Mi Mayor Perdición

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Solo tenía que saltar, cosa fácil. Me apoye con las manos en la ventana y me impulsé. note como mi cuerpo comenzaba a volar por el aire, sintiéndome libre. Eran mis últimos momentos, que se los dedique a Colette, Melody y Fang. pronto comencé a descender con una velocidad vertiginosa. Cerré los ojos y esboce una sonrisa. La última que iba a poner

***

NARRADOR: FANG

Amber: -¿Te puedes quedar a comer conmigo hoy?- íbamos agarrados de la mano.

Fang: -Necesito descansar un poco de ti, sin ofender, tengo que socializar- dije chistoso

Amber: -Ahora que lo dices, yo también. León iba a hacer una fiesta, me toca ir.-suspiro sin ganas.

Fang: -¿No te gustan las fiestas?

Amber: -Si pero no. Dentro de poco está la de fin de año y a esa si que tengo que ir. Soy de esas que se cansan rápido.

Amber seguía hablando y caminando hacia adelante, en dirección a su casa pero yo me había detenido. Estaba horrorizado, no podía moverme. Amber se dio la vuelta preocupada y me pregunto porque me había detenido. No pude contestarla, no tenía palabras. Allí, recubierto en un charco de oscura sangre se encontraba Edgar tumbado sin conocimiento. Junto a el, se encontraban la enfermera pam y su ayudante en prácticas Byron. 

Colette por otro lado, les daba todo tipo de explicaciones a los doctores. Parecía igual de confusa que yo a la par que horrorizada.

Colette: -No se que ha pasado, yo subía a su habitación porque me había dejado con la palabra en la boca- explicaba Colette entre sollozos- Cuando entre yo, no estaba en su habitación. Me asome a la ventana por si había huido, pero lo único que vi fue a Edgar en esta posición. Nada mas lo vi les llamé.

Byron: -Aja esta bien. -Anotaba todo en su pequeño cuaderno-¿Tienes usted alguna idea de por que se quiso quitar la vida?

Colette: -Tengo una pequeña idea, pero no lo puedo confirmar.

Pam: -Vale no se preocupe su corazón late. Déjeme poner esta torreta y pronto estara como nuevo. Byron, por favor, los medicamentos.

Byron: -Si, ahora mismo.

No podía parpadear. sin saberlo se me habia caido una lagrima que escurría por la cara. Amber me la seco con un pañuelo. Me dio un beso en la boca, que yo no pude disfrutar por la tensión del momento. Decidí acercarme para preguntar a Colette por sus sospechas, pero Amber se me adelantó.

Amber: -¿Está bien? ¿Que le ha pasado?

Colette: -Ha intentado suicidarse. - Seguía llorando. Amber la dio un abrazo.

Amber: -Está bien, ya veras. Cuando se recupere, hablara contigo.

Colette: -Aun asi no me lo creo. Fue su culpa, lo se.

Amber: -¿Culpa de quien?- curiosa por descubrir al culpable de tal desastre.

Colette se giró con cara amenazante, extendió un brazo y me señaló. su mirada se clavó en la mía, que me pilló de improvisto. ¿Por que mi culpa? Yo no le haría nada a Edgar y ella lo sabe. Sabe que lo amo con locura

Colette: -Suya. -se acercó a pasos agigantados.

Fang: -Yo no tengo la culpa- le encaré- He estado todo el rato con Amber. Si no que te lo diga ella.

Colette: -Eres tan corto de mente como mi hermano. 

Amber: -Vamonos, parece que aquí no eres bien recibido- me cogió del brazo mientras miraba mal a Colette.

Fang: -Avisame cuando este bien, por favor.

Colette: -Está bien. Necesitáis hablar muchas cosas.

Amber y yo seguimos nuestro camino. Me tocaba ayudarla con su traje de la fiesta, y luego ella me ayudaría a mi. Poco a poco, iba sintiendo más sentimientos hacia ella y perdiendo los de Edgar. 

Pico al ascensor para ir a su casa. Alguien subió con nosotros, era su vecino Sandy. Sandy era un tanto extraño para ser popular. Siempre iba con un traje árabe, como si viniera  de un lejano desierto. su traje, color morado y amarillo hace conjunto con su morena piel. ME extrañaba verlo porque normalmente está en su casa durmiendo, su mayor Hobbie. Estaba ante Sandy, un brawler legendario.

Amber: -Tienes pinta de cansado Sand. ¿Otra vez estuviste jugueteando con León de noche?- Sandy le tapó la boca y Amber se dio cuenta de que yo estaba allí- Eso te pasa por jugar al uno hasta tarde.

Sandy: -Relax. Ayer no estuve jugando al uno con León. Estuve viendo Netflix. ¿Que haces tu con Fang?- su voz tranquila no sonaba despectiva.

Amber: -¿No te enteraste?- preguntó sorprendida- Lo sabe todo el mundo, nos liamos el viernes. Somos pareja.

Sandy: -Se ven muy lindos juntos.-sonrió levemente- no te pases con ella, Fang, que es muy delicada.

Fang: -Creo que te equivocas de persona.- estreche su mano con la mía

Sandy: -Entonces vigilate tu las espaldas. Hasta luego parejita.- salió de el ascensor sin prisa. 

Amber y yo volvimos a quedarnos solos. Amber tenía una mirada deseosa. Me acerque a ella y la cogí por la cintura, poniendo su acaramelada boca a la altura de la mía. La acerque aún más, hasta escuchar su entrecortada respiración, que estaba así seguro que por tenerme tan cerca. Nos besamos en el ascensor varias veces, hasta que la deje sin respiración. la deje descansar. Ella quería seguir pero no la deje

Fang: -Estamos en un ascensor...-comenzaba a bajarla para apoyarla de nuevo en el suelo.

Amber: -Tienes razón, mejor en mi casa, que nadie nos ve.

Fang: -Te recuerdo que vamos a confeccionar tu traje de fiesta, no a satisfacernos.

Amber: -Podemos hacer las dos cosas- su mano estaba por debajo de la camiseta, palpando mis abdominales.

Fang: -Para por favor, no es el momento.

Amber: -Hazme el favor, Fang. Ya somos mayores, podemos cuando queramos.

Fang: -Primero a lo que vamos- me estaba aguantando las ganas de cogerla y empotrarla.

Amber: -¿Y después podemos?- se mordía el labio con deseo.

Fang: -Si sigues así, te voy a dejar sin caminar una semana. Así que para quieta. -mi mirada era seria y fría.

Amber: -¿Entonces me conviene seguir no?- se reía por lo bajo, mientras cerraba ya la puerta de  su casa.

No le dio tiempo ni a posar las llaves, yo ya la tenía atrapada entre mis brazos. No había podido aguantarme las ganas, y es que en verdad, Amber era una maestra de la seducción. Pase de los besos en la boca y le mordí el cuello, mostrando mi deseo por ella. Amber, con la cabeza hacia atrás, disfrutaba de cada chupetón, beso o mordisco que yo le daba. 

Fang: -Todo a su tiempo, ahora a lo que vamos. Después me encargare de que disfrutes de mi. Ahora llévame a ver tu traje, el que te voy a quitar en la fiesta cuando esté borracho, el que te romperé con ganas de tomarte entera y saborear hasta el último rincón de tu cuerpo. ¿si?

Ella se había quedado atónita con mis sucias palabras, imaginándose todo lo que pasaría. esta vez, le di un beso más dulce, y la agarre de la mano.

Amber: -Está bien, me aguantaré. Vamos sigueme, por aqui.