Dulces sueños - (Tanjiro Demonio)

Capítulo X

Sucesos del arco: El distrito rojo

Versión: Nezuko

Un año antes

—¿Qué haremos con la demonio?

—Debemos matarla—Exclamó con odio el pilar del viento, acercándose a la caja donde se encontraba la acusada.

—No creo que al patrón le guste eso—Recordó la chica de mechas moradas—. Después de todo, el patrón dio su autorización para que ella sea parte de la organización...

—Por su culpa Rengoku está muerto— Interrumpió el chico de vendas—. No merece misericordia, Shinazugawa tiene razón. Hay que asesinarla.

—¡No puedes culparla por eso!—Alzó la voz la pilar del amor.

Todos se sorprendieron por la repentina reacción de la chica ojiverde, pues eso no era común en ella a no ser algo importante.

—Los cuervos ya dijieron que Rengoku murió cumpliendo su deber, además ella también protegió a los pasajeros.

—Es cierto, aunque sea un demonio hace mucho más que la mayoría de cazadores de bajo rango. Sería un desperdicio matarla— Argumentó Tokito.

—Mmm ¿Una demonio siendo una cazadora de demonios? ¡Que extravagante!— Apoyo Uzui.

—¡¡¡ES UN PELIGRO!!! ¡No podemos aliarnos con nuestros enemigos! Lo he dicho desde el inicio, ¡hay que matar a la dem...

—Suficiente— Impuso el pilar de la roca con una voz ronca y con un notable enfado—. El patrón sabrá tomar la mejor decisión— Hizo una pausa—. Shinazugawa, si quieres proponer una condena a muerte para la demonio, debes tener mejores argumentos. No por ser demonio quiere decir que sea igual a ellos.

El lugar quedó en completo silencio. Siempre que hablaba el pilar más fuerte generaba un ambiente frío, sin embargo, era por el respeto que le tenían a su palabra. Casi igual a la del patrón.

—El patrón llegó—. Avisó una de las hijas de este.

El líder de la organización se tomó su tiempo en acomodarse y dar un anuncio de bienvenida, luego se dirigió al tema principal de la reunión.

—Al parecer, el joven Tanjiro no podrá cumplir su promesa por lo que no asegura nada sobre el destino de Nezuko si llega a lastimar a un humano. Sin embargo, Nezuko a llegado a demostrar preocupación por los humanos al punto de llegar a protegerlos.

—Si me permite patrón—Interrumpió Shinazugawa—. Ya no tenemos la seguridad de que Tanjiro cuide a su hermana, es un peligro dejarla suelta.

—Lo sé, por eso he llegado a una conclusión. Nezuko dejara de ayudar en las misiones.— Miró hacia la dirección donde anteriormente Shinobu había hablado—. Se quedará en la finca mariposa para ayudar a los heridos. Solo si la señorita Kocho le concede el permiso.

—Lo que usted diga patrón, no tengo ningún problema con recibirla— Sonrió Shinobu.

—¡Pero...

—Entiendo tu desacuerdo Sanemi, pero no hay razones para no aceptarla. Además, cuidar a su hermana es lo último que podemos hacer en memoria de Tanjiro.

Fue en ese instante cuando todos cayeron en cuenta de la magnitud de la situación, a excepción de Himejima. 

—¿Patrón, estamos seguros que el chico si murió?— Preguntó el pilar de la niebla.