Me Convertí En El Médico De La Tirana Enferma Terminal

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Los amplios baños imperiales.

En una bañera que casi podría llamarse piscina, Sena sumergió la cabeza hasta la mitad.

Las burbujas subieron a la superficie.

¿Cuánto tiempo estuvimos besándonos antes? ¿Una hora?

Era la primera vez que se besaba durante tanto tiempo.

...Y su primer beso también fue con Astria.

Es extraño. Ella cree que cogerse de la mano y dormir juntos es suficiente para hacer un bebé, pero besa tan bien'.

¿Quién le enseñó a Astria sobre sexo? ¿Realmente no había nadie que se lo dijera?

Más que nada.

'Ni siquiera estamos en una relación todavía, así que no deberíamos estar besándonos así.'

Un beso era un gesto de afecto entre personas que se gustaban. Sena y Astria no eran nada el uno para el otro todavía.

Pero se besaban todo el tiempo, dormían abrazados por la noche. Sinceramente, ¿no hacían todo juntos excepto "eso"?

La secuencia estaba un poco... no, muy desordenada.

La cultura confuciana arraigada en su alma gritaba: "¡Esto no está bien!".

"Puh".

Sena salió de la bañera y sacudió la cabeza.

Definitivamente, esto no estaba bien.

Decidió volver y hablar con propiedad.

Besarse era algo para gente que tenía una relación.

Sena terminó de bañarse y se escondió frente al pasillo. Disimuladamente asomó la cabeza.

"¡Sena-nim!"

Por supuesto, Serilda estaba allí. Hoy, Luna estaba con ella.

Sena habló como siempre.

"¿Puedes dejar la ropa e irte?".

"¿Por qué nunca nos concedes el honor de secar tu cuerpo? Incluso te bañas sola. Sinceramente, estoy un poco dolida".

"..."

En la época medieval, los nobles tenían criadas que los atendían incluso durante el baño. Aquí era de sentido común, pero para Sena, era cualquier cosa menos eso.

"Lo siento, no es que no confíe en ti... Es que estoy acostumbrado."

"...Entendido. Esperaremos fuera".

Una voz hosca. Sólo cuando el sonido de sus pasos se desvaneció, Sena examinó cuidadosamente el interior.

Al ver que no había nadie, Sena entró y miró la ropa que había dejado Serilda.

Era un bonito conjunto de pijama rosa.

Al darse cuenta de que era una sutil venganza de Serilda, los labios de Sena se crisparon.

Pero como no había otra cosa que ponerse, no pudo evitar ponérselo.

"¿Su Majestad?"

Sena abrió con cuidado la puerta y entró.

"..."

Astria, que siempre le daba la bienvenida, estaba tumbada en la cama leyendo algo.

Era la primera vez que traía trabajo al dormitorio. Debía de estar muy ocupada últimamente.

'Bueno, los monstruos que vimos en la reciente subyugación eran inusuales'.

Sena, vestida con el pijama, se tumbó suavemente a su lado.