LU RENNÉ HAMILTON.

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Capítulo 12

Paty me esperaba en el salón junto con Neal.

Albert y Layla, los saludaron animosamente. En la mirada de Albert podía ver la intriga que le causaba el verlos juntos, todos habíamos amado tanto a Stear, que nos parecía que ningún hombre, y menos Neal, era merecedor de ocupar su lugar en la vida de Paty. Sin embargo, todos reconocíamos que Neal Legan se había hecho de un nombre por su propia cuenta y que había sobresalido por su inteligencia y dedicación. Y Paty era una mujer amable y de buenos principios, a todos nos constaba lo mucho que había llorado la muerte de Stear, el trabajo que le costo salir adelante sin él.

Siéntense por favor- dijo Albert señalando el sillón que estaba frente a ellos.

Gracias- Neal espero a que Paty, Layla y yo nos sentáramos para sentarse él, no cabía duda de que Paty no había exagerado, tenía excelentes modales.

Comenzó Paty, aclarando su garganta.

Bueno se preguntarán el motivo de nuestra visita- estaba muy nerviosa – yo misma no se si hacemos lo correcto – volteo a ver a Neal, quien se veía un tanto inquieto- pero ayer Neal me confeso algo que creo que ustedes deben de saber. Neal por favor diles tú.

Neal suspiro fuertemente y se levantó del sillón rodeándolo y mirando hacia la gran ventana que había detrás de él, era evidente que buscaba la forma de darnos la información que Paty le pedía compartir con nosotros.

Creo que lo primero que debo decir, es que no estuve nunca involucrado de manera activa en lo que voy a contarles, sin embargo, cargo con la culpa por que lo supe desde un principio y no hice nada para evitarlo- volteo a vernos, pasaba su mirada de Albert, a Layla y se mantenía en mi- es difícil comenzar a atar todos los sucesos para que puedan entender, pero hare lo mejor que pueda.

Hiso una larga pausa- Creo que comenzare por la noche de premier de Terry, recuerdan su primer protagónico, Candy, tú eras su invitada de honor, me parece, pero si recuerdas Eliza también estuvo allí, no es un secreto que ella siempre ha estado obsesionada con él, pero contigo también- me señalo- ella miraba la obra de teatro acomodada en su lugar, pero también te miraba a ti, te vio cuando escuchaste aquellas mujeres hablando de Susana, te siguió al Hospital, vio cuando Terry te alcanzo en aquella escalera y como él lloraba al decirte adiós.- se detuvo- pero eso no fue casualidad, ella siempre estuvo detrás de todo eso, esa mañana antes de la obra visito a Susana, le hablo de tu llegada y de cómo seguramente estarías en ese momento con Terry, le dijo que la única manera de quitarte del camino era fingiendo un suicidio, llamo por teléfono del teatro al hospital cuando te vio salir en esa dirección. – bajo la mirara – todo fue planeado.

Todos lo mirábamos atónitos, no podía creer la maldad que existía dentro de Eliza, nunca había entendido por que ella me odiaba tanto, al grado de destruir mi vida, sin importarle que ella misma se quedara sin el amor de Terry.

Y eso no es todo. - podía notar como Neal estaba avergonzado.

¿Hay más? Debes estar jugando- nunca había visto a Albert tan alterado.

Si, lamentablemente sí- empezó a caminar de un lado a otro en la habitación- Eliza siempre estuvo en contacto con Susana, la envenenaba, metafóricamente hablando, le decía lo triste que debía ser su vida casada con el hombre más guapo siendo ella una lisiada, hablaba del asco y repulsión que seguramente Terry sentía cada vez que tenía que cumplirle como esposo- negaba con la cabeza.

Deben saber que Eliza siempre ha sido cruel, yo mismo lo era y disfrutaba de serlo, tanto como ella, pero el ver como acabo con esa pobre mujer, después de que la vida ya la había maltratado me hiso tocar fondo.

