¤《 Falso Matrimonio 》 ¤ -Ulquihime

CAPITULO 14 "AMENAZA Y ACTÚA"

CAPITULO 14 "AMENAZA Y ACTÚA"
Había estado al pendiente de las noticias e incluso llamó al departamento de policía para averiguar acerca del atentado, pero no lograron atrapar a nadie, y eso lo enfurecía. Su esposa estaba delicada gracias a la idiotez de algunos hombres que andaban sueltos. Tenía la idea de quien había sido pero si era cierta su teoría entonces las cosas llegarían muy lejos.

Vio a su esposa moverse inquieta, desde el atentado había estado extraña, distante con él y tenía pesadillas cada noche, el psicólogo del hospital le dijo que sería normal, pero le preocupaba de sobremanera que esto pudiera hacerle daño a su hijo, Un trauma post atentado era llevadero en cualquier persona normal, pero su esposa estaba embarazada y era joven, nada bueno.

Le toco el hombro para tratar de calmarla sin despertarla. Pero no resulto, en su lugar Orihime se despertó bañada en sudor y terriblemente asustada, su respiración era agitada y aún trataba de calmarse. Por puro instinto le rodeo con su brazo y la atrajo hacía el, ella se abrazó a él y comenzó a calmarse poco a poco.

Tener a Ulquiorra a su lado ciertamente le ayudaba a calmarse y es que los últimos días las pesadillas no la dejaban dormir, durante el día las dudas de si debería decirle o no a su marido sobre sus sentimientos la preocupaban y en la noche eran las pesadillas.

Cada uno de los días se había tratado de contener pero esa noche necesitaba que él la abrazara y la consolara.

-Vuelve a dormir – le dijo suavemente Ulquiorra. Orihime se recostó pero no le soltó.

Solo puedo ver las caras de esas personas…

-Todo va a estar bien, no nos pasó nada – dijo Ulquiorra haciendo caso omiso de su brazo herido.

-Pero tu si…

-Estoy bien, un pequeño precio por mantenerlos a salvo.

-Ulquiorra…

-Duerme, estas cansada, si no me vas a obligar a darte pastillas para dormir, no quiero verte cansada.

-Bien – dijo Orihime a regañadientes – buenas noches.
…..

Estaba seguro de quienes eran los culpables del atentado… no tenía pruebas pero cuando las tuviera procedería de la forma que le pareciera mejor, protegería a Orihime de los intentos de venganza en contra suya. Vio el reloj , ya era hora de que sus invitados llegarán, todo por idea de Orihime por supuesto, cinco minutos después una de las chicas abrió la puerta y ahí estaba su asistente y la mejor amiga de su esposa. Ambos acababan de comprometerse y estaban con los planes de boda, de solo pensar sintió un temblor desde la espalda, esos días de preparación fueron de los más agitados en su vida.

Se levantó de su asiento y vio a su esposa bajando las escaleras, se veía muy bien con su ropa de maternidad, antes no hubiera pensado que una mujer embarazada fuera hermosa, pero su esposa por supuesto era la excepción.

-¡Jefe! – dijo Ichigo sonriendo - ¿Cómo estás? Hace tanto que no te veía…

-No seas payaso Ichigo – le reprendió su novia – que gusto verte Ulquiorra.

-Siéntense – dijo Orihime sonriendo - ¿Cómo les va?

-Bien, ya sabes un poco ajetreados con eso de los preparativos de la boda, te pediría ayuda pero con eso del atentado… prefiero que descanses

-No te preocupes Rukia, todo va a estar bien – dijo Orihime sonriendo – Ulquiorra me ayudó mucho.

-Si ya lo veo – dijo Ichigo – ese brazo vendado… es muy raro verte así.

Siguieron hablando hasta que Orihime tuvo que retirarse a su habitación para descansar, todo por petición de su marido, Rukia se quedó con ella.