Capitulo 1

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Una día, Kageyama al salir de la práctica hace el mismo camino que siempre, no cambia nada. Al llegar a la parada de autobús, se encuentra con un diario tirado en el suelo. Él por curiosidad lo agarra y al revisarlo ve que esta vacío, así que se decide quedarse lo.
Al llegar a su casa empieza hacer su tarea pero al ver el diario en su bolso decide tomarlo y empezar a escribir en el.

14 de abril
Hoy me encontré este diario tirado en la parada del autobús, no sé para que estoy escribiendo en el,es una idiotez, pero para algo me va a servir ¿No?

Con eso, Kageyama deja el diario devuelta en su bolso, termina su tarea y se va a dormir para otro día.

*Al día siguiente*

Kageyama estaba llegando a la escuela cuando escucha a Hinata gritando detrás de el y cuando se quiere dar cuenta, esté ya lo había pasado, así que Kageyama empieza a correr a la par de el. Cuando estaban llegando a su destino Hinata se tropieza con algo y Kageyama sigue corriendo, pero se detuvo antes de llegar a la escuela.

-¿Qué me pasa? -murmuro confundido-.

Con eso se dió la vuelta y fue a ver como estaba su compañero. Cuando se acerca, se fija la herida para ver si no es grave. Hinata lo mira confundido.

-¿Estás bien, Kageyama? -pregunto aturdido-.

-eso debería preguntar yo -dijo el a cambio-.

-tenias la victoria en tus manos -pregunto la mandarina-. ¿El rey se arrodilló ante un plebeyo? -pregunto de vuelta riendose-.

-cállate, idiota. Si no te dejo acá a tu suerte -dijo el rey molestó-.

Hinata hizo un cierre invisible en su boca y Kageyama no puedo evitar mirar sus labios tentadores. Hinata lo de volvió a la realidad con un grito, esté se percata y decide mirar para otro lado como si estuviera apenado.

-ven te llevaré a la enfermería -Hinata asiente-.

Cuando llegan a la enfermería Hinata le dice que no se preocupe que estará bien, Kageyama asiente y se va para su salón.

En el trascurso de la mañana para Tobio fue aburrida. En una de sus clases dejo de poner atención y por aburrimiento agarro su diario y empezó a escribir.

15 de abril
Hoy me pasó algo raro... Estube haciendo carrera con Hinata para ver quién llegaba primero, pero cuando el se tropezó me sentí culpable asi que fui a ayudarlo. Vi un poco sus labios y...
¿Qué mierda me está pasando?
Como sea, voy a dejar de pensar en eso porque me voy a volver loco en cualquier momento.

Con eso Kageyama dejo el diario guardado en su bolso y siguió prestando atención o eso es lo que aparentaba.

*Luego de clases*

Ya después de clase, Kageyama fue a cambiarse para la práctica. Una vez cambiado, todos los del equipo lo estaban esperando y su dupla también lo estaba esperando ansioso.

- Kageyama, hazme colocaciones hasta que llegue el entrenador -dijo Hinata, ansioso-.

- está bien.

Con eso, practicaron una rato y a Kageyama le gustaba colocar para Hinata, aunque el nunca lo iba a admitir delante de nadie, claro.
Cuando llegó el entrenador, empezaron hacer remates, servicios, colocación, recepción, etc. Al final de la clase tuvieron un partido de práctica con la asociación de vecinos para poner en práctica todo lo aprendido.
La asociación de vecinos tenía el punto del partido y en un momento Hinata va hacer un remate para igualar el partido, pero falla el remate y gana el equipo contrario.

-¡Serás idiota, Hinata! -dijo Kageyama muy furioso-.

El enano no tenía escapatoria de la furia del rey, pero Sugawara llegó a tiempo antes que pasara a peores.

- tranquilo Kageyama, fue solo un error -dijo el mayor para calmarlo-.

- pero eso nos costaría en un partido oficial.

- así es, por eso no hay necesidad de enojarse cuando Hinata sabe mejor que nadie sus errores -dijo para finalizar y eso funcionó ya que calmo bastante a Kageyama-. Bien limpiemos todo antes de irnos ¿Si?

- Si

El entrenador vio toda la secuencia y eso lo puso nervioso.

- ehh... profesor Takeda -el nombrado miro a Ukai, el cual esté esta nervioso-. Necesito hablarle sobre Hinata y Kageyama.

- ¿Que sucedió con ellos, Ukai?

- pues vera... Últimamente Kageyama y Hinata han estado no se si la palabras es peleando o discutiendo, pero han estado raros.

- pues es verdad que están más raros de lo normal pero eso de seguro ya se pasará -dijo el profesor, pero al ver que no se quedaba tan tranquilo el entrenador, dijo algo más-. Pero si no está tan seguro pregúntaselo a ambos.

- de acuerdo... -dijo finalmente el entrenador-.

El diario de Kageyama TobioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora