Donde terminan las estrellas

Capítulo 2

El chico que ella observo entrar estaba vestido con un chaleco de cuerno negro, una camisa blanca con corbata negra y un pantalón negro, apesar de la ropa oscura, el brillaba o mejor dicho sus rizos de oro eran los que si iluminaban toda la fiesta.

Ahí fue, cuando sus ojos se encontraron y pudo ver un mar de emociones en los contrarios, mientras que el le dedicó una sonrisa tierna, apartó rápidamente la mirada y salió corriendo hacia la cocina sintiendo como el calor subía a sus mejillas y orejas quedando con la cara completamente roja.

—Qué mierda acaba de pasar, porque me sonríe? Necesito irme ya de aquí — Intentando regular su respiración decidió dar la vuelta en busca de su amiga para irse, con mucha prisa, sin querer término chocando con alguien por despistad

—.Auch, ah, lo siento, no vi por donde iba —.Alzó la mirada con la mano en la cabeza donde recibió el golpe para notar que era aquel chico que hace un rato irrumpia su mente

—, si no te preocupes, ¿estas bien? Mucho gusto soy Helios —extendiendo su mano para que la chica se levantará. Helios, que nombre más extraño, le recordaba a un elemento químico, tomó la mano del chico para luego sacudir su vestido

—, sisi, estoy bien y tu? Creo que recibiste la peor parte del golpe, mucho gusto, soy Lyrae — la chica solto la mano de Helios para luego saludarlo haciendo un movimiento con su mano de izquierda a derecha en el aire.

—.Que lindo nombre y no fue tan grave el golpe, ¿te gustaría salir de aquí? —sintiendo como el calor volvía a recorrer sus mejillas solo pudo asentir, para luego sentir como el joven cogía su mano y la dirigía a un lugar, no sabía que estaba haciendo y porque su cuerpo seguía a aquel misterioso hombre. Llegaron al tejado de la casa donde no se alcanzaba a escuchar la música y las estrellas alumbran el lugar, la sonrisa que se formó en su rostro fue casi de inmediato, no había podido observar las estrellss desde que llegó

 —. Es mucho más calmado que allá abajo —rompió el silencio Helios quien yacía sentado en el suelo haciendo un gesto para que la contraria lo siguiera, quien hizo caso y se sentó.

—, es mejor estar aquí, el cielo se ve lindo esta noche y las estrellas brillan como nunca. —Respondió sin mirar a Helios, solo mirando el cielo con delicadeza.

—. Te gusta ver las estrellas? Soy gran fanático del cielo. —.Ella enseguida lo volteo a ver, pues siempre que hablaba de estos temas decían que eran muy aburridos pero el chico no, le pareció lindo

 —, tengo esa afición desde pequeña, me encanta sentarme y observar allá arriba, y tratar de encontrar constelaciones —.El chico señalo una parte del cielo donde se podía observar una constelación

— mira, allá esta la osa mayor, y al lado esta Venus —ella miro hacia el lugar y sonrió, sus ojos se iluminaron, ver las maravillas que ofrecía el cielo de noche era lo que más le fascinaba, sentir paz y tranquilidad cada vez que voltea hacia arriba. 

—, como puedes distinguir una estrella de un planeta? —preguntó con curiosidad

 —, cuando miras una estrella, estas parpadean pero cuando ves un punto fijo que también brilla pero no muestra un parpadeo y solo mantiene la iluminación constante, es un planeta, y sé que ese es Venus porque es un punto muy brillante y blanco, según Investigaciónes cuando observas en el cielo un planeta estos pueden tener colores, por ejemplo, Júpiter y Saturno son amarillos, y Marte es rojizo. Eso era lo que más le gustaba de la astronomía, que aunque ella sintiera que sabía bastante sobre esta, siempre estaba algo que desconocía y en ocasiones no podía entender. 

—.Conocía lo de los colores pero no como diferenciarlos de una estrella, es interesante, siento que hay un mundo allá arriba que no puedo ver. —.El chico la miro rápidamente para luego empezar a reír.

 —, ¿un mundo más allá de lo que puedas ver? Me parece curiosa tu teoría, quien sabe, puede que exista, aunque no creo que los alien quieran venir acá.

Ahora los dos estaban riendo, y así pasaron un largo rato, hablando y conversando sobre estrellas y gustos que podían tener, hasta que una llamada interrumpió la conversación.

—. Lyrae! Donde carajos estas? Te estoy buscando hace rato, no me digas que te fuiste ya para la casa y me abandonaste —aguantandose la risa para no recibir un berrinche de Hestia, cuando estaba borracha se comportaba como una niña de dos años que no puede estar sin su mamá.

—. Sigues en la Sala? Ya voy para allá, no te muevas y no aceptes nada más —escucho como la chica hizo un "Ujum" Dándole a entender que estaba en la sala.

—. Disculpa Helios, me tengo que ir, mi mejor amiga me necesita.

— No te preocupes Lyrae, prestame tu celular —.La chica obedeció y le dio el celular, el chico tecleo varios dígitos y luego le devolvió el celular.

 —. Mi número, para ver cuando nos podemos reunir y seguir hablando de astronomía —la chica guardo el celular en el bolso para sonreír de vuelta y despedirse de Helios con un beso en la mejilla y luego salir en busca de su amiga.

Cuando bajo, encontró a su amiga arrecostada en la barra de la Sala dormida con el maquillaje corrido, el pelo alborotado, el vestido arrugado y con una de sus botas en la mano, saco su teléfono y le tomo una foto, definitivamente le iba a hacer bullying todo el mes.

La agarro tratando de evitar uno de sus besos que daba por efectos del alcohol para teclear en una aplicación en busca de un auto que las viniera a recoger, salió con su amiga al frente de la casa esperando el taxi, para luego de 15 minutos llegara. Montó primero a su amiga y luego ella, no podía llevarla a la casa de Hestia porque los papás acabarían con la pelirroja, así que dio la ubicación para ir a su casa.

Cuando llegaron la pelirroja salió del auto corriendo, apresurandose dio las gracias al conductor y pagándole para ir en busca de su amiga quien ahora estaba vomitando en un arbusto 

—. Hestia! Te voy a matar! —dándole palmaditas en la espalda apartando la mirada con asco esperando que la chica terminase de vomitar , abrió la puerta de su casa y cerro después para luego en silencio ir a su habitación tratando de no despertar a su mamá y luego tirar a la borracha en la cama y quitarle la otra bota y acostarse a su lado, quedando las dos dormidas.

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En un lugar remoto del espacio, se encontraban diez personas en tronos flotantes formando un círculo que rodeaba a un ser encapuchado.

 —, mis señores, ya los encontramos, son dos, un varón y una mujer, se encuentran ubicados en el planeta Tierra, al parecer alguien uso magia antigua para ocultar sus poderes —varios en la Corte hicieron abucheos y se escucharon murmuros , hasta que una voz imponente callo a todos en el trono más grande

 —. Traiganlos, los necesitamos vivos, ellos son la llave para la destrucción. —se escucharon fuertes risas en lo que el encapuchado hacia una reverencia para abandonar el lugar y seguir la orden

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Holaa, cómo están? Espero que les guste este nuevo capítulo, en mis redes sociales estaré dando pistas sobre la siguiente parte, no se olviden de votar 🫶