Bajo El Brillo De Un Balón De Oro

Capítulo 2

Una vez más me encontraba en las gradas de un campo de fútbol, pero está vez, en casa. Estaba en el Johan Cruyff para ver el partido del Barça contra el Athletic Club y también para recibir la copa que nos proclama campeonas de liga. Como siempre un partido ganado, 7-0 victoria aplastante de parte del Barça.

Una vez acabado tocaba celebrar, así que como por allí ya me conocían me baje de las gradas y me reuní con las chicas para celebrar. Me lo estaba pasando en grande, de repente note como alguien me cogió por la espalda y me elevo un poco del suelo dándome un abrazo.

-¡Ay mi chicaaa, hace mucho que no la veía! -Reconocí esa voz al instante.

-¡Mapiii! -Exclamé yo dándome la vuelta y dándole un abrazo.

-¿Que tal estás renacuaja?- Dijo Mapi separándose del abrazo.

-Muy bien la verdad. ¿Y tú qué tal estás?

-Yo muy bien la verdad, no me puedo quejar y en cuanto a la pierna ya camino con normalidad, incluso ya empecé a entrenar poco a poco y espero que dentro de poco pueda unirme a las chicas.

-Me alegro un montón Mapi. -Dije con una sonrisa de oreja a oreja.

-Bueno...ahora que lo pienso no estoy tan bien. Me falta algo...- Dijo mientras daba vueltas a su alrededor moviendo la mano como si estuviera ondeando una bandera.

De repente una del staff entró al campo grabando con su móvil y con la bandera de Mapi en su otra mano, se acercó a nosotras y le tendió la bandera a Mapi, esta la cogió con una sonrisa genuina, como si le hubieran dado un caramelo a un niño.

¡La tengo! -Exclamó Mapi alzándola en señal de victoria, provocando mi risa y las chicas de alrededor.

-Claro tú querida amiga la bandera. -Le dije riendo.

-Hombre claro...sin la bandera no empieza la fiesta. -Dicho esto empezó a correr por el campo ondeando su bandera.

Poco tiempo después las chicas fueron pasando para recibir sus medallas de campeonas y la ansiada copa. Cuando todas recibieron sus medallas se quedaron esperando a la capitana, mi hermana fue la última en recibir su medalla y posteriormente cogió la copa y fue hacia las chicas alzándola finalmente al cielo, proclamandolas oficialmente campeonas de liga.

Se hicieron la foto y después Alexia invitó a Mapi a alzarla también, esta no se lo pensó dos veces y lo hizo con esa alegría que tanto la caracteriza. Yo estaba viendo todo desde un lado del campo, cuando de repente Alexia me ve y me dice que vaya haciendo gestos con la mano, fuí y cuando estuve a su lado me ofreció la copa para alzarla. Yo me negué avergonzada porque sentía que yo no había hecho nada como para merecerme alzar la copa, pero ella insistió y finalmente la cogí con resignación y la alcé con una sonrisa hacia la afición. Esta cuando la elevé, se volvió loca, eran aplausos y vítores. Me sentí bien pero en parte siento que solo lo hacían por ser la hermana de quién era.

Después se apagaron las luces, se encendieron los focos de colores blaugrana y se hizo la presentación de cada una de las jugadoras, se cantó la canción de We Are The Champions y hubo un espectáculo de fuegos artificiales. A partir de ese momento se montó la fiesta padre, se puso la música, empezamos a celebrar, cantamos con la afición, hicimos la conga e hicimos tonterías varias.

Estaba con mi hermana hablando y de repente note un peso en mi espalda y instintivamente cogí a esa persona a caballito.

¡Ainichuu! -Dijo esa voz que reconocería a mil leguas, bajándose de mi espalda.

¡Janitaaa! -Exclamé yo dándome la vuelta y dándole un fuerte abrazo a Jana.

Jana y yo somos mejores amigas desde hace mucho tiempo, nos conocemos desde pequeñas y siempre hemos sido como uña y carne. Jugabamos en el barça cuando éramos muy pequeñas pero después yo me fuí y aunque ya no estuviéramos en el mismo equipo eso no fue impedimento para seguir viéndonos. Muchas veces he ido a su casa y me he quedado a dormir al igual que ella a la mía, como ya he dicho es una de mis mejores amigas y no la cambiaría por nada.