Se sentó junto a Paty mientras decía esas palabras, mirándole, como suplicando su perdón, más que el mío.

Eliza pertenece a un club de elite, donde se encuentran no solo las "mejores mujeres" de Chicago, si no de toda América, y ahí conoció a Lu Renné Hamilton, quien por azares del destino era prima lejana de Susana. Enseguida se volvieron uña y carne, Lu visitaba frecuentemente a Eliza en nuestro hogar, pronto sumaron uno más uno y se dieron cuenta que habían dos personas que tenían en común Terry y Susana, Eliza sabía que era imposible que ella tuviera algo con Terry, esa posibilidad había muerto, él jamás confiaría en ella, no importaba lo que hiciera, pero con Lu había una esperanza, ella le dijo cada pequeño detalle que debía saber de él, de ti, le dijo como debía comportarse- ponía su cabeza entre sus manos, y negaba- es mi hermana y lo siento, la amo, pero ya ha hecho demasiado daño, oculta tras las sombras. Lu lo sabía todo de él, fue la chica que él necesito, pero eso no fue casualidad. El día de la boda, ellas no se esperaron que tú te comportaras así, Eliza juraba que te harías a un lado, no te creía capaz de ponerte a ti antes que el deber, el honor y la felicidad de otra persona.

Yo te miraba divertido y fascinado cuando caminabas hacia ellos, noté enseguida que lucharías, y eso me dio gusto, le dije a Eliza que tenía que detenerse, que habían perdido, que lograrías recuperarlo, pero ellas no se detendrán. Lo supe el día que Lu vino a decirte todas aquellas cosas, después de salir de aquí fue directamente a casa a contarle todo a Eliza, las vi abrir una botella de vino y brindar de manera anticipada.

Se por Eliza que Terry ha tratado por todos los medios de dejar a Lu, pero ella lo manipula demasiado bien, tuvo años para hacerlo, ella misma lo llevo a caer en el alcoholismo, para después volverse su salvadora, claro con la ayuda de Eliza y la forma que solo ella tiene para manipular.

Necesito que me perdonen por haber callado, tanto tiempo, la verdad es que nunca tuve un motivo sincero para traicionar a mi hermana, aunque no estuviera de acuerdo con ella, pero ahora- miro a Paty- necesito hacerme merecedor de esta mujer, necesito ser un mejor hombre y creo que esta es la única forma de iniciar.

No lo puedo creer- Layla estaba asombrada- ¿qué sucede con esta chica? - miraba a Albert horrorizada.

Neal, te agradezco que hayas tenido el valor de decirnos esto, pero debes saber que habrá consecuencias graves, por años llevo advirtiéndole a Eliza que se mantenga lejos de Candy, y no lo ha hecho, nos ha manipulado a todos con su mentira, ha estado a punto de arruinar dos vidas más, lo que hiso con Susana no tiene perdón.

Yo estaba en shock, trataba de procesar toda la información que Neal nos dio, pensar que ella siempre estuvo detrás de mis desgracias y sin embargo...

Albert, por favor, déjala ella ya es suficiente mente infeliz, viviendo con ella misma- dije.

Candy por favor, no me lo pidas, ella tendrá que pagar, yo me encargare de eso, y no hay discusión.

Neal agachaba la cabeza, preocupado por su hermana.

Neal, lo siento muchísimo, pero no podías callarlo por más tiempo, no sería justo, que tú y yo comenzáramos a ser felices, sabiendo que podías hacer algo por ellos. - tomo sus manos entre las de ella y las beso.

Neal besaba su cabeza al tiempo.

Gracias Paty por todo- la abrace- esto debe saberlo Terry, pero no se ha comunicado.

Candy, no desconfíes de él, esta librando una batalla interna, él no sabe nada de lo que realmente es Lu, no quiere herirla, piensa que no se lo merece- Neal trataba de ayudar- pero eso debe cambiar, iré a hablar con él, ojala puedas ir conmigo solo así me creerá Albert. 

Si yo hubieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora