La Trinidad

13

Pete esperó paciente en la cama del hospital a que Vegas despertara, lentamente los párpados del alfa se abrieron y sus pupilas se enfocaron. Su pecho se movía de forma errática.

-¿Dónde estoy? - Preguntó con voz rasposa.

-En el hospital, te dispararon en el pecho - Vegas intentó sentarse y Pete se levantó para empujarlo suavemente con una mano sobre su pecho - No te levantes, tienes que mantener la calma para que la herida no se abra.

-¿Qué hora es? ¿Cuánto tiempo llevo dormido? - El omega suspiró ante la insistencia.

-Solo un par de horas - Revisó su teléfono y volvió a verlo - Es media noche.

-Debo volver a casa.

-No puedes ir a ningún lado Vegas, Porsche puede sobrevivir sin ti una noche.

-No menciones el nombre de mi omega, tu sucia boca no tiene ese derecho.

-¿Mi sucia boca? - Pete rio con fuerza - Si tienes razón, lo siento.

Vegas bufó y volvió a intentar levantarse, el omega lo tomó por los hombros y lo empujó contra la cama.

-Estas herido, ¿en serio quieres preocupar asi a tu amado? ¿Cómo le explicarías esto? - Señaló la herida en su pecho, esto detuvo a el alfa que solo se quedó quieto mirándolo a los ojos.

-¿Por qué estás aquí?

-¿Que querías? ¿Que me fuera y dejara que te mataran estos doctores o cualquiera mientras dormías? - Vegas se sentó en la cama con dificultad, rechazando la ayuda que Pete le ofrecía - De acuerdo, de acuerdo no te toco. Entendido.

-¿Khun sabe lo que paso? - El omega negó con la cabeza.

-Solo yo

-¿Por qué? - La desconfianza en la voz del alfa, no pensó que le importaría tanto como lo hizo - ¿Por que sigues aquí?

-Dime Vegas, ¿acaso me equivoque contigo?

Pete:

El rostro de Vegas se contorneo, lleno de confusión ante mi pregunta.

-¿Eres acaso el único alfa en la triada que no es una mierda? ¿El único que en verdad ama a su omega y quiere protegerlo?

-¿A qué quieres jugar ahora? Deja los rodeos - Sonreí ante los recuerdos del alfa que había tratado con todo su ser hacerme ver lo que ahora podía, Vegas me amo.

-Es mi culpa que ahora no me creas - Acepte, sus ojos atravesaron mi alma intentando descubrir la verdad o encontrar la mentira - Quiero acabar con la triada.

-Pero quieres a Khun a salvo.

-Si, pero no por la razón que tú crees.

-Entonces por qué quieres proteger a tu señor ¿si no porque lo amas?

-Quizás el amor sea odio... Quiero matar a Khun con mis propias manos, nadie puede quitarme eso...no importa lo que les hizo, no me pueden quitar mi derecho.

Vegas no dijo nada, no esperé que dijera nada. Sus ojos llenos de desconfianza, su cuerpo tenso a pesar del dolor que sentía por la herida de bala en su pecho.

-No cualquiera puede ser guardaespaldas en la triada, mucho menos el jefe de guardaespaldas de Khun Theerapanyakul.

-¿Qué fue lo que tu señor te hizo, Pete? - Mi omega chillo en mi interior a pesar de mi resistencia, su voz fue suave cuando dijo mi nombre, sin juzgarme, pero con resentimiento - ¿Que te hizo la triada?