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"Su Majestad, le dije que no debe comer el pastel."

"No lo dije".

Astria le restó importancia, pero Sena, con mirada dudosa, tomó la palabra.

"... Por favor, límpiate la nata montada de las comisuras de los labios antes de hablar".

"¿Tenía nata en la boca?".

"Sí. De forma bastante visible".

"Ya veo."

Astria se limpió rápidamente la nata de los labios con la lengua y luego cerró la boca.

Sena sonrió levemente y miró con odio a Chris. En serio, ¿darle pastel a un paciente diabético grave?

Chris mostró en silencio su mano derecha. Estaba hinchada y roja. ...Tú también has sufrido mucho.

Sena se dirigió entonces a la Emperatriz.

"Quieres vivir mucho tiempo, ¿verdad? Entonces deberías alejarte de los dulces".

"Entiendo".

La respuesta de Astria no indicó comprensión alguna.

Sena suspiró ligeramente.

"Comer todo lo que quieras no es bueno para la salud. Especialmente para vos, Majestad".

"Si te preocupa, quédate cerca de mí. Incluso cuando duermas, incluso cuando trabajes. Soy tu médico personal, después de todo".

Sena se tensó. Está hablando de su dolor.

"...Tendrás que aguantar incluso sin mí."

"Siempre que tengas antojo de dulces, puedes comerme a mí en su lugar".

Sena retrocedió sutilmente, cautelosa con Astria. Astria agarró rápidamente la muñeca de Sena y tiró de él hacia ella.

Sena se sintió atraído por Astria como si lo abrazaran. Con una risita profunda, Astria susurró al oído de Sena.

"Si sigues huyendo así, lo haré delante de todos".

"¿De qué estás hablando?"

"De hacer un bebé".

'¡Es una desvergonzada...!'

La cara de Sena se puso roja. En la época medieval, este tipo de bromas ligeramente subidas de tono eran habituales, y la gente era inmune a ellas. Sin embargo, el comentario de Astria no parecía en absoluto una broma, lo que dejó a Sena descolocada.

"Aunque sólo sea por eso, ¿no nacerá el príncipe más grande con una cara como la mía?".

Astria sonrió con satisfacción.

"Tengo curiosidad por saber a quién se parecerá la personalidad del niño. ¿Seré yo o tú?".

"Tú... Realmente no lo sabes. La personalidad de una persona no es innata; está influida por su educación".

"¿Es así?"

"Sí. La educación juega un papel importante".

Sena asintió. Ignorar las tendencias innatas sería una tontería, pero con una buena educación, un niño florecería.

...¿Por qué habla de esto? ¿Se olvida de algo importante?

'¡No es el momento para esto!'

Se había sentido demasiado aliviado al pensar que la esperanza de vida de Astria había vuelto a la normalidad. Reunirse con los miembros más importantes de la iglesia e invocar un juicio religioso.

Me Convertí En El Médico De La Tirana Enferma TerminalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora