Donde terminan las estrellas

Capítulo 4

⚠️ Se tocará un tema muy sensible para algunas personas ⚠️ ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯

La alarma fue lo primero que escucho cuando sus ojos decidieron abrirse, su hermano se había levantado más temprano que ella ya que le adelantaron su clase o eso escucho que le dijo cuando la "despertó" Hace rato, su cuarto seguía en desorden no tuvo tiempo ayer para organizarlo.

Se levantó una hora antes de su primera clase para que le diera tiempo de hacer todo lo que tenía planeado, primero empezó recogiendo las prendas que se encontraban en el suelo, dejándola en el cesto de la ropa sucia. Luego tomo los tirantes de ropas sobrantes para meterlos en una bolsa, término de arreglar su cuarto a las 7:27 dándole tiempo para hacer el resto de cosas.

Entró al baño, haciendo todas sus necesidades, rutina de skin care y cepillando sus dientes, salio con una toalla cubriendo su cuerpo actuando como vestido y otra en la cabeza sosteniendo su cabello, era la primera clase después de vacaciones, quería darla toda en esta primera sesión por lo cual opto por un atuendo sencillo y cómodo.

Le gustaban las faldas y por lo general las usaba seguido, una blusa blanca tipo corset con botones que adornaba su cintura con una falda beige, junto con unas botas tacón que llegaban hasta abajo de sus rodillas, acomodo su cabello dejando ver las hermosas ondas que se formaban en este.

Tomo su mochila, guardando las cosas que va a necesitar para la clase junto con su celular y salió de su habitación dirigiéndose a la cocina, encontrando un plato tapado con una nota encima.

"Te deje el desayuno listo, es tu plato favorito " Reconoció la letra al instante, era su hermano, una sonrisa se formó en su rostro para destapar la comida, eran 4 panqueque de avena bañado en miel con 3 fresas adornando la montaña. Con un tenedor empezó a comer hasta acabar con todo y dejar el plato en el fregadero, después lo lavaba, busco su celular en su mochila para entrar a la aplicación de taxis y pedir uno.

Quince minutos después el sonido de una bobina y su celular vibrando dió aviso a que el carro llegó, salió de su casa adentrándose en el auto y este avanzó al momento de subirse, su casa no quedaba lejos de su Universidad en 20 minutos ya estaba ahí, le pagó por transferencia al conductor y salio del carro viendo una hermosa estructura moderna pero sin dejar de lado la ambientación ecológica.

Dirigiéndose a su facultad, escuchando los murmullos de estudiantes, los quejidos de algunos y diversos atuendos Estrabagantes que algunos no combinan y en su mente empezó a formar el mismo vestido pero con los colores, los diseños y la textura correcta, le encanto lo que su imaginación pudo lograr.

Entró a su clase yendo al último puesto cerca de la ventana y sacar un libro de dibujos, una cartuchera y un cuaderno con una estrella en el centro, en 10 minutos apareció el profesor junto con otros alumnos que llegaban tarde o bueno más que el profe, y así inicio su clase.

Dos horas después la clase término y guardo sus cosas, el profesor le había dado la tarea de crear un diseño nuevo para la siguiente clase usando los colores negro y rosado, miles de ideas recorrieron su mente pero no sabía cual de todas usar, tenían un descanso de una hora, fue a la cafetería para comprar un café frío y un rol de canela, saco el dinero de su mochila y pago lo ordenado.

Mientras caminaba dirigiéndose al patio del campus, lo vió, su pelo blanco que brillaba por el sol, sus ojos azules iluminando el lugar, era el, aquel chico que la ignoró en el local, a pesar de seguir resentida con el por ese gesto grosero no podía evitar dejar de verlo, su belleza era hipnotizante. Sus miradas se encontraron como si hace tiempo se buscaban, sus ojos transmitían todo lo que sus palabras y acciónes no podían mostrar.

Ella fue la primera en apartar la mirada para seguir con su camino llegando al patio, agradeciendo que estuviera solo, sentándose en una banca dejando su mochila a un lado, arrecosto su cabeza en la mesa, tratando de olvidar aquel momento donde sus miradas mostraban deseo, pero no era capaz de admitirlo, una voz interrumpió su travesía en el mar de pensamientos.

-.Lyrae Collins - no reconocía la voz, y supo que no era alguien en quien debía confiar cuando alzó la mirada y vio a un hombre con capucha frente a ella, tomó su mochila con recelo para alejarse un poco de aquella persona.

-. Disculpa, no puedo hablar en este instante, me tengo que ir -se apresuró en salir de ese espacio pero una mano la detuvo con fuerza generando presión en su muñeca.

- , o-oye me estas lastimando, sueltame por favor, si no lo haces comenzare a gritar.

Trato de mantener la postura a pesar de que sus piernas temblanban y su voz se cortaba, la persona hizo caso omiso a sus peticiones para tirar con fuerza, casi arrastrando a la chica a un lugar apartado del campo donde todo el campus tenía prohibido entrar, ella empezó a gritar con fuerza dándole golpes al secuestrador con su mano libre, sintiendo como en sus ojos se avecina una tormenta que luego recorrio sus mejillas

- . ¡Por favor dejame ir! ¡Te lo ruego!

En la mente de la chica estaban invadiendo pensamientos que aumentaban su resistencia pero también su miedo, «seré violada? », «Venderán mi cuerpo? », « Me matarán? » Su llanto aumentó con el paso de esos pensamientos, no quería ser tocada, no quería sentirse sucia

- . ¡Por favor alguien ayudeme! ¡Ayuda! - Su garganta estaba siendo desgarrada por cada gritó que soltaba y viendo como llegaban a ese lugar oscuro, empezó a aceptar su destino y disminuir los ataques. Sería violada, abusada, matada.

Todo temor que su madre tenía cuando empezó a desarrollarse se cumpliría, sería un juguete sexual para este hombre, empezó a odiar su cuerpo, no quería tener nada que le pareciera provocativo a ese hombre.

El encapuchado se acercó a ella y le intento poner una máscara a la que la rubia se resistió y empezó a gritar más fuerte, con lágrimas que brotaban con cada golpe que le daba al joven, hasta que logro ponerla y ella en minutos quedo dormida.