Predestinada a sufrir.

XVIII

26/Mayo/22

Que necesario es un diario.

Aceptar que alguien puede amarnos por
lo que somos, por esos pómulos y labios carnosos, aún tenía los labios húmedos e inflados por todos aquellos mordiscos, pertenecernos, estar juntos, estar abrazados.

Nuestros latidos se aceleraron, nuestras respiraciones se fundieron. Rozándola, quemándola, haciéndola, su mirada me penetró el alma.

Extraño ir al gym que al hacer los ejercicios y un hombre me vea raro me cuides, que en los descansos hablemos y me motives, que al terminar me esperes y de tu agua me des, que me beses, que mis piernitas toques, que mi cuello muerdes, que mis nalguitas aprietes.

Confiarle mis preocupaciones, dejarle tocar mis temores y mis inseguridades. Nunca creí en un final feliz hasta que lo viví , tardaste mucho en llegar a mí, pero ya estás aquí.

-Mi vista sólo tiene ojos para ti, mi corazón sólo tiene latidos para ti, mi cuerpo sólo tiene gemidos para ti.

-Mirame y dime qué siempre estarás conmigo.

Siempre quería que me vieras sonriendo aunque por dentro estuviera sufriendo, siempre quería que me vieras riendo,
aunque por dentro estuviera muriendo.

Hoy la cague y tal vez no te escuche, pero te implore, por un hombre tan sólo llore, no sé cómo fue que llegaste, te quedaste, mi corazón ataste y ahora no sé cómo safarme.

Tengo miedo de no volverte a ver, tengo miedo que te alejes, tengo miedo de ese lado serio que sólo se quedaba callado, eres el pecado más bello que jamás había visto.

Siempre sonreía aunque tuviera un mal día. Estoy preocupada tan sólo contesta, estoy desesperada no sé si has llegado a casa, estoy atorada en tu mirada.

Escribiré cada vez que pase.