Probadita de amor

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Mis días fueron monótonos hasta el gran día, el día donde me iría con el.
Y si, sé perfectamente que el viaje no iba sobre nosotros pero al menos estaría allí para apoyarle.

Ese día en el aeropuerto Jared parecía más ansioso de lo normal y hizo todo lo posible para que los paparazzi no se acercaran tanto a mi. Me sentía muy protegida a su lado. Aunque su estrés no se detuvo hasta que entramos en el avión.
Me encontré con la mirada de Dan la cual en ves de parecer alegre parecía ser: "¿que carajos haces tú aqui?" Y lo entendí todo en el momento de que una melena pelirroja apareció en mi campo de visión. Sentada al lado de una mujer morena delante de un portátil.

- llegas tarde. - reprimió la mujer morena.

- Lo siento Marta.- se excusó Jared que parecía incómodo ante la presencia de la pelirroja.- Ella es Vivian- me señaló con la mano- mi novia.

Marta levantó sus ojos marrones en mi dirección y hizo una mueca, que a mi parecer fue de aprobación.

- Dile a los estilistas que se ocupen de ella...su estética tiene que ir bien junta.- me miro nuevamente- y la suya no va para nada con la del grupo.

Amber, la cual parecía disfrutar de aquello más que cualquiera, sonrió.

- Yo podría acompañarla, conozco estos protocolos como la Palma de mi mano.

Marta miro a Amber con admiración y asintió.

Jared se giró al verme, yo no fui capaz de verle a él. Me fui directamente a sentarme con el único conocido que tenía allí: Dan.
El cual estaba revisando algunas letras.

-¿As no te dijo que ella venía?-pregunto sin despegar la vista de las hojas.

- Lo mencionaron...- suspire, arrepentida de no haber entendido lo dicho por mis amigas semanas anteriores- Yo pensaba que haría una rabieta con la prensa, no que iba a venir.

Dan hizo una mueca, debía haberle preguntado a él esto.

-¿el no te lo dijo?

- Yo tampoco le pregunte.

Dan cerro el libro de letras al momento que Jared apareció, el no parecía tan sorprendido.
Se sentó enfrente mío y clavó su mirada en mi, más no dijo nada.
Dan algo incómodo miro por la ventana.

- Espero que Washington esté más cálido que de costumbre.

Se encogió en su asiento y se cubrió los ojos con un antifaz. Yo mire a Jared, sabiendo que no tenía argumento alguno para reclamarle por la presencia de ella ahí.
Amber mantenía la mirada fija en mi en algunas ocasiones sobretodo para ver el tacto frío que en ese momento estaba teniendo con Jared. Aquello no serviría de mucho si lo que quería era marcar territorio.

Una vez llegamos a Washington fuimos al autobús de la banda, iba perfecto con ellos. Negro, grande y solo con el sello de su banda, agradecí que no fueran los que ponían sus caras.

En la salida del aeropuerto me sorprendió ver a tantas personas, chicas sobretodo, que gritaban el nombre del chico que caminaba a mi lado, que giraban a morir el nombre de Dan...y no hice mucho caso al resto del grupo. Marta en lo que yo pensaba que era un intento para salvarme, era una un intento para dejarle más ventaja a Amber.
Marta me tomo del brazo y me aparto del lado de Jared dejando así la oportunidad a Amber de estar cerca suyo, los paparazzi debieron tomar una gran cantidad de fotos de ella mirándole...tan embobada.

La prensa la amaba...y yo lo hubiera hecho, si no supiera como es en realidad.

Una vez en el bus no podía más, ni había ni empezado y ya deseaba irme.

La primera canción de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora