¤《 Falso Matrimonio 》 ¤ -Ulquihime

CAPITULO 9 "EL PASADO LE ALCANZA"

CAPITULO 9 "EL PASADO LE ALCANZA"

Una remodelación de una pequeña casa era agotador, no se había dado cuenta de eso hasta que comenzó con el proyecto. Tenía el dinero pero el tiempo y la energía le eran insuficientes, iba continuamente a una institución de obras benéficas, y después se dedicaba a ver los planos con el arquitecto que se encargaba de la remodelación. Esa tarde venía de una larga junta con las mujeres del comité de obras, estaban planeando una fiesta para los desamparados de la ciudad, las ideas no eran lo suficientemente buenas para llevarlas a cabo, nunca pensó que pudiera ser tan agotador el formar parte de algo así.

Llegó a la oficina del arquitecto con diez minutos de retraso, la secretaria al verla la detuvo.

-Señora Schiffer, su cita era hace diez minutos, el arquitecto…

-No pasa nada – dijo el arquitecto desde la puerta de su oficina – para la señora Schiffer siempre tengo tiempo, vamos, tengo nuevas ideas.

-Gracias señor Ishida ¿sabe? Ahora no tengo tanto tiempo pero…- decía Orihime al ver al arquitecto con un aire tan resuelto.

-Vamos señora Schiffer, los planos ya casi están listos – dijo el arquitecto – tráiganos café.

-Enseguida señor.

Orihime paso al lujoso despacho y vio la mesa llena de planos desordenados. Era la oficina de un empresario con éxito y ella estaba ahí de paso, esperaba no quedarse mucho, Ulquiorra quería ir a una comida con unos socios y la mataba si llegaba tarde.

-Conseguir a una secretaria eficiente es difícil pero me imagino que es normal – dijo el arquitecto mientras llevaba el mismo el café. - ¿Le gusta con azúcar?.

-No se moleste, de verdad no tengo mucho tiempo.

-Entonces ¿por qué no viene y le voy mostrando los planos?.

-Sí, buena idea – dijo Orihime levantándose al ir hasta la mesa con los planos.

-¿Lo ve? Ya está la planta baja, faltan los detalles que me gustaría elegirlos con usted – dijo el arquitecto - ¿Qué le parece?.

-Perfecto -dijo Orihime sonriendo – lo discutiremos después, cuando ambos tengamos tiempo y…

-Yo siempre tengo tiempo para usted – dijo el hombre acercándose a ella. – es usted una de las mujeres más elegantes que conozco ¿lo sabe?

-No debería decir esas cosas- dijo ella sonrojándose – olvídelo.
-Solo digo la verdad – dijo el sonriendo.

Entonces el celular de Orihime sonó distrayéndola. Busco nerviosa en la bolsa hasta que lo encontró, lo contestó y se volteo.

-Ah!, si no me tardo - dijo en voz baja – estoy en la oficina del arquitecto… bueno, pensé que tenía tiempo… cariño, ya basta, llegaré a tiempo.

-¿Tu esposo? – preguntó el hombre algo serio.

-Sí, tengo que irme – dijo ella seria – nos veremos después ¿está bien?.

-Bien – dijo el hombre sonriendo – espero su llamada.

-Por supuesto.

Orihime salió del despacho con prisa, tomó un taxi lo más rápido que pudo y se arreglo lo mas que pudo, estaba agotada y la cena era en menos de diez minutos y el taxi iba despacio, así que le apuro lo mas que pudo y cuando llegó al recinto entró caminando lo más rápido que pudo, y entonces vio a su esposo de pie con sus socios esperando aparentemente por ella.

Se sonrojo y se acerco, cuando la vieron los socios se quedaron callados, esto les molesto ¿tenía algo de malo en la cara o qué? Aún así no dijo nada. Notó que era la única mujer en la comida y esto le hizo pensar que quizás no debería estar ahí.