CAPÍTULO 6

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SATORU POV

Desde una distancia prudente, y cobijado por la oscuridad de la noche observo como Yuji sale de su casa a la puerta principal, buscando con desesperación a alguien, a mí.

No era mi intención causar el pánico en ese lindo rostro, pero es mejor que sepa que sigo sus pasos sin problemas. Es un gran acierto a mi parecer.

De igual forma, sé que está mal, pero hace unos días, aprovechando un par de contactos, pedí que instalaran cámaras y micrófonos en la casa de mi lindo zorrito. No es que desconfíe de él, simplemente me gusta cuidar de mis intereses. Así que de vez en cuando me tomo la libertad de observar o escuchar sobre su rutina. Y al parecer hoy, fui el tema de conversación por mis negocios, por eso mi visita de esta noche. No solo es una advertencia, sino un freno para que no se meta en asuntos que no le corresponden.

La curiosidad no es sana, y en muchos casos puede ser más peligrosa de lo que parece. Eso aplica tanto para él, como para mí.

Algunas de mis necesidades están al límite, y aun así ni siquiera siento el deseo de tocar a Suguru, tampoco a ningún otro miembro con el mantengo un contrato desde la noche en que lo conocí. Pensé que tatuarme una parte de él sería suficiente para saciar mi capricho, pero heme aquí a mitad de la noche fuera de su casa.

- Señor. - Mi pacífica vista se ve interrumpida por uno de los hombres que está encargado de vigilar a Yuji las 24 horas del día, parece haber algunas novedades. No hay una respuesta verbal de mi parte, pero sabe que no debe hacerme esperar demasiado. - Lamento no haber informado esto, sin embargo, creímos que se trataba de un evento aislado. - hizo una reverencia.

- Continúa. - ordeno mientras fijo mi mirada en él.

- Hay un individuo del cual aún no tenemos información certera o una descripción que podamos utilizar para investigarlo. Este sujeto ha comenzado a rondar los lugares que el joven Itadori frecuenta. - saca de su bolsillo unas fotografías que dejan ver una silueta masculina, pero es imposible distinguir su rostro ya que lleva una capucha que le cubre. Además de un registro de cuando, donde y a que hora se le ha visto cerca de los lugares donde Yuji ha estado. - Ya tenemos personal investigando y pidiendo cámaras en los comercios cercanos de donde creemos podemos tener mejores imágenes, de igual forma hemos doblado la seguridad para evitar cualquier contratiempo. Si hay algo más que desee que hagamos, estamos a sus órdenes. - se disculpa nuevamente con una reverencia y se para firme.

- ¿Se ha acercado a Yuji? - es mi única pregunta luego de revisar la información en mis manos.

- No señor. Quien quiera que sea pretende pasar desapercibido. Únicamente está recolectando información de los comercios cercanos y de empleados de estos que han tenido alguna interacción con el joven Itadori. - chasqueó mi lengua en respuesta. Es normal que en los negocios ilegales tenga imbéciles queriendo arruinar las cosas, pero hasta ahora nadie ha sido tan descarado en meterse en mis asuntos personales de manera tan frontal.

Tendré que hacer algunas visitas y llamadas al llegar a la oficina. Este tipo de comportamiento es intolerable en todos los niveles y pretendo acabar con esto cuanto antes.

- No importa lo que suceda, no lo quiten los ojos de encima a Yuji. Si tienes que poner a un hombre en cada establecimiento de la cuadra de su trabajo, en cada salón de su universidad o en cada casa de este vecindario, hazlo. - ordeno molesto y me doy la vuelta para ir a mi auto. - Cualquier novedad, infórmame de inmediato. - terminó la conversación y me pierdo en la oscuridad.

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AST - INOCENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora