libro. Tenía todavía la cara con algo de sueño, los ojos más cansados de lo normal, su mirada siempre era así. Pero cuando recién se levantaba es mucho más notable. Sus ojos azules también brillaban aún más. Me daba cierta ternura.

- ¿Te levantaste temprano? - Le pregunté, él asintió mientras sonreía poco a poco. Esa sonrisa significaba que muy a penas y había podido dormir. - ¿Ni siquiera dormiste no? - Él negó de nuevo. Manteniendo esa sonrisa en su rostro. Le rodé los ojos. Me molestaba que no durmiera lo suficiente. Una vez se quedó dormido en el transporte y le robaron la plata que tenía.

- Es que me dió insomnio - Agrego con un tono de voz más suave.

- Me dí cuenta. - Suspiré. - ¿Que paso para que no pudieras dormir? - Le pregunté y él me miró fijamente. Su mirada decía que era una razón bastante preocupante. - ¿Damián? - Le llamé.

- Trabajo, nada más. - Sacudió su cabeza para concentrarse. Asentí.

- ¿Algo en especial? - Él negó de inmediato.

- No, vos tranquila. - Me dijo. - ¿Y como vas con el grupo? ¿Soda Stereo me dijiste que eran? - Volvió a preguntar.

- Bien, todo salió bien ayer. Hoy los invitaron a una fiesta y voy a ir con ellos porque me insistieron - Solté una risita y él me sonrió igual de divertido - Y ya eso es todo. - Finalicé y él asintió.

- ¿A qué hora va a ser? Para, si querés, llevarte allá. - Yo lo miré. Me había olvidado preguntar él horario. Sabía que era en la tarde, pero no a qué hora.

- En realidad, creo que no pregunté a qué hora era. - Él se estalló en risas. - Bueno, no te rías, me olvidé. - Damián negó aún riendo.

- ¿Por qué no los llamas y así preguntás? - Me dió una idea que obviamente tome. Pero primero tenía que darme un baño. Necesitaba despertarme por completo así que eso fue lo que hice. Me dirigí al baño y me metí en el agua unos 20 minutos o tal vez un poco más. No sé.

Cuando salí ya tenía mi ropa que me iría a poner ese día. Me vestí lo más rápido que pude y baje ya estando lista, me había cepillado el pelo, y todo eso.

Damián estaba haciendo el desayuno. No sé que estaba cocinando pero olía bien. Normalmente él cocina más que yo. Cabe aclarar que yo no lo obligo, a él le gusta cocinar.

- Buenos días, otra vez. - Saludó él estando de espaldas.

- Buenos días, otra vez - Repetí sus palabras. - ¿Que cocinás? - Pregunté y él giró su cuerpo para mirarme.

- Adivina. - Pensé por un momento. - ¿Te digo? - Volvió a preguntar, se veía incluso más curioso que yo. Asentí con la cabeza para que me dijera. - Lasagna. - Dijo, y yo estaba a nada de ponerme a saltar como idiota. La lasagna es mi comida favorita y más si la hace él.