i want you again; a.i {atw II.}

fifteen.

[1/3 maratón]

Ashton me despierta pasando sus grandes manos por mi estómago y susurrándome al oído.

-Bebé, tienes que levantarte.

-No quiero.

-Tenemos que ir al médico, ¿recuerdas? Algo de que vamos a ser padres y eso.

-¿Si te digo que no eres el padre me dejas dormir?

-¿Qué?

-Era una broma, Ashton. Una broma.

-Ah.

-Qué tonto eres.

Río y me giro, quedando cara a cara con él.

-Te quiero -le doy un beso rápido en los labios, y él sonríe.

-Y yo a ti, pero hoy tienes tu primera ecografía y tienes que levantarte.

Entierro mi cara en la almohada y emito un quejido.

-Vamos, ¿no tienes ganas de ver a tu bebé por primera vez? Porque yo sí.

-No estoy preparada para verlo -murmuro.

Me coge de la muñeca y hace que me gire. Me sienta en su regazo y me abraza.

-¿En serio?

Asiento y comienzo a jugar con mis dedos.

-No es que no quiera tener un bebé contigo, es que...

-¿Qué pasa, bebé?

-Tengo la impresión de que es muy pronto... No sé... Aún no he acabado con mis estudios, acabo de cumplir los 20...

-Ya no eres una adolescente, Elizabeth. Y yo tengo un trabajo, tenemos una casa y una relación estable. A lo mejor sí es un poco pronto, pero voy a querer a ese bebé igual si lo tenemos ahora o dentro de diez años, ¿sabes? Yo lo único que sé con seguridad es que quiero formar una familia contigo.

-Yo también quiero formar una familia contigo, pero es que...

-Tienes miedo, ya lo sé. Yo también, estoy aterrorizado. Quiero decir, es un bebé, dios mío, es una personita que he hecho yo contigo. Y no sé si voy a ser un buen padre para él o ella.

-Vas a ser el mejor padre que pueda tener -paso las manos por su cuello y le beso.

Por mucho que me quejo, sé que tengo que ir. Además, quiero ir.

Hoy voy a escuchar los latidos de mi bebé.

-o-

Cuando llegamos a la consulta, el doctor Ryan dice que me tumbe en la camilla, y eso hago.

Ashton mira nervioso a todos lados y me coge de la mano.

-Creo que me voy a desmayar -me susurra Ashton al oído.

-No es la primera vez que un futuro padre se desmaya en esta sala, ¿sabe, señor Irwin? -dice el doctor Ryan mientras revisa sus probables cosas de ginecólogo.

Ashton se sonroja y yo suelto una carcajada.

Me levanto la camiseta y el doctor Ryan me aplica en la barriga un gel que está tan frío que me pone los pelos de punta. Coloca un aparato en mi barriga y el agarre de ashton en mi mano se hace más fuerte.

-¿Estás de apenas seis semanas, verdad?

-En realidad llevo ocho.

El doctor Ryan frunce el ceño y asiente.

-¿Preparados para escuchar sus latidos? -asiento y dirijo mi mirada a Ashton, quien tiene los ojos muy abiertos y el pulso tembloroso.

Tengo la impresión de que él tiene más miedo que yo.

El doctor Ryan gira una ruedecita de un monitor y de repente se escucha.

Noto que se me resbala una lágrima y me la seco con el dorso de la mano.

-Esto es increíble -dice Ashton.

-Lo sé...

El doctor Ryan nos mira y sonríe. Luego me da un papel para limpiarme el gel de la barriga, y a Ashton le da un CD.

-¿Qué es esto?

-La ecografía, grabada.

-¿Entonces todo va bien?

-Elizabeth... no todo va bien.

-¿Qué? ¿Por qué? -preguntamos Ashton y yo al mismo tiempo.

-Es un embarazo de riesgo, estás más delgada de lo que deberías. Si no estuvieras embarazada no sería un problema, pero, según tu constitución y lo que va a necesitar el bebé, necesitas ganar al menos siete kilos, además de los que ganarás luego, teniendo en cuenta de que has de comer por dos.

-¿Y qué significa que es un embarazo de riesgo?

-Tienes que tener cuidado con lo que haces. No moverte mucho, no cargar peso, y sobretodo, ten cuidado con las caídas y los golpes. Cualquier impacto en tu torso podría ocasionar el aborto inmediato. Sobretodo durante el primer trimestre.

-¿Y interfiere en las relaciones sexuales? -pregunta Ashton, yo le pego un manotazo.

-No... No mucho. Debes tener cuidado y que ella esté en una posición cómoda...

Me estoy muriendo de la vergüenza.

-...si lo hacéis boca arriba es mejor para el feto, y...

-Vale, vale, lo hemos entendido -le interrumpo.

-¿Cuántas veces comes al día? -me pregunta.

-Dos. El almuerzo y la cena.

-¿No desayunas?

-A veces le hago tortitas o crêpes... pero muy pocas veces ahora que los dos trabajamos -contesta Ashton por mí.

-Ahora debes comer cuatro veces. Y abundantemente, al menos hasta que ganes los kilos que te faltan.

-Pero... eso es mucho.

-Tienes que ganar los siete kilos a ser posible en menos de dos meses.

-Vale... está bien.

-Tienes que venir dentro de una o dos semanas para comprobar el desarrollo de tu bebé. Si no eres capaz de comer tanto, ven aquí y te puedo enviar a un nutricionista para que te dé una lista de alimentos o incluso algunos medicamentos.

-Yo me encargaré de que coma -dice Ashton.

Salimos de la consulta y en el ascensor, Ashton me coge de las mejillas y me besa.

-Va a salir todo bien... -me da un beso en la frente, y otro en la punta de la nariz-. Y ahora vayamos a un restaurante de esos en los que te sirven las hamburguesas más grandes que tu cara.

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Awwwwwwwh.

¡Sorpresa! SÍ, ES UN MARATÓN.

Un maratón especial por el cumple de Ashton bebé bonito Irwin

Subo el capi dentro de poco, espero que os guste